El presidente de la Cámara acepta presentarlo en segunda lectura
Dictamen perdido de voto en el exterior aviva la pugna Chuayffet-Beltrones
La pugna entre Emilio Chuayffet Chemor, coordinador de los legisladores del Partido Revolucionario Institucional (PRI), y Manlio Fabio Beltrones, presidente de la mesa directiva de la Cámara de Diputados, escaló más ayer luego de que el primero acusó al segundo de "desaparecer" el dictamen sobre el voto de los mexicanos en el extranjero, que ya fue considerado en primera lectura, y de constituir unilateralmente la Comisión Especial de Seguridad Nacional.
Sin embargo, las presiones de las otras bancadas, avivadas por Chuayffet, hicieron que Beltrones reculara en la confrontación y acordara presentar el dictamen en segunda lectura en la próxima sesión.
Desde el martes, Chuayffet promovió entre los coordinadores parlamentarios un voto de censura contra Beltrones por incumplir su obligación de citar a la Conferencia para los Trabajos Legislativos cada 15 días. Ayer, molesto, el presidente de la mesa directiva decidió convocar para mañana, pero la bancada del Partido del Trabajo tenía pactados otros compromisos, la del Partido de la Revolución Democrática sugirió que fuera el lunes y, en plena sesión, el vicecoordinador panista, José González Morfín, planteó a Pablo Gómez y a Alejandro González Yáñez que se citara para ayer mismo a las seis de la tarde.
Hasta la curul de Gómez llegó Wintilo Vega, operador de Chuayffet, para sugerirle que hablara con éste por teléfono, y ambos coordinadores convinieron que la cita fuera a las seis. "Ni la hora me dejaron", se quejó Beltrones con González Yáñez, y aun así pidió que se citara a las 17:30 horas.
Las diferencias entre Chuayffet y Beltrones se avivaron el martes, luego de que Wintilo Vega engañó al mexiquense, a quien le dijo que sus declaraciones respecto de que sólo le faltaba desaforar al jefe de Gobierno capitalino, Andrés Manuel López Obrador, se debían a una supuesta filtración de colaboradores del presidente de la mesa directiva a La Jornada.
Y es que las revelaciones sobre las actitudes y dichos de Wintilo Vega descompusieron a Chuayffet, quien desde el martes se encargó de denostar, ante quien quisiera escucharlo, a este periódico y a sus reporteros, a quienes acusó de "venderse" a López Obrador y a Beltrones.
El discurso de Chuayffet contra este diario es viejo. Hace medio año, también en una plenaria, acusó a La Jornada de mentir sobre sus relaciones políticas con el gobernador del estado de México, Arturo Montiel Rojas, para acordar con él la candidatura de Enrique Peña Nieto al gobierno estatal. El domingo pasado no acató la sugerencia del dirigente nacional del PRI, Roberto Madrazo, de no asistir a la toma de protesta de Peña, y se le vio muy sonriente en Toluca, junto a Montiel.
La intriga de Wintilo Vega derivó en la amenaza de éste de darles "dos plomazos" a los integrantes del equipo de Beltrones en San Lázaro, y ayer se convirtió en tema de choteo entre los legisladores, pero el coordinador priísta seguía molesto. "¡La prensa está muy dura!", exclamó Chuayffet mientras entraba al Salón Verde de San Lázaro para iniciar la plenaria priísta, a la que no se presentó Beltrones.
Ayer la rivalidad Chuayffet-Beltrones se avivó, y el coordinador priísta aprovechó que la mesa directiva argumentó que el dictamen sobre el voto de los mexicanos en el extranjero -que se discutirá en la sesión del martes- tenía inconsistencias técnicas para sacarlo del orden del día sin informar a los diputados.
"Hubo otra vez una mala interpretación de la ley. No se consultó al pleno, que es, en mi opinión -no a los coordinadores- a quien se debió haber consultado", declaró Chuayffet al concluir la reunión de la bancada priísta, previa a la sesión de ayer.
-¿Procede que se reponga el procedimiento?
-Creo que usted no puede hacer que desaparezca un dictamen que queda en primera lectura alegando inconsistencias, para eso está el procedimiento legislativo posterior, para que ahí se corrijan. Todas las bancadas están extrañadas, porque habíamos acordado discutirlo y de repente desaparece. "Pero el asunto no sólo es ese, sino que independientemente de haberse tomado el acuerdo no se le comunicó a ningún grupo parlamentario".
Las declaraciones de Chuayffet ocurrieron al concluir la plenaria, donde la diputada Laura Martínez explicó que ella tenía la responsabilidad de corregir el dictamen, mediante una fe de erratas, y que el documento se le extravió al secretario de la mesa, Marco Morales, quien -hasta ayer se confirmó- lo dejó "olvidado" entre un altero de papeles.