Es tema cerrado por ella misma y es mujer de palabra, dice

Descarta Calderón que Sahagún sea candidata

La llegada al poder deterioró al PAN, considera el aspirante presidencial

GEORGINA SALDIERNA

Ex dirigente del Partido Acción Nacional (PAN), Felipe Calderón Hinojosa acepta que es necesario hacer una revisión de las prácticas y las estrategias que ha puesto en marcha este instituto político y señala que el deterioro que sufre el panismo está relacionado con su llegada al poder.

Advierte que la unidad de Acción Nacional pasa por la realización de un proceso equitativo en la selección del candidato presidencial, del cual es parte interesada al buscar ser el abanderado del blanquiazul en 2006. Coincidente con parte de los señalamientos que planteó la diputada federal Tatiana Clou-thier al momento de renunciar a las filas de Acción Nacional, reconoce que su partido pasa por un momento difícil, pero no al grado de prever una desbandada de militantes como la ocurrida en 1992 con los integrantes del Foro Democrático.

En entrevista con La Jornada, Calderón descarta que sus aspiraciones de suceder a Vicente Fox en la Presidencia de la República no tengan futuro con la llegada de Manuel Espino a la jefatura nacional del PAN, y que la esposa del presidente, Marta Sahagún, se pueda convertir en la abanderada presidencial en caso de que el secretario de Gobernación, Santiago Creel Miranda, no lo pueda ser.

-¿Qué opina sobre la renuncia de Tatiana Clouthier al PAN?

-Es muy lamentable. Si bien es cierto que a ninguna pérdida de militantes debe restársele importancia, la verdad es que la salida de Tatiana es una dura decisión que afecta de manera importante al PAN, por todo lo que representa. No comparto su decisión, pero no me cabe la menor duda de que tenemos muchos temas que revisar respecto de las prácticas, las estrategias y las ideas del partido.

-¿En qué momento empezó este deterioro? ¿Cuando llegó Fox a la Presidencia?

-No lo adjudicaría personalmente a Fox. Pero es evidente que un partido al momento que llega al poder tiene la prueba del ácido y se requiere un enorme ejercicio de virtud política, de ejercicio ético, y que se respeten las reglas para no incurrir en este deterioro. Me parece que es un desgaste previsible por el ejercicio mismo del poder y su cercanía con él, pero el remedio no es asumir que todo es mejor cuando no se tiene el poder. La clave es que el PAN sea firme, fuerte y leal a los principios y valores que siempre ha sostenido.

Cuidadoso en extremo, Felipe Calderón evita hacer críticas al instituto político al cual pertenece o a su nueva dirigencia, porque dice que no quiere incidir en una división. Pero reconoce que persiste el peligro de perder el partido por ganar el poder. Así, acepta que quizá por la desesperación o por el mismo apetito de triunfo y del ejercicio del poder se va claudicando en principios y en valores. ''No digo que ese riesgo se haya materializado, pero sigue latente'', puntualiza.

Rechaza que la inconformidad surgida con el proceso de elección del nuevo dirigente nacional del blanquiazul esté relacionada con la pérdida de espacios por las familias ''custodias'' de este partido. Este, asegura, no es un asunto de familias o personas, sino de principios y prácticas.

''Quizá durante todo este proceso de sucesión hubo una desviación de principios, pero no podría hacer una afirmación categórica sobre la nueva dirigencia, porque apenas está iniciando y no pueden sacarse conclusiones definitivas por más que los primeros días de su gestión sean descriptivos. Me parece que hay que dar espacio a la reflexión, al acuerdo, al debate. Es un momento muy difícil para el PAN, es cierto, pero tenemos que estar unidos y recomponer lo que haya que recomponer y fortalecer lo que haya que fortalecer.''

-¿Cómo es posible recomponer con una dirigencia que abiertamente dice que no va a impulsar la operación cicatriz?

-La restructuración del PAN y el fortalecimiento deben tener cauces mucho más anchos y profundos que una mera etapa conciliatoria. No se trata de un mero juicio laboral donde se sigue la conciliación como un trámite. Yo creo que se trata más bien de una reflexión interna y profunda que permita al partido fortalecer su esencia y que requerirá un muy largo camino.

''Esto, sin embargo, no debe hacernos perder de vista una coyuntura que está inmediata y está en curso: la propia sucesión presidencial. En este contexto, la garantía de unidad de Acción Nacional se cifra en la equidad del proceso, sin menoscabo del enorme trabajo de reflexión, organización y replanteamiento que debe hacerse.''

Para el ex diputado federal y ex secretario de Energía -tuvo que renunciar a ese cargo luego de que el presidente Vicente Fox lo regañó por encabezar un acto donde militantes de Jalisco lo destaparon como su candidato presidencial-, la integración del Comité Ejecutivo Nacional, de donde salieron reconocidos panistas como Francisco Barrio y otros claramente identificados con la corriente que él encabeza, obedeció a cuestiones muy prácticas y pragmáticas, que ''tampoco me parece que sean cuestionables per se. Yo las entiendo. La elección de Manuel Espino probablemente se sentó en muchos acuerdos con consejeros, algunos de los cuales estaban muy interesados en ser parte del Comité Ejecutivo Nacional y quizá por ello tomaron una decisión que en la opinión de muchos debió hacerse considerando intereses superiores del partido. Pero es válido, es lo que legalmente es posible hacer''.

Como ex presidente de Acción Nacional, Caderón considera que el éxito o el fracaso del nuevo CEN está asociado a la equidad, a la seriedad y a la credibilidad que logre generar en el proceso de elección del candidato presidencial.

-Se ha dicho que su candidatura ya no tiene futuro con la llegada de Manuel Espino a la dirigencia del PAN, pues se ha afirmado que él apoyaría las aspiraciones del secretario de Gobernación, Santiago Creel.

-Sí tiene futuro y de hecho las reglas quedaron establecidas de antemano. La comisión de elecciones -que tendrá a su cargo el proceso de selección del abanderado presidencial- fue integrada con antelación, y la votación estará en manos de los panistas. Estoy convencido de que al momento que se inicie formalmente la contienda mis posibilidades de triunfo se van a incrementar. No me parece malo que haya un CEN que tenga diversas visiones y preferencias, sin que pueda afirmarse que posea dominio o predominio algún posible precandidato.

''Hay una condición muy dispareja en términos de presencia pública, de utilización de recursos, con respecto al secretario de Gobernación, pero a final de cuentas es una situación que el partido deberá corregir a sabiendas de que va en prenda la unidad del PAN. Sé que ningún dirigente arriesgaría al partido por un interés personal o particular.''

-¿Si el proceso no es equitativo?

-Veremos. Estoy habituado a competir en condiciones difíciles y si hay alguien que esté preocupado porque estoy corriendo por la brecha, le digo que no se preocupe: soy un panista cuatro por cuatro, todo terreno, conozco la brecha muy bien, tengo la ventaja de que sé adónde ir. Ojalá las circunstancias se equilibren, pero aun en el supuesto de que no sea así, sé que puedo ganar la candidatura y lo voy a hacer.

-¿Cuál es el papel de Marta Sahagún en el PAN?

-El de un personaje con gran presencia pública, que quiere participar en el partido y cuyo papel protagónico lo ejerce en diversos ámbitos, y ahora en una relación (con Manuel Espino) que ciertamente había que reconstruir, porque había quedado seriamente averiada.

Para concluir la entrevista, Calderón descarta que la esposa del Presidente vaya a contender por la candidatura presidencial de Acción Nacional. ''Es un tema cerrado por la propia Marta, y ella es mujer de palabra'', subraya.

Por último, dice esperar que la nueva dirigencia asuma con claridad un compromiso con los principios y valores del PAN.