México D.F. Sábado 23 de octubre de 2004
El proceso se ha convertido en una disputa entre
los partidos, señala David Velasco
Nueva andanada de críticas a la posible ratificación
de Soberanes en la CNDH
Jaime Cárdenas: el ombudsman, "dócil
al gobierno"; pide a partidos no pactar en lo oscurito
ANGELES CRUZ, LAURA POY Y MARIANA CHAVEZ REPORTERAS
Y CORRESPONSAL
Los pronunciamientos contra la ratificación de
José Luis Soberanes, al frente de la Comisión Nacional de
Derechos Humanos (CNDH) continuaron ayer en las voces de investigadores
universitarios, integrantes de agrupaciones civiles, y uno de los aspirantes
a ocupar la presidencia del organismo. En diversos tonos acusaron al ombudsman
de mantener una actitud dócil y condescendiente hacia las autoridades.
David Velasco, presidente del Centro de Derechos Humanos
Miguel Agustín Pro, resaltó que el proceso para renovar o
ratificar al titular de la CNDH está "claramente vinculado" con
la sucesión presidencial adelantada, pues se ha convertido en una
disputa entre los partidos políticos.
Lo anterior se expresó durante el foro Continuidad
o cambio en la presidencia de la CNDH, donde Isidro Cisneros, investigador
de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), señaló
que Soberanes ha sido un impedimento para democratizar las políticas
públicas de derechos humanos en el país.
Santiago Corcuera, director del Programa de Derechos Humanos
de la Universidad Iberoamericana, confió en que igual que hace cinco
años, los senadores no escuchen las voces de los organismos civiles
que apoyan la relección de Soberanes y en cambio, se decida por
un nuevo titular de la CNDH. En ese entonces los legisladores desoyeron
a las agrupaciones que apoyaban la candidatura del académico Miguel
Sarre.
Expresó que los senadores tendrían que observar
qué clase de grupos son los que solicitan la continuidad de Soberanes
y no dejarse llevar por la cantidad, porque los aproximadamente 700 organismos
que se han manifestado en este sentido reconocen en el actual ombudsman
un liderazgo que ha sido construido sobre actitudes clientelares.
Resaltó, por otra parte, que durante la gestión
de Soberanes Fernández ha habido un rompimiento con las organizaciones
no gubernamentales (ONG) verdaderas defensoras y promotoras de los derechos
humanos, de tal suerte que el supuesto liderazgo político construido
por Soberanes se ha caracterizado por ser poco democrático. Por
su parte, Emilio Alvarez Icaza, titular de la Comisión de Derechos
Humanos del Distrito Federal y aspirante a presidir la CNDH, opinó
que la confrontación entre organizaciones civiles y Soberanes "no
es la mejor alternativa para la construcción del diálogo"
ni para consolidar la legitimidad del organismo.
Aunque dijo que cuenta con la trayectoria y el proyecto
que se requiere para asumir la presidencia de la CNDH, Alvarez Icaza afirmó
que aceptará la decisión de la Comisión de Derechos
Humanos del Senado.
En Querétaro, Jaime Cárdenas, también
aspirante a la titularidad de la CNDH, se pronunció por que en el
proceso de elección del ombudsman, los partidos políticos
no pacten "acuerdos en lo oscurito".
Luego de admitir que tiene interés en participar
en el proceso de elección, consideró que Soberanes no debe
continuar en el cargo, porque ha sido "dócil al gobierno" federal,
le ha faltado "independencia y más contundencia".
Durante el foro organizado por la Universidad Iberoamericana,
los investigadores y representantes de organismos civiles resaltaron la
reducción en el número de recomendaciones por violaciones
de los derechos humanos, en particular las que deberían haberse
dirigido a los órganos de procuración de justicia del país.
En el mismo sentido, Jaime Cárdenas mencionó que la CNDH
puede desempeñar un papel preventivo y de educación, pero
"también se requiere más firmeza".
|