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México D.F. Domingo 14 de noviembre de 2004
Elena Poniatowska /I
Peso de la sociedad civil en el México actual y participación ciudadana
Alguna vez el wagneriano Julio Scherer García preguntaba desesperado si valía la pena morir por algo en este país y no encontraba la respuesta. Siempre he pensado que el amor es el aliciente más definitivo, el más rotundo y admiro a quienes aman a un hombre o a una mujer por encima de todo. También a los que aman a su país como lo hizo López Velarde. Habría que recordar que la sociedad civil incidió admirablemente en la vida pública durante los dos terremotos del 19 y el 20 de septiembre de 1985, cuando prácticamente tomó el poder ante unas autoridades acorbadadas e ineptas. Acostumbrada al autoritarismo y al valemadrismo, la sociedad civil sin embargo rebasó al gobierno y demostró que sabía amar no sólo a las víctimas, sino a una ciudad golpeada hasta la médula que había que lavar, curar y arropar.
Los primeros peregrinos que llegaron al estado de Pennsylvania en el siglo XVII, William Penn y sus compañeros, los "founding fathers", construyeron una nación puritana y justiciera en torno a un destino manifiesto y cumplieron el objetivo de volverse el país más poderoso del mundo, aunque ahora se encaminen hacia el fascismo pero, Ƒcuál es el destino de México, país en el que vivimos y al que amamos tan heroicamente en las situaciones límites y abandonamos con tanta crueldad en la vida de todos los días?
ƑQué es lo que moviliza a los mexicanos? Además de las reacciones inmediatas a algún acontecimiento deportivo o político, están los objetivos de gran aliento que deberían estimularnos. ƑQué clase de país queremos? Al saberlo, Ƒcómo vamos a lograr lo que queremos? ƑCuáles han sido nuestras batallas y por qué luchamos ahora? Desde luego, el empuje de las manifestaciones callejeras es un indicador de que lo primero es el futbol aunque hagamos un papel tan pobre en los Juegos Olímpicos.
Líber Seregni y Uruguay
Hace apenas dos semanas triunfó en Uruguay el candidato del Frente Amplio, Tabaré Vázquez, y 500 mil personas se volcaron a la calle. Para una población de 3 millones 200 mil como la de Uruguay es una verdadera proeza aún no conseguida en México, ni siquiera cuando Vicente Fox derrocó al partido oficial. Cito el triunfo de Tabaré Vázquez, entre otras razones, porque en los años 40 vino a México exiliado un general uruguayo, Liber Seregni (que pasó muchos años en la cárcel por su posición política), y Seregni pidió que lo adscribieran al observatorio astronómico de Tonantzintla, Puebla, porque a él le interesaba la astrofísica. Para Guillermo Haro, director del observatorio, Liber Seregni fue un descubrimiento tan grande como el de una estrella en el cielo. Trató a un hombre honrado, inteligente, culto, sensible, patriota, un ser excepcional. Tabaré Vázquez, en Uruguay, demuestra ahora que en un país ignorado y herido, en un país donde se pretendía privatizar hasta el agua, en un país del que todos querían huir han triunfado la cordura y el amor patrio. "Sabe, vuelvo a España de donde son mis ancestros". "Me voy a Italia, aquí no hay nada para mí". Los uruguayos sentados en el malecón veían durante horas hacia el mar como si con la sola fuerza de su deseo imantarían un barco que se los llevara para siempre. Cuando visité Montevideo en 2001, a pesar de la belleza del puerto, Uruguay me pareció un país de tristes y de abandonados, un país viudo inconsolable, un país de puertas y ventanas cerradas y casas clausuradas. "Aquí ya no vive nadie". La embarcación hacía agua. ƑCómo iba yo a adivinar que triunfarían la inteligencia y la esperanza?
ƑQué pasa en México que no podemos tener una transformación nacional profunda? ƑQué lo impide?
Bendita Constitución
Ciertos ideales de la Constitución deberían ser ejes movilizadores para los mexicanos, pero no lo han sido: los indígenas son parias en nuestro país y sus oportunidades son mínimas al lado de otros mexicanos. A la Constitución nos hemos dedicado a violarla. ƑCreemos en la Constitución? ƑNos ayuda la Constitución para nuestra vida como nación?, se pregunta el doctor Manuel Fernández Guasti. Más bien nos vale sombrilla porque los políticos la retuercen en función de sus intereses, como sucede en el caso de Petróleos Mexicanos (Pemex).
El petróleo, la educación, el indigenismo, la situación de los migrantes, la de las mujeres, la lucha contra la corrupción podrían ser ejes movilizadores de la llamada sociedad civil en México.
La Constitución estipula que el petróleo es un recurso de la nación y lo único que hemos visto son contratos con el extranjero. Estados Unidos sabe más de las plantas de Pemex que nosotros mismos, ya que la pésima administración de nuestra máxima riqueza en vez de liberarnos nos ha hecho más dependientes. Pemex, por ejemplo, pierde 500 mil dólares diarios por fallas en el equipo.
Hasta ahora Pemex ha explotado absurdamente el petróleo y, dentro de poco, a la vuelta de la esquina perderemos el control de nuestra principal riqueza. La petroquímica se dividió en primaria, secundaria, etcétera; la primera es la que saca el crudo de los pozos y los demás procesos secundarios y terciarios se han entregado a distintas compañías. Además el petróleo se exporta crudo en vez de refinado, lo cual le representaría una plusvalía a México. Y ahora nos enfrentamos a un hecho increíble: importamos gasolina. De país productor y exportador de petróleo hemos pasado a importador de gasolina porque no somos capaces de refinar nuestro propio petróleo. ƑLo saben los mexicanos? El petróleo debería ser un eje movilizador de la sociedad civil, ya que es el motor de nuestra economía, pero se nos va de entre las manos sin que nos demos por enterados.
En este momento quisiera distraerlos con otra desalentadora pero chusca noticia. Jalisco va a importar 50 burros de Kentucky porque de cada 50 burros sólo queda uno. ƑSerá el que nos gobierna?
El problema energético preocupa a los científicos, entre otros a Manuel Fernández Guasti, egresado de la Universidad de Oxford, donde obtuvo su doctorado en óptica, investigador de la UAM (y padre de dos inglesitas con nombres yucatecos, Labna y Sasil). Más allá de los vaivenes, el petróleo se ha vuelto muy caro, sube su precio porque cada vez escasea más en el planeta y en un momento en que México debería ser un país en auge económico, estamos en crisis, no invertimos recursos en fuentes alternativas y sólo pagamos los intereses de la deuda externa. ƑNo es ofensivo para el pueblo de México que el gobierno le baje tres dólares al precio del petróleo? ƑPor qué las cosas se nos van de las manos? ƑPor qué nos guillotinamos cada seis años? ƑAlguien recuerda ahora la Revolución Verde de Norman Borlaugh iniciada en Morelos? ƑAdónde se han ido los proyectos que antes triunfaron?
El sol
Una de las fuentes alternativas de energía es el sol. Vivimos en un país con una gran radiación solar, a diferencia de otros, pero no invertimos en esa energía y ahí podríamos hacer un esfuerzo. Aunque ya se hizo con celdas solares cristalinas, otras alternativas son posibles, como la del silicio amorfo, un material con el que se pueden convertir fotones (que conforman la luz) en electrones. La idea es convertir la luz solar en electricidad o en alguna forma de energía como la de los calentadores solares que en muchos hogares ya sustituyen al gas.
Conferencia pronunciada en el Museo de Arte Contemporáneo en Monterrey, dentro del ciclo "México en la visión de", a propósito de la sociedad civil
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