La presa causará afectaciones en la salud de la gente y daños ecológicos, dicen
Admite Semarnat recurso contra la construcción de La Parota: activistas
Integrantes del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras a la presa La Parota (Cecolp), la cual se pretende construir en el municipio de Acapulco, Guerrero, informaron que la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) admitió el recurso de revisión presentado en contra de la autorización del informe de impacto ambiental que la misma dependencia le otorgó a la Comisión Federal de Electricidad (CFE). Se busca la revocación de éste para que se cancele la construcción de la obra.
Dicho recurso, presentado por comunidades de Acapulco asesoradas por el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda), que fue admitido por la citada dependencia el pasado 16 de marzo, se fundamenta en "la falta de apego a las leyes ambientales y a consecuencia de ello, en graves e irreversibles impactos ambientales que se producirán en la construcción y operación de la hidroeléctrica".
Entre los impactos negativos que tendrá la construcción de La Parota, según se dice en el recurso mencionado, producirá afectaciones a la salud de los habitantes de la región, existe la posibilidad de que se presenten "desastres sísmicos de dimensiones muy graves", se ocasionará "destrucción irreversible del hábitat de especies de flora y fauna amenazadas y en peligro de extinción", entre otros.
Rufina Palma, José Venus Hernández Nicanor, Julián Blanco Cisneros, Felipe Flores y Rodolfo Chávez informaron además que el domingo primero de mayo se instalará en la comunidad de Cacahuatepec el sexto plantón para impedir el paso de personal de la CFE, con lo que quedará cerrado el último de los accesos que la paraestatal tenía para llegar a la región.
Al movimiento contra la construcción de La Parota se han unido recientemente las comunidades de Carrizo, Parotilla y Cacahuatepec "porque apenas se enteraron de que con la construcción de las presas de mitigación también a ellos los inundarían. Antes estaban a favor de la presa porque a ellos no los iban a afectar. Los compañeros dicen que fueron engañados por el comisariado ejidal de Cacahuatepec. Hace unos días fueron un ingeniero y una abogada de CFE para decirles que hicieran una reunión porque les iban a enseñar la casa muestra donde los van a reubicar y los de la cabecera dijeron que no quieren saber nada de eso y se unieron al Cecolp", explicaron.
Julián Blanco detalló que lleva tres meses el plantón que instalaron los campesinos de los ejidos Los Arroyos y Colonia Guerrero Los Guajes. "A nosotros también nos quieren reubicar. Los Guajes está arriba de donde quedaría la cortina de la presa pero el gobierno no nos hace caso, somos cerca de tres mil habitantes y Los Arroyos es más grande. La CFE le pagó al comisariado ejidal y al municipal para convencer a la gente de que se meta a La Parota. Ahorita somos el pueblo los que no queremos que se construya y no tenemos autoridades", indicó.
"La gente ya se convenció de que la CFE no paga las tierras que inunda, nomás trata a los afectados con puros engaños, por ejemplo de una presa que se hizo en La Venta, en Acapulco, les pagó a los 47 años -en 2004- y eso por la presión que hicimos nosotros que en cada asamblea repetíamos que a los de La Venta todavía no les pagaba las indemnizaciones, y no fue un pago justo, les dio 4.50 pesos por metro cuadrado y sin intereses de casi 50 años. Y La Parota va a afectar 17 mil 500 hectáreas y además no es viable", agregó José Venus, quien subrayó que se pretende afectar a 47 comunidades, además de las que inundarán las dos presas de mitigación.
De acuerdo con un comunicado del Cemdna, en el recurso de revisión que se presentó a la Semarnat -informaron- se destaca que la CFE "no presentó estudios ni información mínima" referente a la sismicidad inducida en la Brecha de Guerrero, "que es un segmento de la Placa norteamericana con muy alta probabilidad de generar un sismo de siete o más grados Richter. La Semarnat se declaró sin conocimientos en la materia y no impuso ninguna medida para monitorear este riesgo y mucho menos un plan de contingencia".
Anota que la posible incidencia de enfermedades como malaria, gastroenteritis, dengue y otro tipo de males asociados con estos embalses no fue evaluada por la Semarnat; tampoco la destrucción del hábitat de la fauna microendémica y endémica (que sólo se encuentra en la región) como la rana papagayo, "única en el mundo" y varias especies de flora.
La CFE no incluyó en el estudio de impacto ambiental el cambio en el curso del río Papagayo, "no presentó estudios isotópicos para que la Semarnat evaluara con un verdadero conocimiento las interacciones del agua y las rocas. Tampoco se investigó el ciclo de lluvias, de secas, información necesaria para evitar desastres ocasionados por la filtración del agua de mar a los acuíferos", anota el documento.