Dice que la fortuna viene de su familia, que tenía haciendas
Echevarría se asume como el hombre más rico de Nayarit
Este año él y su esposa rompieron con el panismo porque lo rechazaron como militante y a su cónyuge como candidata
Tepic, Nay., 1º de julio. En esta capital se asegura que Antonio Echevarría Domínguez, actual gobernador de Nayarit, es el hombre más rico del estado. Los políticos hacen chistes de esta condición: "Cuando uno se baja del avión, el taxi en el que te subes es de Echevarría. El hotel donde te hospedas es también del gobernador, al igual que el restaurante donde comes. Si uno se enferma, el hospital también le pertenece y si te mueres, también el panteón es de él".
El mandatario dice, en entrevista con La Jornada: "Pueblo chico, infierno grande. Mi familia era de las más ricas en el gobierno del presidente Benito Juárez, cuya economía se fincaba en las haciendas. Esa es la verdad. Tenía una fábrica de hilados y tejidos en 1865, en Santiago Ixcuintla. Tenía tres mil trabajadores, muchas tierras. Aquí donde vivo, era el rancho de mi bisabuelo, de cien hectáreas. Se urbanizaron y las vendimos.
"Aquí, donde está la Coca-Cola, era parte de ese rancho. Lo que hemos hecho es multiplicar los activos fijos (las tierras y propiedades inmobiliarias) y nos han dado recursos para invertir en nuestras empresas. Sí, tenemos el grupo empresarial Alica (GEA), que es el más importante del estado. A los empresarios nayaritas los siento un poquito envidiosillos, yo no soy rico de ahora, estuve 12 años como tesorero del estado y no llegué ahí con una mano atrás y otra adelante. Ya desde que estaba el gobernador Rogelio Flores Curiel (1976-1981) mi grupo empresarial le prestaba para pagar la nómina".
En la trayectoria de Echevarría Domínguez, destaca que su primer puesto importante fue en la tesorería de la Universidad de Nayarit; se dice que ahí empezó a amasar la fortuna que acrecentó en los dos sexenios en que fungió como tesorero de los gobiernos priístas de Flores Curiel y Emilio M. González (1981-1987), su compadre. Otro de sus cargos en los gobiernos del Revolucionario Institucional (PRI) fue como secretario general de gobierno en la primera parte del sexenio de su antecesor, Rigoberto Ochoa Zaragoza (1993-1999)
Existen otras empresas que no asume como propias, aunque es del dominio público que el mandatario estatal es socio junto con otros grandes empresarios, como la familia Menchaca, en el caso de las concesiones gasolineras.
Asimismo, se le ubican propiedades en los polos de desarrollo turístico, como Bahía de Banderas, donde -según el empresario panista Ceferino Ramos- sería propietario del club de golf Flamingos, entre otras propiedades turísticas.
Echevarría Domínguez se asume como un hombre rico. No niega las versiones públicas de que es el más acaudalado del estado.
Hace seis años, el mandatario estatal consiguió la gubernatura del estado mediante una coalición de PRD, PAN, PT y el local Partido de la Revolución Socialista. Sin embargo, meses después de llegar al gobierno, esa alianza fracasó. Gradualmente fue deshaciéndose de los funcionarios perredistas que como pago había colocado en su gobierno.
Echevarría entonces se acercó al PAN y se hizo miembro adherente (militante a prueba, sin derechos), y ya para el segundo trienio de su sexenio, el PAN se alzó con cuatro de las 20 presidencias municipales. No obstante, sus primos hermanos, Leopoldo Domínguez y Dolores Porras Domínguez, que fueron candidatos a alcaldes, perdieron la elección.
Para esta nueva contienda, en el último año de su administración, Echevarría y su esposa, Martha Elena García (quien había buscado ser candidata del blanquiazul a suceder a su cónyuge) rompieron con el panismo. Primero porque el PAN rechazó la solicitud del mandatario para ser militante, y en segundo lugar, porque no aceptaron que la "primera dama" fuera candidata del blanquiazul.
"Un jerarca nacional panista, que vino al estado, dijo que no aceptaron mi afiliación porque me quería quedar con el partido. El PAN dado es caro, hijo de la chingada, (dice entre risas), lo lamento porque yo creía que era un partido de hombres y mujeres libres, pero no es así, la prueba está en que aceptaron un dedazo con Manolito (Manuel Pérez Cárdenas, actual candidato a la gubernatura por ese partido); se culimpinaron, como dicen los rancheros. Yo soy foxista. Le he dicho al presidente Vicente Fox: Yo te conozco a ti desde hace 30 años en la Coca Cola, y tú a mí, pero no acepto a ese partido (PAN)", comenta el gobernante.