La familia "pasó la charola"
Almoloya de Juárez, Mex., 13 de junio. Después de "pasar la charola" entre familiares y dejar en garantía hipotecaria al menos cinco propiedades, entre éstas, inmuebles herencia de sus padres, Raúl Salinas de Gortari reunió hoy por la tarde las garantías exigidas por la afianzadora Sofimex para que ésta depositara la fianza de 30 millones de pesos y el preso pueda obtener su libertad bajo caución.
Después de que sus abogados entregaron al filo de las 19:15 horas la póliza que acredita la fianza exigida por la juez 13 de procesos penales federales con sede en el Reclusorio Sur, Silvia Estrever Escamilla, la juzgadora dio trámite a la petición del hermano del ex presidente Carlos Salinas de Gortari para que enfrente en libertad el proceso que se le sigue por enriquecimiento ilícito.
A partir de que Raúl Salinas obtuvo el auto de libertad por el homicidio de José Francisco Ruiz Massieu, el pasado jueves por la noche, el equipo de abogados del "hermano incómodo" inició las gestiones para que saliera del penal de Santiaguito en Almoloya, estado de México.
El pasado viernes, la juez Estrever rechazó la petición del abogado José Luis Nassar Daw para que no se exigiera la reparación del daño al inculpado, en razón de que no hay una persona física afectada, además de que los bienes del procesado y sus cuentas bancarias están congelados desde hace diez años. Sin embargo, la juzgadora desechó los argumentos y calculó la fianza "de acuerdo con las pruebas obtenidas en el proceso". Además consideró Estrever que, "como es de dominio público", el procesado "podía tener altos ingresos" y estaba en posibilidad de allegarse recursos económicos para cubrir el monto exigido.
Pese a las quejas y reclamos de la defensa legal del inculpado, finalmente la juzgadora tuvo razón y en menos de 72 horas (la fianza fue fijada el viernes en la noche) la familia Salinas reunió alrededor de 950 mil pesos en efectivo que fueron entregados a la afianzadora Sofimex, la cual además aceptó propiedades de la familia -parientes del acusado confiaron que una de éstas era de Carlos Salinas de Gortari- para cerrar el trato y que se exhibiera la póliza exigida.
Después de llevar a cabo los trámites de rigor, la juez Estrever notificó vía fax a un juzgado federal con sede en Toluca, estado de México, la orden de dejar en libertad a Raúl Salinas, documento que fue llevado a Santiaguito por un actuario judicial.
Alfredo Méndez, enviado, y Jesús Aranda, reportero