EU no tomará una decisión basada en amenazas ni arrebatos: Departamento de Estado
Legisladores demócratas piden a Bush extraditar a Venezuela a Posada Carriles
Opositores venezolanos cuestionan "la bravuconada" del presidente Hugo Chávez
Ampliar la imagen Simpatizantes del presidente Hugo Ch�z pisotean una bandera estadunidense frente a la embajada de ese pa�en Caracas y exigen la extradici�el anticastrista Luis Posada Carriles FOTO Reuters
Washington, 23 de mayo. Veinte representantes demócratas pidieron la semana pasada al presidente estadunidense George W. Bush que extradite a Venezuela al anticastrista Luis Posada Carriles, acusado de varios atentados, en una carta difundida el lunes por la embajada de Caracas en Washington.
"Estados Unidos no sólo debería rechazar la solicitud de asilo de Posada Carriles, un reconocido terrorista internacional, sino que también debería devolverlo a Venezuela para que enfrente de manera apropiada el caso en su contra", dijeron los legisladores en una carta dirigida a Bush y fechada el 17 de mayo.
Posada "planeó crímenes terroristas desde Venezuela, incluyendo la explosión de un avión de una aerolínea civil que originalmente salió de Venezuela, y luego escapó de una prisión venezolana. Como nación soberana, Venezuela tiene el derecho de buscar justicia en este caso", añadieron.
Horas antes, el vocero del Departamento de Estado, Richard Boucher, aseguró que Estados Unidos no se dejará "amenazar" por Venezuela al decidir si cumple o no con el pedido de extradición a Caracas del anticastrista naturalizado venezolano Posada Carriles, vinculado a la voladura de un avión comercial.
El caso Posada Carriles tensó aún más las relaciones entre Venezuela y Estados Unidos, y el presidente venezolano, Hugo Chávez, advirtió la víspera que revisaría las relaciones diplomáticas con Washington si no extradita al anticastrista.
"Lo que decidamos hacer (con Posada Carriles) se basará en aspectos legales, no en amenazas, no en peleas diplomáticas, no en declaraciones ni en arrebatos o como quieran llamarlo", dijo Boucher.
Venezuela solicitó la extradición de Posada Carriles, quien en la década de los 80 se fugó de una cárcel venezolana cuando la justicia debía decidir en el caso de su presunta participación en la voladura de un avión de Cubana de Aviación en 1976, que cubría la ruta Caracas-La Habana.
Posada Carriles fue detenido el 17 de mayo en Miami -tras haber ingresado a territorio estadunidense por la frontera con México- acusado de violar las leyes de inmigración luego de dar una conferencia de prensa y una entrevista, dos meses después de ingresar ilegalmente al país.
Pero el Departamento de Seguridad Interior (DSI) estadunidense dio una señal de que no concederá su extradición, al advertir la semana pasada que "no envía a gente a países que se cree que actúan en nombre de Cuba". Caracas respondió garantizando que procesará al anticastrista en Venezuela, dentro del convenio de extradición firmado en 1922.
En tanto, este lunes decenas de simpatizantes de Chávez protestaron ante la embajada estadunidense en Caracas. El dirigente oficialista y diputado Darío Vivas, quien encabezó la manifestación, dijo que "Estados Unidos ha estado protegiendo a este terrorista Posada Carriles, que acabó con la vida de 73 personas".
Por su lado, el encargado de negocios de la embajada, Steve McFarlane, dijo que el caso se resolverá de acuerdo con el tratado de extradición y las leyes internacionales.
En el lado opositor, la advertencia de Chávez sobre revisar las relaciones con Estados Unidos fue considerada una "bravuconada irresponsable" por el periodista Teodoro Petkoff, para quien con sus declaraciones "nuestro genio de la diplomacia les lanzó un salvavidas" a los halcones de Washington.
El vocero del Movimiento al Socialismo, Segundo Meléndez, afirmó a su vez que "es cierto que Estados Unidos debe acatar la solicitud venezolana sobre la extradición, pero el presidente Chávez no hace más que desviar la atención de otros problemas", como presuntas irregularidades en la petrolera estatal PDVSA.
De su lado, Boucher evitó comentar otras declaraciones de Chávez hechas el domingo, sobre el interés de Venezuela de colaborar con Argentina, Brasil e Irán para realizar investigaciones sobre energía nuclear para usos pacíficos.
Brasil, por lo pronto, dijo no haber recibido un pedido de cooperación nuclear de Caracas, pero un vocero del Ministerio de Ciencia y Tecnología adelantó que probablemente no cooperaría en una alianza que, "en vista de una posible participación de Irán (...) sería temeraria".
Un director de la recientemente creada Empresa Nacional de Energía de Argentina, Aldo Ferrer, sugirió en cambio que "sería interesante una cooperación con América Latina".
Por otro lado, el vocero del Departamento de Estado sostuvo que Washington cree que "todos los países del continente deben ayudarse mutuamente a cumplir" con la Carta Democrática de la OEA, en momentos en que Estados Unidos propone crear en el seno del organismo interamericano una comisión de monitoreo de la democracia en Venezuela.
La Carta Democrática Interamericana señala que en caso de un golpe de Estado en un país miembro, cualquier otro miembro o el secretario general puede convocar al Consejo Permanente para "adoptar las decisiones que estime conveniente".