Prometen no retornar al poblado Sol Paraíso
Liberan a dos indígenas que regresaron a Montes Azules
San Cristobal de Las Casas, Chis., 12 de febrero. La Subprocuraduría de Justicia Indígena liberó la noche del viernes a dos tzotziles que habían sido detenidos el miércoles, cuando junto con otros 15 familiares reinvadieron el poblado Sol Paraíso, ubicado en la reserva de Montes Azules.
Pedro Faro, abogado del Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas, que asumió la defensa de los acusados, informó que Faustino Sánchez Hernández y Victorio Núñez Jiménez -quienes dicen ser bases de apoyo del EZLN-, fueron liberados luego de haber firmado una acta administrativa en la que se comprometen a no regresar a Sol Paraíso.
Faustino y Victorio habían sido reubicados con sus familias presuntamente en un lugar cercano al ejido La Realidad, municipio de Las Margaritas, pero en enero pasado decidieron regresar a Sol Paraíso porque ahí las tierras "dan buena cosecha, hay animales para cazar y un río con abundante agua".
Pero el 26 de enero el presidente de Bienes Comunales de la zona lacandona, David Sansores, interpuso una demanda penal por el delito de atentado contra el saneamiento del ambiente y la ecología, según consta en la averiguación previa SJI/019/2005.
El pasado miércoles, la policía desalojó a dos mujeres, cuatro niños y siete niñas y detuvo a los dos padres de familia; otros dos hombres escaparon.
En tanto, miembros de la Agencia Federal de Investigación (AFI) fuertemente armados rescataron a uno de sus compañeros que había sido encerrado en una cárcel de Nachig, municipio de Zinacantán, luego de haber chocado su camioneta contra un poste de luz, lo que provocó daños a la estructura eléctrica y a un tanque de agua.
Fuentes gubernamentales informaron que alrededor de la media noche del viernes el agente Alejandro Zenteno Gómez -en compañía de otro policía cuyo nombre no fue dado a conocer- conducía una camioneta placas CX 50542 por la carretera Panamericana presuntamente en estado de ebriedad, cuando el vehículo se impactó contra un poste de luz.
Debido a los daños ocasionados, los indígenas de Nachig retuvieron a los dos agentes, pero uno fue liberado para que avisara a sus compañeros y acudieran a pagar los daños. Dos horas después llegaron entre seis y ocho agentes armados, abrieron la puerta de la cárcel y se llevaron a Zenteno Gómez, pero dejaron abandonada la camioneta. Después de pagar una "multa" de 8 mil pesos, los agentes se llevaron la camioneta, con lo cual se dio por solucionado el problema.