Sólo Felipe Calderón cuestionó la elevada cifra
Fija el PAN tope de $350 millones a precampañas
Creel, Barrio y Cárdenas Jiménez apoyan el incremento
El Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PAN acordó fijar en 300 millones de pesos el gasto de precampaña de los aspirantes a la candidatura presidencial de este partido durante la primera vuelta electoral, y establecer en 50 millones el que realizarán durante la segunda.
De esta manera se prevé que cada uno de los cuatro precandidatos podrá gastar 75 millones de pesos y los dos finalistas estarán en libertad de usar otros 25 millones. La cifra casi supera en ciento por ciento la que había propuesto la Comisión de Elecciones, de 39.5 millones de pesos.
La dirigencia del PAN tomó la anterior determinación durante su reunión mensual, en la que aprobó la convocatoria para la elección del candidato presidencial, la cual establece que el registro será del 7 al 10 de julio y habrá dos vueltas electorales. La primera será en tres etapas (11 de septiembre, 2 y 23 de octubre) y la segunda en una sola, el 6 de noviembre.
En esta ocasión la reunión se inició el lunes por la tarde y concluyó en las primeras horas del martes, debido a lo ríspido del debate sobre los topes de campaña.
Panistas que operan para el secretario de Gobernación, Santiago Creel, manifestaron su desacuerdo con la cifra fijada por la Comisión de Elecciones. Trascendió que Ricardo García Cervantes y Humberto Aguilar, subsecretarios en Bucareli, plantearon la necesidad de incrementarla.
Para respaldar esta posición también hicieron uso de la palabra panistas identificados con Francisco Barrio y Alberto Cárdenas Jiménez, diputado con licencia y secretario del Medio Ambiente, respectivamente. Como parte de sus argumentos calcularon el gasto de algunos aspirantes del PRI: Enrique Jackson ha destinado 50 millones de pesos sólo en televisión.
Señalaron que es necesario ser transparente en el gasto y no caer en la simulación. Pero sobre todo, evitar casos como el de Sinaloa, donde hay evidencia de que los cárteles de la droga aportaron recursos a los partidos en las elecciones.
Contra esa posición habló Rogelio Carbajal, integrante de la Comisión de Elecciones, y militantes identificados con Felipe Calderón, quienes argumentaron que el PAN siempre se ha caracterizado por la austeridad en sus campañas, además de que un tope más alto de lo previsto sería mal recibido por la sociedad.
Ante la insistencia de los grupos de Barrio, Cárdenas y Creel, para que se aumentara el tope de precampaña, trascendió que Rogelio Carbajal amenazó con renunciar a la Comisión de Elecciones, pues según su consideración el trabajo de dicha instancia se había descalificado al rechazar la propuesta del organismo.
Frente a los argumentos de una y otra partes, el CEN votó la cifra propuesta por la comisión; una vez que fue desechada por mayoría, se valoró si se incrementaba. Ganó la primera opción, y como no se ponían de acuerdo en el nuevo monto, el presidente del partido, Manuel Espino, propuso 300 millones de pesos para la primera vuelta electoral y 50 millones para la segunda. La iniciativa fue aprobada por mayoría: ocho miembros del comité votaron en contra. Héctor Larios, miembro de la comisión, se abstuvo.
Calderón lamentó la decisión que aprobó el CEN en torno a los gastos (350 millones de pesos en total), luego de referir, por ejemplo, que los 35 municipios más pobres de Michoacán reciben 11 millones de pesos al año para el combate a la pobreza. Agregó que para el siguiente año el tope será de 600 millones de pesos para 60 millones de electores, es decir, 10 pesos por voto. En el caso del PAN se está hablando de 350 millones para un millón de electores, es decir, 350 pesos por voto.
Consideró que el PAN debe rectificar. "Deben revisarse los topes sin agravios y sin ofensas, pues simplemente no podemos permitir esto; necesitamos que esta decisión se reflexione por el bien del partido, por el bien de una precampaña que debe ser de ideas, no de dinero, y, por supuesto, por el bien de la democracia."
Aseguró no querer descalificar a sus contendientes, pero se puede recaudar más dinero desde una secretaría. "¿Quién le puede objetar un donativo a un secretario de Estado?", cuestionó, y agregó irónico: "No creo que se preste la secretaría, ninguna de ellas, a recaudar fondos".
Por su lado, Creel manifestó que la convocatoria aprobada por el CEN no contiene ningún elemento que sea objetable de su parte. Sostuvo que se plegará a los términos en que el PAN definió la forma como se elegirá al candidato. "Como quiera el partido, quiero yo", dijo.
Ni siquiera los topes fijados por el PAN fueron objetados por el secretario de Gobernación, pues señaló que no son necesariamente los recursos que habrán de erogarse durante la campaña interna, y recordó que en la contienda pasada en la que participó -no precisó si la federal o la interna- no llegó a completar el dinero que tenía derecho a ejercer.
"Así lo veo yo y el partido desea que tengamos la holgura suficiente para enfrentar sobre todo la competencia externa. Estamos viendo los bombardeos de publicidad que están haciendo ya precandidatos de otros partidos, los gastos que están ejerciendo. En el PAN, en primer lugar, vamos a hacer todo con transparencia, saber cuál es el origen de esos fondos, cuál su destino, y en segundo lugar, que cada candidato haga el gasto de acuerdo con sus posibilidades, con los apoyos que reciba y que pueda enfrentar al mismo tiempo la contienda externa."
Sobre las críticas de Calderón a los elevados montos para la contienda interna, Creel optó por no involucrarse en una polémica y sencillamente señaló no tener "ninguna opinión al respecto".
A su vez, Barrio rechazó que con la aprobación de los 350 millones se violenten los principios del panismo, y argumentó que se requiere ese dinero para espots propagandísticos, ya que sería imposible recorrer los 150 municipios que tienen más de 300 militantes activos.