Responsabilizan los trabajadores a Reyes Tamez
En el abandono, la Dirección General de Educación Indígena
Prueba del racismo que caracteriza a la administración de Vicente Fox es la situación, desde todo punto de vista irregular, que impera en la Dirección General de Educación Indígena (DGEI), donde, a ciencia y paciencia del titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Reyes Tamez Guerra, "hace más de dos años y medio no se hace ningún trabajo, los sueldos se siguen pagando y 150 trabajadores permanecen en un edificio que se cae a pedazos y está en peligro de derrumbarse".
Así lo denunciaron ayer Joaquina Sandoval Acevedo y Francisco de la Cruz Jiménez, representantes sindicales de la DGEI, al señalar que la Secretaría de la Función Pública, por su parte, en lugar de atender las quejas que han presentado "está haciendo tortuguismo porque José Miguel Franco Noriega, encargado del expediente, es un títere de la SEP", ya que "todavía no puede leerlo pese a que lo presentamos en 2003".
La DGEI pertenece a la Subsecretaría de Educación Básica y Normal, cuyo titular es Lorenzo Gómez Morín, un panista ultraconservador que ha negado la ayuda oficial, dispuesta por el Congreso de la Unión, a las estudiantes de secundaria y preparatoria que por accidente estén embarazadas, ya que, según el funcionario, "no estamos para premiar a las putas", de acuerdo con testimonios publicados por La Jornada que nunca desmintió.
Para agrupar en un solo espacio a todos los empleados de Educación Básica y Normal, Gómez Morín alquiló la torre Vid, en avenida Cuauhtémoc 1232, pagando 100 mil pesos mensuales por piso, pero los trabajadores de la DGEI se negaron a trasladarse allí ya que en donde se encuentran actualmente la mitad de ellos, en Azafrán 486, colonia Granjas México, cuentan con un espacio de 6 mil metros cuadrados que en la torre se reduciría a 4 mil. La otra mitad del personal labora en un deteriorado edificio de la calle Obrero Mundial, cuyo estado físico es tan lamentable que "hace más de dos años que los jefes no se paran por ahí".
El 6 de marzo de 2003, el responsable de la DGEI, Rubén Viveros Alvarez, propuso un convenio de "alternancia", en virtud del cual los jefes de área supervisarían a los trabajadores en Obrero Mundial y en Azafrán, pero nunca lo cumplieron. Ante esto, los trabajadores demandaron la intervención directa del titular de la SEP, Reyes Tamez Guerra, pero quien les contestó fue Viveros Alvarez.
Inconformes con la burlona actitud de Viveros, que lleva 12 años en ese cargo, los dirigentes sindicales iniciaron un juicio de ampara contra Tamez Guerra ante el juzgado 14 en materia administrativa del Distrito Federal, y lo ganaron el 11 de mayo pasado, según la sentencia del expediente 582/2005, pero aunque han transcurrido más de 30 días desde entonces, el titular de la SEP no les ha dado ninguna respuesta, un incumplimiento que según las leyes vigentes podría costarle la destitución por desacato.
El tortuguismo de la Secretaría de la Función Pública, subrayaron Joaquina Sandoval y Francisco de la Cruz, "huele a complicidad, porque nunca han intervenido ante los señalamientos de que Viveros está desviando fondos a través de los viáticos por comisiones, y esto sucede hace muchos años y nadie investiga".
El mecanismo que se usa para esto, añadieron, es que a "secretarias que apenas terminaron la enseñanza secundaria las mandan a los estados dizque a dar capacitación técnica a los maestros bilingües, y lo que pasa es que no van, o van menos días de los que indica su permiso y hacen un servicio completamente deficiente, pero eso tampoco le preocupa a Gómez Morín; al contrario, creemos que lleva su corta", concluyeron.
Para apoyar sus palabras, los sindicalistas mostraron a este diario copias de órdenes de trabajo, estados contables y boletas de entrada y salida de algunos empleados que fueron enviados en "comisión", así como registros de los insultos y amenazas que han recibido en ocasiones anteriores por dar a conocer estas anomalías, que nadie en el gobierno federal toma en cuenta.