MEXICO SA

Carlos Fernández-Vega

Las cifras de empleo disienten con el mensaje divino de Fox

No se duplicarán panes, pero sí la miseria

GRACIAS AL INQUILINO DE Los Pinos los curas han sido puestos a trabajar horas extras y en sus futuras homilías tendrán que justificar ante sus fieles por qué el Altísimo ha sido, es, tan ostentosamente injusto con ellos.

HABRA QUIEN SUPONGA lo contrario, pero si los creyentes atienden la más reciente tesis presidencial -hecha pública en Cancún- en torno al quehacer divino, es de suponer que las oficinas eclesiásticas en México, cualquiera que sea la corriente que cada una de ellas represente, serán desbordadas por el cúmulo de reclamos por los resultados obtenidos, mientras los párrocos, en su pregón, se desgañitarán para convencer que su representado no avala el subdesarrollo, la pobreza, la concentración del ingreso, el raquítico crecimiento de un país y ni demás "datos duros".

TODO LO ANTERIOR, A RAIZ de que el presidente Fox decidió darle las gracias a "Dios (y a su acólito Ernesto Zedillo) por la estabilidad política, económica y social" que (versión Los Pinos) "vive México", equilibrio que, dicho sea de paso, entre otras cosas se traduce en la duplicación no de los panes sino del desempleo, la creciente marginación y un "crecimiento" que debería darle vergüenza.

EL ARCIPRESTE DE LOS PINOS resumió las razones por las que el grueso de los mexicanos que antes vivían al día ahora -logros son logros- lo hacen al minuto: "gracias a Dios y a la continuidad de las políticas económicas diseñadas por el entonces presidente Ernesto Zedillo, México ha sumado casi una década de estabilidad política, económica y social, afirmó hoy el presidente Vicente Fox. Además, para aquellos que insisten en que se ha perdido la confianza en el país (Ƒno será en su gobierno?) y disminuido la competitividad, el mandatario formuló el mentís correspondiente: la realidad, los datos duros, los indicadores nos muestran lo contrario'' (La Jornada, Rosa Elvira Vargas y David Sosa).

PARA QUE NO QUEDARA DUDA de que el Altísimo trabaja en Los Pinos, el presidente Fox remarcó: "el país lleva nueve años con dos gobiernos de dos partidos políticos diferentes, con las mismas políticas públicas en materia de diseño económico; con diferencias en su aplicación, pero básicamente las mismas políticas públicas que están alcanzando madurez", la cual hoy lesiona a más de la mitad de los mexicanos.

POR GRACIA DIVINA, TAMBIÉN, en la administración del "cambio" se ha registrado "la mayor inversión pública en la historia nacional", aunque ella sea mayoritariamente privada, mientras una porción de la que aparentemente sí es pública -federal y estatal- termina en la barranca, como en el caso del puente San Cristóbal en Chiapas.

NO SE SABE SI EL ALTISIMO LO autorizó, pero el inquilino de Los Pinos se oyó más que temerario durante la presentación de sus tesis al asegurar que "gracias a Dios", a Zedillo y a él mismo, desde luego, "atrás quedaron los quebrantos, atrás quedaron las devaluaciones, atrás quedaron las subidas repentinas de tasas de interés y muchos otros problemas". No es porque se deseen ni se convoquen, pero es tal la fragilidad económica, en especial la del vecino del que dependemos en grado sumo, que una nueva sacudida en ese sentido obligadamente implicaría vacaciones presidenciales en el purgatorio.

MIENTRAS DIOS DABA LINEA en Cancún, allá por el Ajusco los análisis de la Secretaría del Trabajo tiraban al bote de la basura la retórica oficial en materia laboral: en lo que va de la actual administración se han generado 324 mil empleos formales y 972 mil "no protegidos", es decir, tres de cada cuatro mexicanos que hallaron una ocupación -diciembre de 2000 a junio de 2004- sobreviven sin un salario fijo ni beneficios sociales. Un documento elaborado por esa dependencia pública señala que desde julio pasado el poder adquisitivo del salario contractual (negociado en las revisiones de contrato colectivo) se encuentra en números rojos; los aumentos aceptados por los trabajadores o por sus dirigentes sindicales son, en términos reales, menores al avance de la inflación. En el cierre preliminar al 21 de octubre pasado, la Subsecretaría de Empleo y Política Laboral de la STPS reporta que en lo que va de este gobierno el avance nominal de los salarios contractuales es de seis puntos, pero en términos reales (después de inflación) es de apenas 0.7 por ciento. Calculado en otro periodo, de octubre de 2003 al mismo mes de este año, el incremento promedio nominal fue de 4.2 por ciento y, tras el acumulado de inflación, el saldo es de -0.3 por ciento (La Jornada, Fabiola Martínez).

ƑQUÉ DICE LA SECRETARIA del Trabajo? Exactamente lo contrario de lo recurrentemente afirmado por el inquilino de Los Pinos, su fiel escudero y las ediciones anuales de "cómo vamos en el camino", difundidas por la Oficina de la Presidencia para las Políticas Públicas en días previos a cada Informe de gobierno.

ES EL CLASICO ENCUENTRO ENTRE la calculadora del "cambio" -la que siempre suma, nunca resta- y las cifras reales, una batalla que de tiempo atrás se desarrolla y que tradicionalmente tiene como perdedor al inquilino de Los Pinos. Cifras, pues, que nadie ha tenido la cortesía de notificar al Altísimo que con su aval y bendición tanta estabilidad ha procurado para el país.

LA ESTADISTICA DE "información básica laboral" de la Secretaría del Trabajo revela que una situación similar ocurre con la estadística del presente año: los trabajadores obtuvieron un incremento salarial de 4.1 por ciento nominal, que se ha traducido en una pérdida de 0.5 por ciento en términos reales. Lo anterior porque las revisiones salariales registradas en febrero tuvieron un detrimento real de -0.04 por ciento y de 0.3 por ciento en julio, agosto y septiembre, mientras en octubre la caída real fue de 2.4 por ciento.

COMO BIEN LO SEÑALA la nota de La Jornada, "las anteriores son algunas de las cifras que no suelen aparecer en los boletines de prensa ni en los discursos oficiales. En días pasados el presidente Vicente Fox aseveró que los salarios registrados ante el Instituto Mexicano del Seguro Social se han elevado 8.5 por ciento en términos reales. Sin embargo, no menciona el nivel de precariedad que prevalece en la mayoría de los nuevos empleos".

Las rebanadas del pastel:

FELIZMENTE, POCO, MUY poco le queda a Bush en la Casa Blanca... Bye, bye, George.

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