Conmina a legisladores de PRI y PRD a aprobar la ley que envió ''hace ya más de un año''

Fox hace responsable al Congreso del clima de inseguridad en el país

Ejemplifica con los asesinatos de dos niñas en Juárez

Una hora después invitó al diálogo

ROSA ELVIRA VARGAS

A diez días de los asesinatos de dos niñas en Ciudad Juárez, Chihuahua, el presidente Vicente Fox Quesada se refirió por primera vez a ese hecho. Lo utilizó para criticar al Congreso de la Unión por no dotarlo de las herramientas para cumplir con su tarea de brindar seguridad a los mexicanos. ''Hago responsable al Congreso de la Unión... exigiendo a nombre de estas niñas, y de todos quienes sufren violencia e inseguridad en el país, que se apruebe la ley que enviamos hace ya más de un año'', dijo.

Advirtió a los legisladores: ''No queremos abonitos ni aprobaciones parciales''. Ni al Presidente de la República, ni a los gobernadores o los alcaldes -resaltó- se les pueden pedir resultados en materia de seguridad si no se les provee de los instrumentos necesarios para enfrentar a la delincuencia.

''Llegó el momento, llegó la hora de que actúe con responsabilidad el Congreso de la Unión, y que dé paso adelante con estas reformas.''

Cambio de estrategia

Sin embargo, apenas una hora más tarde, el discurso del presidente Vicente Fox se orientó esencialmente a invitar al diálogo, a deponer los juegos de ''vencidas'', a pasar ''de la estridencia a la prudencia, de la cerrazón a la razón, de la protesta a la propuesta''.

Por la mañana, al participar en la 15 Convención Nacional de Aseguradores, y luego de trazar un panorama halagüeño para este sector, el titular del Ejecutivo federal pasó al mensaje político de su discurso.

Afirmó que la solidez de las instituciones permite asegurar un desempeño normal de los mercados en el futuro próximo.

De ahí, Fox Quesada ubicó la gran tarea del gobierno que encabeza de otorgar seguridad, tranquilidad, paz y ''no violencia'' a las familias mexicanas. Y señaló textualmente:

''Por eso son tan importantes los casos de Airis Estrella Enríquez, niña de siete años de edad, brutalmente asesinada en Ciudad Juárez, Chihuahua, o por igual el caso de Anahí Orozco Lorenzo, de 10 años, encontrada el 16 de mayo asesinada.''

El mandatario federal, quien la semana pasada realizó una gira de trabajo por el estado de Chihuahua, en todo este tiempo no se refirió a esos crímenes; en cambio, en su encuentro de ayer con los empresarios de las aseguradoras aprovechó para enviar ''un saludo muy respetuoso, lleno de dolor y tristeza, de solidaridad para las familias de estas dos niñas...'' asesinadas.

Los señalamientos, con destinatario

Y entró enseguida a ubicar culpables: ''Y desde aquí, al mismo tiempo, hago responsable al Congreso de la Unión, a senadores y diputados del PRI, del PRD. Exigiendo a nombre de estas niñas y de todos quienes sufren violencia e inseguridad en el país, que se apruebe la ley que enviamos hace ya más de un año''.

Pero una hora después, al visitar por primera vez durante su mandato las instalaciones del Instituto Politécnico Nacional (IPN) en su sede central de Zacatenco, el Presidente de la República se mostró conciliador y abierto al diálogo.

Elogió la visión del fundador del Politécnico, Lázaro Cárdenas del Río, por haber creado una institución para formar los técnicos y profesionistas de alto nivel que ''demandaba'' el desarrollo del país, y para ofrecer oportunidades de educación superior de calidad a los hijos ''de los obreros mexicanos''.

Luego se refirió al compromiso presupuestal con el Poli, cuya huella educativa, afirmó, ''está presente en las obras de infraestructura más importantes del país, en la economía, en la tarea social'' y representa uno de los símbolos del avance científico de México.

A continuación, Fox Quesada pidió impulsar un debate de altura e incorporar nuevos temas a la agenda de la educación superior en el país. Llamó así a revisar ''a fondo'' las estrategias de financiamiento, de orientación vocacional y de acceso equitativo a la enseñanza superior. Asimismo instruyó al secretario de Educación Pública, Reyes Tamez (quien a lo largo de su discurso se dedicó sobre todo a recordar su paso por las aulas de posgrado del IPN), para analizar tales planteamientos y ''tomar las medidas necesarias''.

Pasó enseguida a ratificar su disposición al diálogo y la negociación, pues ''es hora de que todos los actores públicos pensemos más en México y menos en los intereses particulares o de grupo''.

Casi para concluir llamó a proceder por encima de diferencias ideológicas, del debate entre partidos políticos y de los desencuentros, frente a la obligación de reflexionar y contribuir a la fortaleza política, económica y social del país.

No se trata de jugar a las vencidas

''No se trata de jugar a las vencidas, sino de privilegiar la ética, el compromiso personal, la racionalidad política'', expresó el Ejecutivo federal. El diálogo, en toda la extensión de la palabra -afirmó el mandatario- deberá ser el sustento del sistema democrático mexicano, así como también de sus libertades e instituciones.

Y concluyó con una cita de Mariano Otero: ''El acuerdo en lo fundamental es la base de la unidad nacional''.