Necesario revisar el sistema judicial mexicano, exponen en un seminario

Hay parcialidad de jueces y erróneas indagaciones en casos de tortura: expertos

GEORGINA SALDIERNA

El Ministerio Público sigue actuando con parcialidad cuando en las denuncias de tortura el acusado de cometer tal delito es un servidor público, consideró Fabienne Cabaret, de Acción de los Cristianos para la Abolición de la Tortura, mientras el secretario general adjunto para Asuntos Jurídicos de la Comisión Internacional de Juristas, Federico Andreu, advirtió sobre la necesidad de dar una mayor autonomía e independencia a los jueces, para garantizar que la justicia sea accesible, ágil, ecuánime e imparcial.

Al participar en el seminario sobre Instrumentos Nacionales e Internacionales para Prevenir, Investigar y Sancionar la Tortura, la integrante de la organización social también manifestó su preocupación porque en la aplicación del Protocolo de Estambul la instancia de procuración de justicia se enfoca en casos con perfil de tortura física reciente, cuando las maneras de lesionar a una persona han evolucionado y en muchos casos no dejan huella.

El enfoque que se da a las investigaciones y el hecho de que no está garantizada la imparcialidad del Ministerio Público son algunas de las razones por las cuales sólo uno de los 23 casos que ha estudiado la Procuraduría General de la República fue documentado como tortura, en el lapso de un año, desde que se trabaja con el protocolo.

Por su lado, Federico Andreu consideró necesario revisar la estructura del sistema judicial mexicano, pues existen diversos órganos que siguen muy ligados al titular del Ejecutivo y eso limita su actuación e inclusive puede enajenar su autonomía.

La imparcialidad depende de muchos factores, como la forma en cómo se nombran a las autoridades o a los jueces, y qué tan inamovibles son. En otros países el tema se ha resuelto con el establecimiento de estrategias que permiten que en la elección de los magistrados concurran otros poderes.