Analiza grupo financiero modificaciones a la propuesta foxista de ley de ingresos 2005

Mayor presión a la disciplina fiscal por el rechazo a cambios estructurales

Preocupantes, las dificultades entre las principales fuerzas políticas para llegar a acuerdos, dice

ISRAEL RODRIGUEZ

Las recientes modificaciones en la Cámara de Diputados a la propuesta de ley de ingresos presentada por el gobierno federal, que aún deberá pasar por el Senado, no son recaudatorias ni simplificadoras, pero representarán recursos adicionales por casi 80 mil millones de pesos, consideró el Grupo financiero Banamex-Citigroup.

El intermediario financiero, en su evaluación preliminar sobre los cambios efectuados a la propuesta gubernamental del paquete económico para 2005 señaló que el rechazo a las principales reformas fiscales planteadas por el gobierno foxista y la dificultad de llegar a acuerdos entre las fuerzas políticas, confirma el pesimismo prevaleciente sobre la posibilidad de emprender cambios de fondo que hagan crecer el potencial de la economía mexicana.

Sin embargo, en su análisis sobre estas modificaciones, resalta que en el corto plazo los cambios introducidos por la Cámara de Diputados al paquete económico de 2005 no resultan significativas en términos absolutos y el aumento del precio del petróleo esperado en 27 dólares fue, inclusive, por debajo del pronóstico de Banamex-Citigroup, que lo ubica en 31.5 dólares por barril.

Además, la baja en el impuesto sobre la renta de las empresas, puede incentivar la actividad económica de México. Los cambios realizados implican una disponibilidad de recursos adicionales por 79 mil 900 millones de pesos. Estas modificaciones llevarán a que los ingresos disminuyan ligeramente frente a 2004, cuando la propuesta de la Secretaría de Hacienda consideraba una reducción más importante.

Con la ampliación del déficit original planteado por la secretaría de Hacienda, de .14 a .3 por ciento, como proporción del producto interno bruto (PIB), implican recursos adicionales por 12 mil 700 millones de pesos, que en sí es un número pequeño, pero el problema es que delinea el riesgo de un cambio de dirección, advirtieron los expertos.

Por otro lado, el alza en el precio del petróleo de 23 a 27 dólares por barril, aprobado por los Diputados, no aclara formalmente el destino de los ingresos adicionales, ni tampoco los excedentes eventuales por encima de este precio, pero es probable que se sacrifiquen, al igual que en los últimos tres años de elevados precios del crudo.

"Por lo menos debería evitarse que fueran al gasto corriente y debería privilegiarse el presupuesto en infraestructura en general y de Petróleos Mexicanos en particular".

El grupo financiero alertó que las condiciones han cambiado con respecto a cuando la Secretaría de Hacienda presentó el presupuesto. "Se ha consolidado la idea de que la economía de Estados Unidos se desacelerará en 2005 y de que el riesgo inflacionario en México llevará a mayores tasas de interés que las supuestas, así como también a una baja moderada del crecimiento. Entonces el contexto macroeconómico inicial de Hacienda ya no es tan prudente como aparecía hace un mes y medio", refirió.

Finalmente, en el terreno de la política económica, los problemas de coordinación entre el gobierno y el Partido Acción Nacional, la relaciones Congreso-gobierno y la contaminación de los procesos electorales, es una mala señal, porque se confirma la inviabilidad de las reformas estructurales, a la vez que hay mayores indicios de que la disciplina fiscal está siendo sometida a mayor presión.