EN LA ERA DEL HIELO | 20 de junio de 2005 |
Las
pequeñas y medianas empresas apenas utilizan las ventajas de la
tecnología para mejorar sus procesos productivos o la
relación con los
clientes. Años de crisis han dejado las arcas vacías para
invertir en
la modernización y para educar en la mejor utilización de
los avances
técnicos
José González Méndez Falta de información, desconfianza, inercia o carencia de recursos son los factores que impiden a las micro, pequeñas y medianas empresas (Pymes) dar el paso para adquirir tecnología, lo que en algunos caso ayudaría a incrementar su capacidad operativa y elevar las utilidades. El reducido margen de ganancias entre las Pymes fue un factor determinante para que el año pasado las empresas medianas invirtieran en ese rubro únicamente 0.7 por ciento de sus ganancias, mientras que en las pequeñas la cifra se redujo 0.4 por ciento, de acuerdo con la encuesta IT Opportunity Midmarket, realizada por la empresa International Data Corporation,. Para Alejandro Navarro, de Hewlett Packard (HP), esto demuestra que las Pymes "no han asimilado los alcances de las más sencillas aplicaciones tecnológicas como, por ejemplo, tener en red las cuatro o cinco computadoras que poseen". La empresa Selec, también proveedora de soluciones tecnológicas, asegura que una computadora permitiría al micro y pequeño empresario ahorrar 10 por ciento del tiempo que utiliza en recolectar y analizar su información y 35 por ciento en la toma de decisiones, además de mejorar su relación con clientes y proveedores. Del lado de las Pymes, sin embargo, el asunto es más complejo. Pedro Saucedo, presidente de la Asociación Latinoamericana de Micros, Pequeños y Medianos Empresarios (Alampyme), asegura que la adquisición de tecnología no es sólo un asunto de voluntad. Señala que la crisis de 1995 dejó tan mermados a los pequeños empresarios, que "la mayoría sigue operando con números rojos o con utilidades de 3 a 5 por ciento al año. Con ese nivel de ganancias es imposible que los empresarios inviertan recursos en tecnología", afirma. Usos de la tecnología en las Pymes Luis García, gerente de Consultoría de IDC, asegura que en la mayoría de los casos los pequeños empresarios utilizan la tecnología para labores ajenas a los procesos productivos. Señala que en 42 por ciento se usan para tareas administrativas y contables ventas, proveduría o pagos al IMSS, y estima que sólo 8 por ciento se aplica en ingeniería de procesos. Refiere que los pequeños empresarios se enfrentan con dos problemas principales a la hora de adoptar nuevas tecnologías: presupuesto insuficiente y falta de información. Considera que su adquisición debe responder a un objetivo primordial que es incrementar los rendimientos del proceso productivo, pues de lo contrario se corre el riesgo de invertir sólo porque las aplicaciones tecnológicas son novedosas. En México, de acuerdo con la Secretaría de Economía, hay 2.7 millones de micro, pequeñas y medianas empresas, de las cuales sólo 28 por ciento posee una computadora (muchas de ellas, incluso, continúan realizando sus trámites fiscales en los café Internet). En la empresa Opentec hace años asimilaron esta tendencia. "Estamos conscientes de que 90 por ciento de las empresas en México son micro, pequeñas y medianas, y esa estructura no va a cambiar radicalmente", por lo que, al igual que otras empresas como Microsoft, HP, Oracle, Novell, Sun Microsystems, IBM, Nextel, Intel y Ecofin, han desarrollado departamentos para la atención a las Pymes. ¿A qué se debe que las Pymes inviertan poco en tecnología? se le pregunta a Navarro, de HP. No conocen sus alcances ni están conscientes de la cantidad de problemas que pueden resolver con una computadora; en otros casos se debe a la falta de conocimientos para operarla o a la falta de recursos. Pero la adquisición de tecnología no se limita sólo a comprar computadoras, es un proceso más amplio, ¿no es así? Sí, pero una terminal puede resolverles muchos problemas y abre muchas posibilidades. Los pequeños empresarios están preocupados por conservar y ampliar sus clientes, pero no integran en sus estrategias la parte tecnológica. Las empresas de tecnología ofrecemos soluciones de negocios. No les buscamos clientes ni aquí ni en el extranjero, les ayudamos a que tengan una mejor comunicación con ellos para que incrementen sus ventas. Además de mejorar la comunicación en el mercado, las aplicaciones tecnológicas permitirían a los pequeños empresarios automatizar sus operaciones, mejorar su gestión de inventarios, reducir costos de producción, aumentar sus ventas, relacionarse con clientes y proveedores y garantizar la continuidad de la empresa. En las condiciones generales del mercado "la tecnología ya no es un lujo para las empresas, sino una oportunidad para sus negocios", sostiene, por su parte, Saúl Espinosa, director de Estrategia para Pymes, de Microsoft. Resultados de la IT Opportunity Aunque el año pasado las pequeñas y medianas empresas invirtieron menos de 1 por ciento de su facturación en la adquisición de tecnología, Luis García dice que los resultados de la encuesta IT Opportunity Midmarket indican que la mitad de las Pymes incrementarán el uso de estos recursos en 2005. La encuesta señala también que el mercado que disputan las empresas asciende en México a 7 mil millones de dólares y a 145 mil millones en América Latina. García asegura que el paso crucial para las empresas proveedoras de tecnología será que las Pymes dejen de verla como un simple soporte y la asimilen como una parte vital de su operación y crecimiento. Por su parte, Felipe Sánchez, presidente en México de Microsoft y que encabeza la Asociación Mexicana de la Industria de Tecnologías de Información (AMITI), reconoce que las aplicaciones tecnológicas han tenido poca penetración en el país, pues participan con 1 por ciento del producto interno bruto. De ahí el objetivo de "hacer de la tecnología de la información un habilitador de la competitividad". Debate vigente Luis García reconoce que actualmente persiste un debate en torno a si la mera adquisición de tecnología ayuda a mejorar el proceso productivo y las ganancias de una empresa, o si se requiere primero adoptar una estrategia de negocios, que luego sea sustentada con las aplicaciones tecnológicas. La discusión sigue ahí y hasta el momento una parte no ha logrado convencer a la otra. Sin embargo, el gerente de Consultoría de IDC insiste en que la tecnología debe auxiliar a las pequeñas y medianas empresas en la parte contable, aunque lo fundamental es que impulse el proceso productivo. En torno a la actitud del micro y pequeño empresario mexicano para adquirir tecnología, señala que es "muy práctico" y sólo adopta una aplicación "hasta que la necesita", es decir, una vez que se convencen de que están perdiendo clientes § |