Testimonio confirma que soldados y agentes judiciales disolvieron con violencia una huelga

Intervinieron militares en represión a universitarios nayaritas, en los 70

La Femospp investiga el caso; en esa época fueron asesinados dos estudiantes y tres trabajadores

Los hechos, durante la gubernatura de Flores Curiel, jefe de la policía del DF cuando el halconazo

JESUS ARANDA

Elementos "en activo" del Ejército participaron en la represión al movimiento universitario de finales de los años 70 en Nayarit, durante el cual fueron asesinados dos estudiantes y tres trabajadores por integrantes de la policía universitaria.

Información contenida en la averiguación previa de la Fiscalía Especializada en Movimientos Sociales y Políticos del Pasado (Femospp) sobre el caso Nayarit, revela que el capitán Marco Antonio Meza Barajas estuvo al mando de soldados y policías judiciales estatales que formaban parte de la llamada policía universitaria, un grupo paramilitar creado por el entonces rector de la Universidad Autónoma de Nayarit (UAN), Petronilo Díaz, para reventar el movimiento universitario.

La Femospp cuenta con el testimonio del soldado J. Jesús Bautista Guerrero, quien reconoció que era "militar activo" y que actuó bajo las órdenes del capitán Meza Barajas -quien, por cierto, es hermano del actual secretario de Gobierno, Adán Meza Barajas-, cuando el 20 de febrero de 1979 los policías universitarios irrumpieron con armas de alto poder en la UAN, que estaba ocupada por los huelguistas desde el 8 de enero de ese año.

De acuerdo con la denuncia que presentó José Luis González López ante la Femospp, el entonces gobernador de Nayarit, Rogelio Flores Curiel (1976-1981) -quien también es investigado por su participación en los hechos del 10 de junio de 1971 en su calidad de jefe de la policía del Distrito Federal-, mantuvo una línea de "continuidad" en la represión ejercida por el Estado mexicano en contra de movimientos sociales contrarios al régimen.

Apenas unos días después del halconazo de 1971, Flores Curiel fue destituido de su cargo. Sin embargo, cuatro años después fue premiado por el presidente Luis Echeverría con su designación como candidato del PRI a la gubernatura de Nayarit.

Según crónicas de la época, su triunfo fue producto de un fraude electoral.

Una vez en el cargo, Flores Curiel nombró a Antonio Sam López procurador del estado, y al actual gobernador Antonio Echevarría Domínguez tesorero general.

Asimismo impuso a Petronilo Díaz Ponce como rector de la UAN, quien "se caracterizó por su política autoritaria y represiva en contra de los universitarios nayaritas", indica la denuncia.

En 1978 formó un "cuerpo represivo denominado policía universitaria", que se dedicó a sembrar el terror en el campus mediante extorsiones y violencia en contra de maestros, alumnos y trabajadores.

La Femospp tomó conocimiento que de que al menos 45 integrantes de este grupo paramilitar eran policías judiciales y militares. En ese contexto, el testimonio de Bautista Guerrero confirma la participación del Ejército Mexicano en la represión estudiantil.

Al mismo tiempo, las autoridades universitarias impulsaron la creación de grupos porriles de tendencia "fascista" que, según la denuncia, estaban encabezados por Benito Portes, José Ahumada, Braulio Corona y El Niño Durán, subraya el quejoso, quien ha ratificado ante el Ministerio Público Federal que para agosto de 1978 había dos universitarios muertos a causa de la violencia. Se trata de Jesús Modad y Enrique Sánchez Ramírez.

Las protestas de los estudiantes derivaron en el estallamiento de la huelga del 8 de enero, movimiento que concluyó violentamente cuando el 20 de febrero se presentaron elementos de la policía universitaria en las instalaciones ocupadas por los estudiantes.

Durante la acción fueron asesinados los trabajadores Juan Manuel Partida Chávez, Ramón Jiménez Vizcarra y Pedro Alba Durón.

El denunciante González López señaló que el día de los hechos el rector de la UAN le envió un telegrama al presidente de la República en el que afirmó que los trabajadores "se victimaron entre ellos mismos".

A pesar de las múltiples denuncias que se presentaron en su momento ante la Procuraduría General de Justicia del Estado de Nayarit, ''jamás se inició una investigación sobre estos hechos'', lo que permitió que la conducta de Díaz Ponce, avalada por Flores Curiel, quedara impune.

Con la denuncia presentada ante la Femospp en julio de 2002 y que, según fuentes oficiales, está por resolverse en fecha próxima, la fiscalía cuenta con elementos suficientes para demostrar la participación activa del Ejército en actos de represión, así como la actuación "omisiva" de la procuraduría de Nayarit en favor del ex gobernador Flores Curiel y de sus principales colaboradores, entre los que se encuentra el actual mandatario de la entidad, Antonio Echevarría Domínguez, quien ha declarado que como titular de la Tesorería estatal podría rendir cuentas del papel jugado por el PRI en esos hechos, dado que él se encargó de proporcionar los recursos a las organizaciones afines al gobierno estatal.