SALON PALACIO
Noyola, Magaña, Fancy Free y Fadanelli en La Faena
LA MESA DE la esquina que se encuentra al fondo de la cantina taurina La Faena, fue el destino final al que seguimos por las calles del centro al escritor Guillermo Fadanelli, quien por cierto generosamente invitó casi todas las chelas y otras sustancias. Ese viernes Fada y yo nos habíamos visto en La Puerta del Sol (no la cervecería de Coyoacán, sino aquella cantina de Cinco de Mayo y Palma, donde aún hay pequeños gabinetes redondos). Tomamos unos tequilas antes de la presentación del libro Borracho (guión de la película Barfly) de Charles Bukowski. El editor y traductor Carlos Bortoni me informó que afuera del museo Ex Teresa Arte Actual ya había más de 500 personas (nos pareció una exageración).
ESTABAMOS A PUNTO de llegar cuando se nos ocurrió asomarnos a la cantina con licencia número 1, El Nivel, y sí, ahí estaba el tercer presentador Eusebio Ruvalcaba. Zapata, el mesero más antiguo del lugar nos sirvió otro tequila. Llegó otra llamada del fundador de la editorial Nula y nos dimos prisa. De plano nos sorprendió ver totalmente llena la ex capilla del Ex Teresa y nos extasiamos con tantos fans... de Bukowski, claro. Nos pusieron una botella de vino y otra de tequila en la mesa, algún incauto jovencito nos mandó un regalo envuelto en un papelito. Carlos Jaurena, regenteador del lugar (nos dijo que rompimos récord de asistencia), se portó a la altura y todos se fueron felices a continuar la noche por otro lado.
Palomanegra, libro de Samuel Noyola
CUANDO LLEGAMOS A Ex Teresa con el primero que topé fue al irredento poeta Samuel Noyola, aquel que Octavio Paz consideró el mejor de su generación (mejor no lo hubiera dicho) y le publicó aquel bello librito de Tequila con calavera. Noyola se ha convertido en todo aquello que aterroriza al "pequeño burgués" que todos llevamos dentro. Puede ser verdaderamente incendiario, violento y etílicamente soez. Pero también es un poeta, también puede tener ideas brillantes y también suele ser muy divertido y fraterno. Aquella madrugada fue amable y nos regaló el libro Palomanegra productions, que le reeditó el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes de Nuevo León dentro de la colección Arido Reino. Hay un poema que sintetiza algo de su existencia: "El mercado está cerrado/ y en la cantina del Rancho Global/ hay barra libre todo el día// Tú me dirás Jonás,/ porque me lleva la ballena/ por el meollo// ¿O meo yo?/ Desde la barra hasta el baño / todos somos una película de El Santo".
AQUELLA NOCHE DE viernes Jaime Magaña estuvo también muy tranquilo. Después de varios años de ausencia creativa y empantanado en las mazmorras del inframundo, ahora cada día publica más en diversas revistas alternativas. En el número 12 de la revista Cuiria aparece un irreverente collage dedicado a la gran familia guadalupana. El tema de esta radical publicación cultural es provocador, se titula Locura, viajes imaginarios y en la portada aparecen unos pellotes con cuerpo de mujer, óleo de Jorge Islas. Se publica otro collage de Magaña en la revista Verso Destierro, que ha llegado a su número cuatro y anuncia dibujos censurados del siempre censurable y alucinante Eko.
¿Son fresas los Fancy Free?
FADANELLI QUIZO IR al concierto de una banda comandada por un ex menonita llamado Martín Thulin, quien controla con el boletaje de sus actuaciones. Cuando éste se quitó la camisa y pretendió sorprendernos con sus supuestos arriesgues histriónicos lo sentimos un tanto fresa y en general todo el ambiente era tan inofensivo: la música era bailable y las jovencitas bellas. La Faena es una cantina vieja y los 40 querubines plasmados en la decoración de sus techos, resultan tan desfasados como aquellos maniquíes de toreros polvosos y toros disecados que tienen que soportar las hordas de las juventudes roqueras.