Debe tener autonomía en ese tema, coinciden especialistas en la Asamblea Legislativa
El DF, en la adolescencia en materia de manejo de deuda pública: Amador
El débito de la ciudad bajo control, afirma el director de Administración Financiera
La deuda de la ciudad de México, de 42 mil millones de pesos, se encuentra en rangos manejables, que no ponen en riesgo su estabilidad financiera, pues representa sólo 2.5 por ciento del producto interno bruto nacional y 4 por ciento del presupuesto local, afirmó el director de Administración Financiera, Edgar Amador Zamora.
Consideró que debido a que ese monto es contratado por el gobierno federal "debería éste pagarla y no los habitantes de la ciudad, porque nosotros no dijimos que se endeudara la ciudad, pero la reforma política incompleta del Distrito Federal mantiene a los ciudadanos en la adolescencia en materia de deuda".
Técnicamente, explicó, la ciudad no puede deberle a un acreedor del mercado de capitales, aunque el asunto quedó "medio resuelto" por el artículo 122 constitucional y un transitorio redactado en 1996, cuando se creó una figura jurídica para la contratación de deuda, integrada por tres actos simultáneos: un contrato de apertura de crédito simple, una derivación de fondos y un contrato de constitución de garantías.
De esta manera, la Federación se encarga de contratar el crédito con un banco, firma un contrato, por el cual se obliga a asumir la deuda en nombre de los Estados Unidos Mexicanos, y a entregarlo a la ciudad, lo cual "no es gratis, porque todas las participaciones de la ciudad quedan afectadas y no existe dentro del presupuesto ninguna partida en la que se consigne la deuda capitalina, dado que todas las participaciones son afectables", sostuvo.
Indicó que una de las ventajas del actual estatuto legal es la de contar con una calificación triple A en materia crediticia, que le ha permitido al Distrito Federal incursionar en el mercado de dinero, "aunque no sabemos qué sucederá con su deuda histórica y si cambiará la percepción de las calificadoras Standard and Poor's y Fitcher and Price Waterhouse, de modificarse dicho estatuto en el Congreso de la Unión.
En el Foro de Deuda Pública organizado por la Asamblea Legislativa (ALDF), el director de Deuda Pública de los Estados y Municipios, de la Secretaría de Hacienda, Jaime Jiménez Flores, reconoció que la situación del débito de la ciudad no es un tema fácil y es anómala respecto de las demás entidades federativas; por ello, en las tres mesas de la Convención Nacional Hacendaria (ingreso, gasto y deuda) se concluyó que es necesario que el DF tenga autonomía en la contratación de su duda.
Ello no significa que la Secretaría de Hacienda absorba la deuda de la ciudad, aclaró, porque los recursos solicitados se han invertido en obras de infraestructura, de transporte y vialidad. Resaltó que es necesario llevar a cabo un programa integral, que incluya una ley de deuda pública y faculte al DF para manejar sus ingresos propios, los federales, el gasto federalizado y los recursos para educación.
Por su parte, la presidenta de la Comisión de Hacienda de la ALDF, Guadalupe Chavira, dijo confiar en que no exista ningún impedimento político para que se concrete el cambio del estatuto legal y sea la Asamblea Legislativa la que apruebe el techo de endeudamiento de la ciudad.