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México D.F. Martes 19 de octubre de 2004
Escepticismo de acreedores argentinos
Tenedores de bonos vencidos argentinos siguen escépticos
ante la propuesta gubernamental de restructurar la deuda de casi 100 mil
millones de dólares, cuyo servicio se dejó de pagar hace
tres años, indica una nueva encuesta. Más de 95 por ciento
de quienes respondieron a un sondeo de tenedores de bonos, realizado por
la Asociación de Acreedores de Mercados Emergentes, consideraron
''muy improbable'' aceptar la actual propuesta argentina, la cual significaría
a los acreedores perder 75 por ciento del dinero que invirtieron, así
como todo el interés generado. Entre tanto, menos de 15 por ciento
de los encuestados consideraron "muy probable" aceptar un intercambio de
deuda que reduciría sus pérdidas a 68-70 por ciento.El gobierno
ha rehusado decir qué nivel de participación de acreedores
representaría un intercambio exitoso de deuda, pero analistas calculan
que espera lograr un 70 por ciento.
La prioridad de Lula
El presidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva
utilizará su autoridad personal para asegurar que se mantenga la
estrecha disciplina fiscal y monetaria, mientras se hacen esfuerzos por
llevar adelante programas sociales. Su gobierno se ha ganado la confianza
de los mercados financieros, pero ha desilusionado a muchos de sus simpatizantes
tradicionales entre los movimientos de trabajadores organizados, los pobres
y la izquierda radical. Después de las elecciones municipales de
octubre de 2004, habrá un esfuerzo renovado por impulsar iniciativas
de reformas, antes de que comiencen las campañas para los comicios
de 2006. La confianza mejorada de consumidores e inversionistas mantendrá
el crecimiento de la demanda doméstica y propiciará un crecimiento
de base amplia. Sin embargo, la política monetaria seguirá
siendo cautelosa y, si bien se aligerará la carga de la deuda pública,
será aún lo bastante grande para pesar sobre la economía.
Continuará existiendo un sustancial superávit comercial,
pese al mayor crecimiento de las importaciones. A la luz de los principales
indicadores que muestran que el repunte de la demanda doméstica
ha sido sostenido, The Economist Intelligence Unit ha revisado al alza
su predicción de crecimiento del PIB para 2004, a 4.5 por ciento.
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