Usted está aquí: martes 14 de junio de 2005 Opinión MELON

MELON

Luis Angel Silva

Labor a favor del son

Ampliar la imagen Luis Arcaraz

SI USTED, MI yeneka, es admirador de la Sonora Matancera le comunico que del 2 al 6 de agosto se celebrará el décimo primer Encuentro Internacional Matancero en Medellín, Colombia, donde participarán los mexicanos Marcos Salazar Gutiérrez y Arturo Yáñez. Habrá conferencias, un paseo campestre y, por supuesto, un baile para clausurar el encuentro, que año con año se efectúa.

MARCOS Y ARTURO serán ponentes por cuarta ocasión, y su participación versará sobre Tin-Tán y sus películas donde aparecieron varias figuras relacionadas con la música cubana. Así que, mi nagüeriero, rompa su cochinito y acompañe a este par que sigue haciendo una gran labor, al dar a conocer lo que se ha hecho en nuestro país con la música con salsa, jícamo y saoco, así como en pro del son y los soneros mexicanos.

TAMBIEN PERMITAME DARLE reconocimiento a Bernardo Rivera que, calladito, calladito, hace una tarea digna de elogios en beneficio del talento nacional, por medio de sus colaboraciones con el sello discográfico Tumbao.

ESTE, SU ENKOBIO, se reunió con el señor Rivera en días pasados y estuvimos cinco horas hablando de son y soneros, así como de grabaciones que, por desgracia, no trascendieron al grueso del público, pero que son verdaderas joyas. Ojalá que don Ramón Rojo y el Conjunto Cual no las encuentren y las destrocen.

YA ENCARRERADO EL ratón, seguiré con la programación de La Sabrosita que, para ser justo, en determinados espacios abusa del mal gusto y en otros enseña falta de investigación y conocimientos. Eso es algo imperdonable en personas que se supone deben tener conocimiento de causa, ya que forman opinión entre el auditorio que merece respeto.

EN UN PROGRAMA dedicado a Beny Moré, el conductor de un espacio que lleva varios años al aire enseñó que tiene oído de artillero, puesto que La cocaleca y Qué te parece Cholito fueron grabadas por Yeyo y Cané, no por Beny, imperdonable error, ya que esa persona se jacta de ser erudito en la materia. Peor aún que el director de la emisora no esté enterado que Mongo Santamaría ya falleció, lo mismo que J. P. Torres, que no es otro que Juan Pablo Torres, trombonista cubano que pasó una temporada, aunque breve, en nuestro país.

TAMBIEN DARE MI opinión respecto al programa Reventón musical que en vez de beneficiar perjudica, puesto que la señal de Televisa tiene largo alcance. Al ver y oír lo que se presenta en dicho espacio, el espectador se lleva una impresión negativa en cuanto a la calidad del músico nuestro. Aquí cobra vigencia aquello de que popularidad no es sinónimo de calidad. En ese espacio la mayoría de los que aparecen, empezando por los ¿animadores?, dan pena ajena. Ojalá Pepe Villar tome cartas en el asunto y logre reunir talento autóctono, que por fortuna aún queda, para que se presente en dicho bodrio y saque las castañas del fuego.

QUE LEJANO ESTA el tiempo en que la calidad del músico mexicano estaba fuera de duda. Por lo que parece, por desgracia, ¡no volverá! Si hay alguien que dude de mis palabras, puedo demostrar que tengo razón. Aquí le van algunos nombres de orquestas que brillaron con luz propia aquí, allá y acullá.

EMPEZARE POR LUIS Arcaraz, Larry Son, Ismael Díaz, Everet Hogland, Juan García Esquivel y aquí le paro para darle crédito a tres grandes de la música cubana en nuestro país: Chucho Rodríguez, Arturo Núñez y Dámaso Pérez Prado, que saltó a la fama en México.

EN CUANTO A conjuntos y soneros, los hubo de todos colores y sabores, pero en su mayoría con mucha calidad. Bernardo Rivera puede, con su discoteca, dar fé de mis palabras, así que ¿quién le pone el cascabel al gato?

PARA TERMINAR, LAS gracias a Román Munguía, de Guadalajara; Alfredo Churión, de Caracas, Venezuela; José Luis Ajzenmesser, de Buenos Aires, Argentina, y a las princesas Brenda Berenice Domínguez Ramírez y Rocío Guzmán por sus emilios. A la voz de fuego se va Covadonga. ¡Vale!

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