"Con la dignidad de nuestro país no se debe ni se puede jugar": Romano Prodi
Berlusconi se retracta y dice que las tropas italianas no saldrán de Irak
Sostiene que su ejército se retirará sólo "con el consentimiento de EU y GB"
Ampliar la imagen A boy holds up a banner showing a picture of his father and which reads, " I want my Father", during a protest demanding the release of loved ones in the southern city of Basra, 500 kms from Baghdad 16 March 2005. The protestors demanded the prisoners held by the British coalition forces be freed. In the background, are various posters of different Shiite Muslim religious leaders and that of the Imam Hussein (L). AFP PHOTO/ESSAM AL-SUDANI
Roma, 16 de marzo. El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, dijo hoy que su país no retirará sus tropas de Irak en septiembre sin el consentimiento de Estados Unidos y Gran Bretaña, retractándose así del anuncio hecho el martes, cuando afirmó que las tropas italianas se retirarían en cinco meses.
El presidente estadunidense, George W. Bush, dijo haber hablado telefónicamente con Berlusconi y señaló que éste le aseguró que no ha cambiado su política hacia Irak. El jefe de la oposición italiana, Romano Prodi, acusó a Berlusconi de "jugar" con la dignidad del país con su anuncio y posterior desmentido sobre el repliegue italiano.
Berlusconi explicó a un grupo de periodistas: "Manifesté simplemente el deseo", y añadió que el retiro de las tropas italianas "debe ser acordado con los aliados".
El premier italiano anunció ayer en un programa televisivo su decisión de retirar gradualmente, a partir de septiembre, las tropas de Irak.
La prensa local especuló sobre el anuncio -hoy desmentido- que éste se debía al asesinato de un agente de los servicios italianos por disparos estadunidenses cuando rescataba a la periodista italiana secuestrada Giuliana Sgrena. Otros medios afirmaron que la declaración de Berlusconi tenía fines puramente electorales.
Interrogado sobre la posibilidad de que Bush y el primer ministro británico, Tony Blair, se opongan al retiro italiano, Berlusconi respondió: "Si no se puede, no se puede. Todo debe ser acordado con los aliados", afirmó.
Prodi, ex presidente de la Comisión Europea, fustigó a Berlusconi, a quien acusó de obedecer los designios de Washington y Londres. "No se puede ni se debe jugar con la dignidad de nuestro país", dijo.
"No es posible que una noche se fije con precisión el comienzo de la retirada de las tropas y 24 horas más tarde se dé marcha atrás porque se recibió una llamada de atención. Es contrario a las normas más elementales de la política", recalcó.
Si bien la Casa Blanca restó importancia el martes al anuncio de Berlusconi, este miércoles Bush aseveró que Italia sigue siendo aliado incondicional de Estados Unidos en Irak. "Llamé a Silvio Berslusconi y planteó el tema de las tropas italianas en Irak. Dijo de entrada que quería decirme que no había cambios en su política", declaró Bush durante una conferencia de prensa.
Añadió que Berlusconi le garantizó que no retirará a las tropas italianas de Irak sin previa consulta a los "aliados, y en función de la capacidad de los iraquíes de defenderse por sí mismos.
"Nuestros aliados comprenden eso, pero están ansiosos por llevar a casa a sus soldados", agregó Bush.
El anuncio de la decisión italiana ocurrió en momentos en que Holanda y Ucrania han comenzado a retirar sus tropas de Irak. En abril de 2004, el presidente del gobierno español, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, ordenó el retiro de las tropas españolas enviadas a Irak por su predecesor José María Aznar.
La recién conformada Asamblea Nacional iraquí mantuvo hoy su primera sesión en Bagdad a pesar de la falta de acuerdo para la formación de un gobierno, 45 días después de las elecciones. Antes de la reunión, cinco soldados iraquíes murieron y 12 personas resultaron heridas, entre ellas 10 soldados, en un ataque suicida con coche bomba en un puesto de control iraquí cerca de Baquba, al noreste de Bagdad.
Al sur de la capital, una persona murió y 12 resultaron heridas en un atentado cometido cerca de un convoy militar estadunidense, informó el Ministerio del Interior. El ejército estadunidense anunció la muerte de uno de sus soldados como consecuencia del estallido de una bomba casera al sur de Bagdad, con lo que se eleva a mil 508 el número de soldados estadunidenses fallecidos desde que comenzó la invasión a Irak en marzo de 2003, de los cuales, mil 153 han perdido la vida en combate, según estimación realizada a partir del último balance de víctimas del Pentágono.
En la norteña Mosul murieron cuatro personas y otras tantas perecieron en Baiji al estallar una bomba. Además, se encontraron tres cadáveres de iraquíes cerca de Balad, al norte de la capital, y uno en Hilla, al sur, según la policía.
En Nibai, cuatro kilómetros al sur de Balad, las fuerzas de seguridad encontraron los cuerpos de un intérprete, un empresario y un camionero que trabajaban para el ejército estadunidense, afirmó el comandante de la policía Adel Abdalá.
De su lado, el ejército estadunidense desmintió la muerte de un general iraquí a manos de marines en un puesto de control en el oeste de Bagdad, anunciada el martes por la policía iraquí.
A su vez, la Cámara de Representantes del Congreso estadunidense aprobó por amplia mayoría este miércoles una solicitud de Bush de 81 mil millones de dólares para operaciones militares en Irak y Afganistán, por 388 votos contra 43.
Por último, la organización Transparencia Internacional afirmó que la reconstrucción de Irak corre el riesgo de convertirse en el mayor escándalo de corrupción del mundo, en un informe que se centró en el problema global de los sobornos en la industria de la construcción.