Usted está aquí: lunes 14 de febrero de 2005 Opinión CARPA D

CARPA D

 

Versión estenográfica/ Fragmento de un informe

LO recuerda bien el ex comandante.

A Domingo le quitaron sus zapatos negros de vestir,

un reloj, la cartera, la camisa,

documentos que tenía en una bolsa negra

y por cerca de 10 minutos lo estuvieron interrogando.

Lo tenían hincado cuando Pablo Pérez Ramírez

le disparó a la altura del corazón

con una escopeta calibre 16.

Se desplomó al instante.

El cuerpo lo llevaron a una loma,

donde cavaron una zanja de 40 centímetros de profundidad

y lo enterraron.

La búsqueda de Domingo que

iniciaron familiares y amigos

obligó a los paramilitares,

semanas después,

a intentar mover el cuerpo.

Fue imposible: se estaba

deshaciendo.

Por la transcripción, el indio Heterónimo

 
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