El agresor se encuentra en libertad; ella perdió una pierna y su trabajo
Maltrato en IMSS e indiferencia jurídica padece mujer atropellada en Veracruz
Veracruz, Ver., 19 de mayo. La mañana del 30 de junio de 2004, María de los Angeles Ortiz caminaba sobre la avenida Américas rumbo al domicilio de sus padres, cuando un automóvil Camaro color negro invadió la acera y la embistió aprisionándola contra una barda. El vehículo era conducido por Ricardo Márquez Aguirre, quien venía de festejar su graduación como bachiller.
A pesar de que María de los Angeles quedó consciente y a gritos le pidió que moviera el automóvil para liberar su pierna izquierda, el joven descendió del coche y huyó. Perseguido por algunos vecinos, Márquez Aguirre irrumpió en una vivienda tratando de esconderse, pero la propietaria, una anciana, lo impidió.
El vehículo contaba con seguro por daños a terceros, pero los propietarios de la unidad -padres del joven- no lo activaron inmediatamente y se pidió la presencia de una ambulancia del IMSS, que tardó 45 minutos en llegar. Ricardo Márquez Aguirre es hijo de la subadministradora del IMSS en Veracruz, Dora Emilia Aguirre.
Una vez en el centro médico nacional Adolfo Ruiz Cortines, los galenos le amputaron la pierna izquierda a la víctima. Concluida la intervención quirúrgica continuó el calvario de María de los Angeles porque el personal del nosocomio se negó a realizarle una transfusión sanguínea; durante tres días las enfermeras rehusaron bañarla y tampoco le proporcionaron sedantes para mitigar el dolor.
El maltrato de médicos y enfermeras del Seguro Social, estima, fue producto de las "influencias" de la señora Dora Emilia Aguirre, y de su esposo Ricardo Márquez, médico del IMSS.
Todavía con los efectos de la anestesia tras la intervención quirúrgica, Ortiz Hernández fue presionada por dos abogados -los cuales sólo se identificaron como representantes legales de la familia Márquez Aguirre- para que no procediera legalmente en contra del joven a cambio de llevarla a un nosocomio particular y asumir el pago de los gastos médicos. Como no aceptó, hasta la fecha no ha recibido ningún respaldo económico y el proceso legal abierto ante la Procuraduría General de Justicia sigue empantanado.
"La vida me cambió de tajo, perdí mi pierna y la capacidad de ser autosuficiente, perdí mi trabajo, volví a depender económicamente de mis padres y no puedo pagar los estudios de mi hija de 12 años."
María de los Angeles se desempeñaba como gerente de una empresa especializada en el manejo de residuos tóxicos y cursaba los últimos semestres de la carrera de comercio internacional, además estaba por ingresar a la docencia en la Escuela Superior de Comercio Internacional. Hoy depende de la terapia de instituciones altruistas y el apoyo que se ha canalizado por parte del DIF municipal.
En tanto, el expediente judicial 269/2004 abierto contra Ricardo Márquez Aguirre sigue prácticamente congelado y la titular del juzgado tercero, Araceli Estrada, concedió la libertad inmediata al inculpado, pese a que se presentaron pruebas documentales del accidente y el testimonio de siete personas que confirmaron el agravante de abandono de la víctima.
María de los Angeles Ortiz ha dirigido cartas al presidente Vicente Fox, al gobernador Fidel Herrera, a los responsables de la Procuraduría General de Justicia del Estado y no ha recibido respuesta alguna. Con el apoyo de amigos y las personas que conocieron de su caso, realizó una marcha y plantón frente al edificio que alberga la Subprocuraduría de Justicia en esta ciudad, también sin resultado alguno.