Los convencieron hace 7 años con falsas promesas; enfrentan acoso y discriminación
Tlapanecos esterilizados reclaman indemnización a la SS
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Los 14 ind�nas tlapanecos que fueron esterilizados de manera forzada por personal de la Secretar�de Salud de Guerrero. Los acompa�sus esposas, quienes, aseguraron, fueron presionadas para cambiar el sentido de su declaraci�OTO Cortes�de Tlachinollan
El camalote, ayutla de los libres, gro., 14 de mayo. A siete años de que mediante engaños una brigada médica esterilizó a 14 indígenas tlapanecos, éstos aún esperan respuesta de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), ante la cual se quejaron después de que la Secretaría de Salud (SS) del estado rechazó indemnizarlos, como recomendó en su momento la Comisión Estatal para la Defensa de los Derechos Humanos (Coddehum).
Al menosprecio por los sucesos de parte de los gobiernos que encabezaron los priístas Angel Aguirre Rivero y René Juárez Cisneros, además de la desatención de este último a la recomendación 35/2004 de la Coddehum, hay que sumar la discriminación y el hostigamiento que enfrentan los indígenas me´paa -como se hacen llamar en su lengua-, de sus propios familiares, por haber "vendido sus testículos", según les dicen.
El comisario Silverio Remigio Guzmán, uno de los siete intervenidos en el hospital general de Ayutla, con la promesa de que autoridades de la SS del estado les construirían una clínica y les mandarían un doctor, afirma que el acoso proviene de militantes priístas, quienes comentan que los 14 comuneros esterilizados "son capones que vendieron los testículos" o que "en sus casas hay puras mujeres".
A su manera, pero con la misma carga de discriminación, las esposas de los comuneros eunucos viven esta presión de parte de las demás mujeres de esta comunidad -de apenas 560 habitantes y 100 casas de adobe y láminas- donde por tradición cada familia puede llegar a tener hasta más de 12 hijos; también ellas presionan a sus esposos por haber aceptado esta intervención quirúrgica.
Las mujeres de El Camalote acusan a las esposas de los esterilizados de "parecer troncos" por no tener más hijos, dice Fausta Cruz Eugenio, esposa de Artemio Cruz Vicente, madre de seis jóvenes, el menor de siete años procreado en marzo de 1998, un mes antes de que fuera intervenido su esposo con la promesa que hasta la fecha no se ha cumplido.
Para las mujeres me´paa, ser un vegetal es más que ofensivo, inclusive dicen sentirse enfermas, padecer dolores de estómago y de cabeza desde que sus esposos fueron esterilizados, según Concepción Cruz Victoriano, esposa de Crisóforo Manzanares Lorenzo.
Lo mismo afirman Galdina Fernández Guadalupe, esposa de Marcelino Santiago Flores, así como Petronila Soto Cruz, compañera del comisario, quien además fue amenazada por la enfermera Maira Ramos Benito, una de los tres integrantes de la brigada responsable de la esterilización.
Claudia Ordóñez Vique, asesora jurídica del Centro de Derechos Humanos de La Montaña-Tlachinollan, dice que los 14 indígenas deben ser indemnizados, porque "para los tlapanecos los hijos son los que le ayudan a cultivar, a hacer trabajos en el campo, en la casa. Disminuir el número de hijos es como tener medias manos para salir adelante, para cuidar animales, para sembrar la tierra".
La queja ante la Coddehum fue interpuesta el 24 de noviembre de 2003 por el entonces comisario de El Camalote, Orlando Manzanarez Lorenzo, argumentando "violaciones a sus derechos sexuales y reproductivos".
La enfermera Maira Ramos Benito, el promotor de salud Rafael Almazán Solís y al doctor Ernesto Guzmán León, a quienes la Coddehum recomendó abrir procesos administrativos, pertenecían a una brigada de la jurisdicción sanitaria 6 (Costa Chica) de los Servicios Estatales de Salud. Ellos fueron quienes prometieron a los habitantes de El Camalote construirles una clínica y proporcionarles un doctor si reunían al mayor número de personas dispuestas a esterilizarse.
La Secretaría de Salud estatal rechazó la recomendación 35/2004 de la Coddehum, con el argumento de que las esterilizaciones habían sido voluntarias; inclusive dijo que tenía un documento firmado, lo que provocó que los afectados interpusieran el 6 de septiembre de ese mismo año, un recurso de inconformidad ante la CNDH.
El pasado 7 de febrero, dos visitadores de la CNDH estuvieron en El Camalote y escucharon testimonios de los 14 afectados y de tres esposas.
A tres meses de la visita, el organismo no ha dado una respuesta como lo hizo con 18 mixtecos de este mismo municipio, quienes también fueron esterilizados por la misma brigada de salud, mediante la recomendación 18/2001 que fue aceptada en su tiempo por el gobierno de Aguirre Rivero.
Los indígenas afectados sólo esperan la indemnización de la SS estatal, como lo recomendó la Coddehum (35/2004) el 16 de agosto del 2004.
El comisario Remigio Guzmán mantiene "sólo una esperanza": que el gobierno del perredista Zeferino Torreblanca Galindo acepte la recomendación, les construya una clínica que tenga un doctor para que se cure "la gente que tiene muchas enfermedades".