En Sinaloa, 250 homicidios en lo que va del año

Impera la violencia en 4 estados; 11 muertos

En Chihuahua, NL y Veracruz, el resto de los crímenes

DE LOS CORRESPONSALES

Sinaloa, Chihuahua, Nuevo León y Veracruz padecieron ayer una jornada de violencia ligada al crimen organizado, caracterizada por el uso de armas de fuego y tiros de gracia, cuyo resultado fue el hallazgo de 11 cadáveres. Sólo en la primera entidad se dio muerte a seis personas, de ellas tres mujeres, con lo que ascendió a 250 el número de homicidios en ese territorio durante el año.

En la zona serrana de Badiraguato, Sinaloa, fue asesinado a balazos el subdirector de la policía municipal de la demarcación afuera de la cárcel local. Versiones no oficiales indicaron que los homicidas viajaban en una camioneta "gris o blanca", y dispararon en varias ocasiones contra César Valdez Meza.

El jefe policiaco pidió recientemente a sus superiores un mes de permiso para ausentarse de la corporación, lo que le fue negado con el argumento de que la administración municipal apenas se inició en enero pasado. Policías preventivos que solicitaron anonimato señalaron que Valdez Meza pretendía dejar por el momento el servicio para "enfriar algunos problemas personales que tenía", aunque dijeron ignorar de qué tipo o con quién.

Otros cinco cadáveres fueron descubiertos en un predio contiguo a la Escuela de Medicina Veterinaria de la Universidad Autónoma de Sinaloa, a unos metros del terreno que antes ocupó el campo de tiro de la novena Zona Militar.

Agentes de la policía ministerial del estado encontraron los cuerpos a las 7:45 de la mañana. Tres de las víctimas eran mujeres y todas tenían huellas de haber sido torturadas, así como lesiones producidas por armas de fuego.

La policía sólo logró identificar a dos de los finados, Margarita López Olguín, de 28 años, y José Oscar Carrillo Carvajal, a quien se le encontró una credencial para ingresar en calidad de visitante al Centro de Ejecución de las Consecuencias Jurídicas del Delito, mejor conocido como penal de Culiacán.

En tanto, el delegado de la Procuraduría General de la República (PGR) en Sinaloa, Armando Contreras Labra, informó que la Subprocuraduría de Investigación Especializada contra Delincuencia Organizada (SIEDO) investiga el homicidio del diputado local Saúl Rubio Ayala, ocurrido el lunes pasado en Guasave.

Destacó que la procuraduría estatal coadyuva en las pesquisas resultado del acta circunstanciada AC/C/100/GUAS/ 335/2005, que la PGR abrió el día de los hechos. Rubio Ayala, legislador panista y ex presidente municipal, era investigado por la SIEDO por supuestos nexos con el narcotráfico, luego de haber asistido a las exequias de Miguel Angel Beltrán, El Ceja Güera, en octubre del año pasado.

En tanto, en Ciudad Juárez, Chihuahua, el presunto narcotraficante Jorge Arellano, de 32 años, fue emboscado a las 9:10 de la mañana del jueves cuando estaba a punto de arrancar una camioneta negra modelo 2003 cerca de su casa, en el fraccionamiento Oasis Revolución. Este crimen elevó a 26 los cometidos en la localidad en lo que va de 2005.

La Subrocuraduría de Justicia con sede en Juárez indicó que sujetos que iban a bordo de dos vehículos dispararon 25 tiros de pistolas calibres 9 y 10 milímetros, de los cuales al menos 10 impactaron en la víctima. Antes de huir, uno de los sicarios le dio el tiro de gracia.

Fuentes de la misma subprocuraduría indicaron que Arellano trabajaba para el cártel de Juárez, como líder de una red que distribuía estupefacientes en la zona centro de la ciudad, además de que poseía un lote de autos y servicio de lavado de vehículos. El caso quedó en manos del Grupo Zeus de la Agencia Estatal de Investigación (AEI).

También en Ciudad Juárez fue hallado vivo Armando Martínez Quirino, de 26 años, quien fue levantado (plagiado sin intención de obtener rescate) por equivocación. El joven relató a la policía municipal que durante la madrugada del jueves, cuando dejó su domicilio en la colonia Morelos rumbo al trabajo, tres sujetos con pasamontañas lo obligaron a subir a una camioneta, lo ataron de pies y manos, además que lo amordazaron, pero después de ver sus documentos lo arrojaron a un terreno baldío en el cruce de Guanajuato y Mariano Jiménez, en la colonia Salvarcar.

Por otra parte, un doble asesinato se descubrió en el municipio Linares, al sur de Nuevo León, cerca de la frontera con Tamaulipas, informó la AEI. Las víctimas, todavía no identificadas, ambas varones de entre 30 y 35 años, tenían huellas de tortura, las manos esposadas, los ojos vendados y varios disparos de arma de fuego. Con ellos sumaron 16 los decesos en la entidad relacionados con el crimen organizado durante el año.

La procuraduría de Nuevo León solicitó colaboración a su homóloga de Tamaulipas, y no descartó que los hoy finados fueran originarios de la segunda entidad, además que el hecho podría tener relación con la fuga del narco y secuestrador José Luis Saldaña Rojas, quien fue liberado el martes de un vehículo que lo trasladaba de Ciudad Victoria -fue a una diligencia ministerial- al penal de Altamira.

Sobre la evasión de Saldaña Rojas, relacionado con el cártel del Golfo, el director de la PME de Tamaulipas, Fernando Vallejo García, declaró que se abrieron más líneas de investigación, pues según "nuevos elementos que arrojaron las indagatorias", al parecer el narco no fue rescatado por un comando armado, sino que sus custodios lo habrían entregado a individuos no identificados en una acción supuestamente concertada con el titular de la cárcel de Altamira, Carlos Arjona.

Agregó que se ha identificado a dos presuntos implicados en la huida, que no son funcionarios públicos, como el director y tres guardias del reclusorio, actualmente arraigados. Otra línea apuntaría a amigos del evadido radicados en Nuevo Laredo, que habrían participado en el robo de una camioneta usada para la fuga.

Vallejo García indicó que el coordinador de Vigilancia Exterior en la cárcel de Altamira, Carlos Eduardo Hernández, negoció con familiares del reo, y a cambio recibió depósitos en cuentas bancarias, además de que las prendas tipo militar de quienes se llevaron a Saldaña Rojas fueron compradas en Ciudad Victoria. Indicó que los custodios arraigados han incurrido en diversas contradicciones, pese a que se declaran inocentes.

En tanto, en un paraje a la orilla de la carretera Paso del Toro-Alvarado, entre los poblados El Canal y Camaronera, del municipio de Alvarado, Veracruz, unos campesinos hallaron los restos del empresario restaurantero Miguel Salvador Zamudio Aguilar, hermano del ex alcalde de dicha localidad Angel Zamudio, y de su chofer Gregorio Ramón Sosa, luego de haber sido secuestrados hace tres meses. Los cadáveres se localizaron semienterrados en un costal en una zona de dunas, esposados, con los ojos vendados y tiros de gracia, informó la Subprocuraduría Regional de Justicia.

Desde el pasado 2 de marzo, la familia Zamudio reportó la desaparición del empresario, quien viajó junto con su chofer a Jalapa para la apertura de un restaurante, aunque nunca llegaron a su destino. Los cuerpos -que se remitieron al Instituto de Medicina Forense de Boca del Río para realizarles estudios de ADN- fueron identificados por los documentos hallados en su ropa.

De su lado, la presidenta de la Asociación Estatal de Padres de Familia de Morelos, María de Jesús Nava Alvarez, afirmó que el operativo Mochila en Cuernavaca ha sido un fracaso, pues no ha logrado detener a las bandas de narcotraficantes, que utilizan a niños de ocho y nueve años para distribuir y vender drogas en las escuelas.

Sostuvo que por temor a los narcos, profesores y directivos de escuelas primarias y secundarias no denuncian los casos de venta de estupefacientes que conocen ni toman medidas preventivas. Además, consideró que "lo más grave" es la "falta de acción y de compromiso" de las secretarías de Salud y Educación Pública de Morelos, pues "enteradas del asunto nada hacen".

Javier Valdez, Rubén Villalpando, David Carrizales, Martín Sánchez, Andrés T. Morales y La Jornada Morelos