Llama Reyes Gámiz a sus correligionarios a no iniciar luchas palaciegas
Buscará la ALDF un sustituto del jefe de Gobierno por consenso: perredistas
Delinea Villavicencio el perfil del relevo: "debe ser una persona que construya puentes"
La Asamblea Legislativa del Distrito Federal iniciará en lo inmediato el análisis de quién podría sustituir a Andrés Manuel López Obrador al frente del gobierno capitalino, y se buscará que quien llegue a ese cargo pueda garantizar la continuidad del actual proyecto democrático, aseguraron ayer el presidente de la Comisión de Gobierno, Carlos Reyes Gámiz, y la coordinadora de la bancada perredista, Lorena Villavicencio Ayala.
Entrevistados por separado, los diputados coincidieron, con sus matices, en que estarán abiertos a escuchar la opinión que sobre este tema viertan las fracciones de PRI, PAN y PVEM, y se tenga un nombramiento de alto consenso, pero los exhortaron a actuar con mesura y responsabilidad y no caer en "politiquerías".
Además hicieron énfasis en el hecho de que ese proceso no generará fracturas ni divisiones en su grupo parlamentario, pues fue un compromiso que establecieron con antelación, y por ende habrá "plena unidad".
Carlos Reyes Gámiz comentó que una vez que se concrete el anuncio que ayer formuló López Obrador, "tendremos que dialogar respetuosamente, caminar de manera conjunta el Gobierno del DF y la Asamblea Legislativa", para concretar el relevo, pero respetando siempre que somos dos poderes distintos, con campos de acción diferentes, al tiempo que con el partido se harán las "consultas pertinentes".
No obstante, hizo un llamado a la serenidad de todos los perredistas "para no incurrir en el error de querer abrir o iniciar luchas palaciegas", pues el grupo parlamentario del PRD, "con orden y responsabilidad tomará una decisión en la que estén bien pulsadas las diversas opiniones para presentar a la sociedad y a los grupos opositores una propuesta que le dé certidumbre al desarrollo de esta ciudad".
Mientras, Lorena Villavicencio consideró que la decisión de López Obrador es algo que también deben seguir los aspirantes presidenciales de los otros partidos, para no afectar la función pública.
Respecto al perfil de quien deba ocupar el cargo, fue directa al señalar que "tendrá que ser una persona que construya puentes con los diferentes partidos y grupos de la sociedad, que favorezca el diálogo y el entendimiento; que sea una persona que sume y no que reste; que dialogue y no confronte; que tenga experiencia y no se tenga que improvisar, pero sobre todo que esté comprometida con el proyecto que encabeza López Obrador".
En este contexto, Gilberto Ensástiga, secretario general del PRD-DF, rechazó la posibilidad de cualquier conflicto interno; "estoy confiado en que la sustitución del jefe de Gobierno será tersa en el partido, pues hay unidad".
La ruta del proceso
De acuerdo con el Estatuto de Gobierno del Distrito Federal y la Ley Orgánica de la Asamblea Legislativa, López Obrador tiene dos opciones para dejar el cargo, una es por renuncia y la otra por licencia, y en ambos casos es la ALDF la única facultada para determinar quién lo sustituirá.
Los dos ordenamientos mencionados señalan que el jefe de Gobierno deberá notificar por escrito a la Asamblea Legislativa su deseo de retirarse del puesto; una vez conocida la petición, los diputados elaborarán un dictamen que será votado en el pleno.
Cumplido este paso se recibirán las propuestas de los grupos parlamentarios y de ahí saldrá quien cumpla con todos los requisitos de ley, y se elaborará, nuevamente, un dictamen que se votará también en el pleno.
Respecto de la licencia, si ésta es superior a los 30 días naturales -como así ocurrirá- se convertirá en falta absoluta y la ALDF designará a un sustituto para que concluya el periodo respectivo.