Usted está aquí: viernes 29 de abril de 2005 Economía Cabildea Hacienda caso de la deuda del Fobaproa

La Corte cuestiona adquisición de créditos irregulares por más de $4 mil 670 millones

Cabildea Hacienda caso de la deuda del Fobaproa

JESUS ARANDA

A unos días de que la Suprema Corte resuelva la validez o no de los oficios girados por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) a la Secretaría de Hacienda y al IPAB, para que no se paguen créditos irregulares convertidos en deuda pública por más de 4 mil 670 millones de pesos; el secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, intensificó su cabildeo con los 11 ministros del pleno ante la posibilidad de un fallo adverso.

Y es que en la sesión del pasado jueves, en donde el ministro Guillermo I. Ortiz Mayagoitia comentó que el endeudamiento público causado por el rescate bancario tuvo un "crecimiento exponencial" -al pasar de 150 mil 446 millones de pesos en 2000 a 220 mil 427 millones de pesos en 2003-, debido a la adquisición de una deuda "nada cuidada a cargo del Fobaproa", quedaron en evidencia que al menos cinco ministros estaban a favor de convalidar los oficios de la ASF a efecto de que se cumpla la Ley de Protección al Ahorro Bancario, la cual establece que la autoridad podrá descontar del pago de la deuda, los créditos que irregularmente se hayan convertido en deuda pública.

En esa ocasión y ante la posibilidad de que un ministro se sumara a la opinión en contra de la Secretaría de Hacienda, los ministros Juan Díaz Romero y Sergio Salvador Aguirre Anguiano solicitaron que se aplazara el asunto unos días, para reflexionar sobre el tema.

Al término de la sesión, un ministro confió a este diario que al abrirse este compás de espera, seguramente habría una fuerte presión de las Secretarías de Hacienda, Gobernación, y del propio IPAB para que se invalidaran los oficios de la Auditoría.

Por lo menos, ayer Gil Díaz hizo su parte en el encuentro que sostuvo por más de una hora con el ministro Ortiz Mayagoitia, y se espera que de aquí al viernes, el funcionario tenga tiempo de visitar a todos los integrantes del pleno.

 
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