POESIA PARA LLEVAR
De piedra y luna
QUERIA YO HABLAR (razones de espacio me persuadieron de lo contrario) de la poblana Elena Quirós, maestra normalista y actriz, de su primera plaqueta, Bajo la sombra de las camelias; de su enojo, tan católica ella, porque en la librería de un seminario (espero no equivocarme) cubrieron la palabra ''putas" con un papelito que decía ''mujeres" en conocido título de García Márquez; de su libro en prensa Caminos de piedraluna, rústicas estampas relativas al ámbito escolar, algunas de éstas, la mayoría, encantadoras, si bien no faltan las notas trágicas. Pero...
EL PRIETO, NARIZ afilada, de ojos grandes negros y pestañas chinas, esperaba afuera del salón de sexto.
-MAESTRA, LA buscan -dijo Gau.
-¿QUIÉN?
-UN MUCHACHO.
-QUE ME ESPERE, no abras.
Y SEGUIA LA maestra escribiendo en el pizarrón una lista de verbos en presente.
INQUIETOS LOS NIÑOS, por las ventilas abiertas se asomaban ansiosos.
-ABRAN LA PUERTA; que pase.
COMO EN UN primer acto el prieto se plantó frente a todos.
-QUIERO QUE SU maestra sea mi novia, estoy enamorado de ella, escribo versos y también voy a ser maestro.
HUBO COMO UN silencio roto a carcajadas.
NO ESPERO MAS y salió del salón.
ALBOROTADOS LOS alumnos gritaron.
-EHHH LA MAESTRA ya se puso colorada.
ESCUCHAMOS EL FUERTE arrancón de una camioneta que se fue dejando un rastro de polvo.
REGRESO ALGUNAS tardes. Se mecía en el columpio que más rechinaba.
AHI EN EL parque tiró sus versos.
DEL TINTE TRAGICO, rulfiano, lo siguiente:
LA MATO CON la cruz que tenía la tumba de su papá, cuando fue sola al camposanto a dejarle flores. Luego supieron quién fue.
DON SEBAS LO vio lavarse las manos en el hidrante de la plaza, el agua corría con sangre.
EL MISMO DIA del entierro, cuando miraba pasar el cortejo desde la azotea de su casa, lo detuvieron los judiciales.
VIENDOME CON UNA risa burlona, don Panchito le sopla a su jarro de pulque.
-¿A POCO NO se acuerda que fue su alumno?
IBA A LA escuela. Después su mamá lo metió a trabajar a la bodega de alimentos para animales. Goya vivía enfrente y todos los días la veía salir; dice que lo hizo porque le caía mal.
UNA FILA DE hormigas subía por la pared de adobe, en un pequeño barril de madera se fermentaba el aguamiel; don Panchito se acomodó el sombrero, esperando una respuesta.
-SABE DIOS QUIEN vaya a vender la casa y el taxi. El hermano hace muchos años que desapareció, puede que ya esté muerto; Goya era la única que quedaba de esa familia.
ATRAS DE LA casa pasó un caballo a todo galope.
EL SEÑOR SE levantó, sobándose las piernas medio tullidas por las reumas. Salió a la puerta esperando que el caballo regresara, no volvió, se perdió por el camino de la cantera; el jinete era su hijo.
CON LA PUNTA del zapato arrimó un olote tirado en el suelo y se volvió a sentar.
OTRA VEZ ESTA borracho -murmuró-. Entonces qué maestra, el asesino, ¿fue su alumno?
RECORDE EL PAPEL arrugado encima del escritorio; ''me caes mal maestra", escrito con letras rojas.
UNA ABEJA SOLITARIA se quedó zumbando encima del aguamiel.