México, entre los países más peligrosos para la profesión: RSF
Miami, 3 de mayo. La labor de los periodistas en América Latina se hizo más peligrosa en 2004, año en que 12 reporteros o colaboradores de prensa fueron asesinados para silenciarlos y asustar a sus colegas, informó este martes Reporteros sin Fronteras (RSF) al divulgar un informe por el Día Internacional de la Libertad de Prensa.
Los países más riesgosos para ejercer la profesión son Colombia, México, Brasil y Perú, y Cuba, con 22 reporteros detenidos, continúa siendo "la única cárcel del continente para periodistas y la segunda del mundo para la profesión después de China", sostuvo RSF.
En Venezuela no hubo asesinatos de periodistas, pero RSF criticó al gobierno de Hugo Chávez por "atacar la libertad de expresión multiplicando las intimidaciones".
Colombia sigue siendo el país más peligroso de América para ejercer el periodismo y, aunque en 2004 se redujeron los asesinatos de reporteros, los grupos armados ilegales, narcotraficantes y políticos corruptos imponen a la prensa "la ley del silencio".
RSF, cuya sede central está en París, declaró estar preocupada por la situación de la prensa en Colombia, ya que en 2004 murieron un periodista y un colaborador de un medio de comunicación, además de que tres fueron secuestrados, dos detenidos, 28 agredidos y 25 amenazados.
La organización mantuvo en su lista de los 34 violadores de la libertad de prensa en el mundo a los máximos jefes de las guerrillas izquierdistas y de los paramilitares de ultraderecha.
En el caso de México, destaca que en 2004 murieron tres periodistas a manos de los cárteles de la droga que operan en el norte del país, y hubo protestas para que las investigaciones de estas muertes sean desarrolladas por el gobierno federal y no por las autoridades de los estados, porque sospechan que están corrompidas o controladas por las organizaciones criminales.
"En México existe una libertad de prensa a dos velocidades: por una parte la prensa nacional, cuya importancia parece dejarla relativamente al margen de la represión, y por otra los medios de comunicación locales y regionales, frágiles y aislados", señala el informe.
Reuters