En nombre de Unidad Democrática exigió neutralidad en el seno del partido

Si Madrazo se agandalla la candidatura el PRI perderá en 2006, advierte Yarrington

Enrique Martínez exhortó a dialogar como políticos profesionales para fortalecer el grupo

CIRO PEREZ SILVA

Cualquier intento de Roberto Madrazo de "agandallarse" la candidatura presidencial del PRI derivará en una ruptura en este partido y lo marginaría de cualquier posibilidad de ganar la contienda en 2006, advirtió Tomás Yarrington, ex gobernador de Tamaulipas, horas antes de recibir en su casa de la ciudad de México al líder del tricolor para sostener una reunión con Unidad Democrática, grupo antagónico al dirigente del Revolucionario Institucional.

Durante un encuentro con corresponsales extranjeros, Yarrington y los gobernadores de Nuevo León, Natividad González Parás; del estado de México, Arturo Montiel, y de Coahuila, Enrique Martínez, así como el coordinador de los senadores priístas, Enrique Jackson, integrantes del grupo que disputa a Madrazo tanto la candidatura presidencial como la dirigencia de su partido manifestaron, en voz del ex gobernador de Tamaulipas, su preocupación por la ventaja que representa para Madrazo la construcción de su candidatura desde la dirigencia del PRI.

"¿Quién preside la comisión de procesos internos? ¿Quiénes la integran? ¿Quién integra la comisión política permanente del partido? Y finalmente, después de la conformación del Consejo Político Nacional, hace sentir su peso para que el método que elija sea el que mejor garantice el éxito de su candidatura, pues eso aquí y en China se llamaría agandalle. A ver si el dirigente del partido aprovecha su puesto para las decisiones por venir, es decir: quién se queda al frente del secretariado técnico del Consejo Político Nacional", insistió Yarrington siempre en alusión a Roberto Madrazo.

Los integrantes de Unidad Democrática destacaron que ahora se les reconoce como una fuerza real dentro del PRI, y así lo demuestran la serie de encuentros que han sostenido con su dirigente partidista, que continuaron ayer en la casa de Yarrington. "No es una reunión para tratar asuntos banales, es una junta en la que el presidente del Comité Ejecutivo Nacional está reconociendo que hay una capacidad de interlocución y de representación de una fuerza política real que somos los miembros de Unidad Democrática", enfatizó Enrique Jackson.

Lo que necesitamos hacer, sostuvo Yarrington, "es asegurar que vamos construyendo en los órganos de gobierno del PRI la neutralidad necesaria para que una vez que Roberto Madrazo lo diga públicamente, porque nosotros creemos que la decisión la tomó al tercer día de nacido, pero una vez que diga públicamente que va a contender por la precandidatura presidencial, los órganos de gobierno deben estar integrados de tal manera que una vez que deje la dirigencia del partido, entremos todos entre julio y diciembre a hacer una precampaña intensa".

Más conciliador, Enrique Martínez insistió en la necesidad de dialogar "como políticos profesionales" para llegar a acuerdos que fortalezcan al PRI, "¡pues no somos suicidas! Aquí se ha dicho que la elección va a ser difícil, la de 2006; en cualquier partido del mundo hay discrepancias, hay disensos, hay diferencias. Lo importante es que con inteligencia construyamos una candidatura que sea la mejor para vencer".

Interrogados sobre los tiempos para la selección de candidato, nuevamente Yarrington intervino para proponer hora y fecha: "El 27 de noviembre a las seis de la tarde".

Luego de este encuentro con corresponsales extranjeros se dirigieron a la casa de Tomás Yarrington, donde esperaron la llegada de Roberto Madrazo. Al finalizar el encuentro las declaraciones de González Parás y de Roberto Madrazo distaron de aquellas frases encendidas que pronunció por la mañana el anfitrión Yarrington. Madrazo y el gobernador de Nuevo León aseguraron que todo fue unidad y fraternidad, aunque las sonrisas y las frases de terciopelo de ambos no lograron ocultar las primeras cicatrices de la batalla que se libra en el PRI por el 2006.

Por la mañana, luego de reunirse en privado con Madrazo, el líder de los obreros priístas, Leonardo Rodríguez Alcaine, coincidió con la propuesta de llegar a un acuerdo para que el tricolor tenga un candidato de unidad, ya que esta "es la única forma en que podemos regresar a Los Pinos en 2006", aseveró.

Interrogado sobre los espacios que quedarán vacantes en el Comité Ejecutivo y en otras instancias de la burocracia de su partido, Rodríguez Alcaine adelantó que para la comisión nacional de procesos internos le "gusta" el ex dirigente nacional del tricolor, Mariano Palacios Alcocer. Mientras que para la secretaría técnica del Consejo Político Nacional se pronunció por los ex gobernadores de Hidalgo, Manuel Angel Núñez Soto; de Tamaulipas, Tomás Yarrington, y de Puebla, Melquiades Morales.