"Seguramente" no habrá juicio de procedencia, considera Bernardo Bátiz
Descarta López Obrador desistimiento
El jefe de Gobierno del Distrito Federal (GDF), Andrés Manuel López Obrador, acusó a la Procuraduría General de la República (PGR) de mantener un ambiente de intolerancia en su contra en el asunto del desafuero, por lo que descartó toda posibilidad de que haya rectificación de último momento para detener el "embrollo en el que metieron al país".
Recordó, asimismo, que la PGR no es más que un instrumento de "los de arriba", que están viendo amenazados sus intereses políticos y privilegios, por lo que ahí se origina la decisión "aberrante e injusta" del proceso de desafuero.
Luego de que la sección instructora camaral aplazó la elaboración del dictamen correspondiente, el mandatario capitalino declaró que sigue sereno, listo para lo que suceda, aunque consideró que "lo mejor es que esto ya se decida", y descartó sucesos que afecten la economía ante el nerviosismo en inversionistas extranjeros que percibe el presidente de la Bolsa Mexicana de Valores, Guillermo Prieto.
"Vamos a actuar siempre con responsabilidad", garantizó, e hizo un llamado a sus adversarios: "Ojalá reflexionen quienes están impulsando esta arbitrariedad, aunque lo veo muy difícil, porque están poseídos de autoritarismo".
Al respecto, el secretario de Gobierno capitalino, Alejandro Encinas Rodríguez, afirmó que "el GDF va a actuar con responsabilidad" en esta resistencia civil pacífica. "Por nuestra parte no hay ninguna situación que pudiera poner en riesgo la economía del país", indicó.
López Obrador no asumió como señal positiva la decisión de los legisladores de posponer el dictamen hasta el viernes próximo, pero en su conferencia de prensa estuvo sonriente y hasta bromista, incluso deseó suerte a la selección de futbol de México, pero prefirió no hacer interpretación alguna sobre la prórroga camaral.
En cambio, ratificó su llamado a los ciudadanos para que se mantengan alertas el viernes próximo. "Vamos a saber en qué sentido va el dictamen de la sección instructora, y una vez que pase a la Cámara de Diputados y se someta a votación, ese día nos congregaremos pacíficamente en el Zócalo, no en San Lázaro. Yo voy a asistir en todo caso a tomar la palabra, y una vez que termine estaré en la Plaza de la Constitución para que definamos el plan de resistencia civil pacífica."
Tampoco abundó sobre la acusación del presidente nacional del PAN, Manuel Espino, contra la PGR, de utilizar el caso Nahúm Acosta para golpear a su partido, aunque el jefe del GDF dijo que ese hecho es reflejo de la incongruencia en el gobierno federal, "parte de lo cotidiano".
-¿Es sospechosa esa actitud del PAN?
-Pues el "sospechosismo" se cierne en todo el país -bromeó.
Consideró que exagera el subprocurador federal Carlos Vega Memije, quien expuso que la PGR no dejará de vigilar al gobernante para impedir que se fugue, y en caso de que la Cámara de Diputados no lo desafuere, esperará a que pida licencia para afrontar la campaña presidencial y entonces consignarlo a un juez penal.
"Si estoy diciendo que no voy a pedir amparo ni libertad bajo fianza, el de la PGR es un afán golpista muy autoritario; no veo que haya un ambiente de tolerancia, sino todo lo contrario", agregó.
Pidió, además, no perder de vista la supuesta negociación del dirigente nacional del PRI, Roberto Madrazo, con el gobierno federal para que los legisladores de su partido en la Cámara de Diputados voten en favor del desafuero.
Para el jefe del GDF esto explica la actitud del líder del sindicato petrolero, Carlos Romero Desachamps, quien, en la ceremonia por el aniversario de la expropiación con el presidente Vicente Fox Quesada, "se me lanzó sin ton ni son".
En tanto, el procurador capitalino, Bernardo Bátiz, consideró positivo que los integrantes de la sección instructora hayan aplazado el dictamen, ya que "están enfrentando su paso a la historia" y necesitan analizar bien las cosas, no dejarse presionar por sus coordinadores.
Bátiz opinó que "seguramente" no habrá proceso de desafuero contra López Obrador, y que en caso contrario, la estructura del gobierno está preparada para que en ningún momento haya ingobernabilidad en la ciudad.