El país asiático dominará la industria del software

China amenaza exportaciones textiles mexicanas en EU: Cepal

MIRIAM POSADA GARCIA

Las exportaciones mexicanas a Estados Unidos del sector textil-confección podrían caer de 15 a 3 por ciento en los próximos años, mientras que las de China se verían incrementadas de 15 a 50 por ciento, advirtió la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) al destacar que el gobierno y los empresarios de México deben reconocer a China como su segundo socio comercial en importancia.

El organismo de Naciones Unidas advirtió que los mexicanos no deben dejar pasar más tiempo y ponerse a trabajar en intensificar su incursión en China con estudios de mercado reales "bien hechos", así como en la búsqueda de nichos alternos a desarrollar, debido a que está previsto que si el país asiático es hoy una potencia en la cadena textil, en tres o cinco años más dominarán también la industria del software y la eléctrico-electrónica, entre otras.

Durante la presentación del documento Oportunidades y retos económicos de China para México y Centroamérica, elaborado por los investigadores de la Cepal Enrique Dussel Peters y Liu Xue Don, coincidieron en que el éxito económico de China es producto del proceso de integración asiática, las condiciones de inversión favorables y de sus ventajas competitivas, pero, advirtieron, que de ninguna manera se le debe ver sólo como una fuente de mano de obra barata.

Dussel Peters hizo un llamado a las autoridades federales y legisladores involucrados en procurar el crecimiento económico del país para avanzar no sólo en las reformas estructurales que siguen en discusión, sino en el desarrollo científico y tecnológico así como en educación y preparación de mano de obra altamente capacitada.

Consideró que los esfuerzos realizados hasta el momento son insuficientes porque no es de gran utilidad organizar misiones comerciales, ir a conocer el país y las empresas que se encuentran ahí, sino que organismos como el Banco Nacional de Comercio Exterior deben hacer estudios de mercado perfectamente detallados, buscar nichos de mercado y en conjunto buscar alianzas con empresas chinas.

Destacó que el proceso de integración de China a la Organización Mundial de Comercio (OMC) ha sido más duro para ese país que para el resto de sus integrantes, debido a su intensa capacidad de producción, bajos costos, mano de obra barata y facilidades fiscales, ventajas que en el mercado global le han representado la imposición de altos aranceles.

El investigador precisó que uno de los efectos más conocidos en el caso de China es el de la cadena hilo-textil-confección al que se le aplican los aranceles y cuotas compensatorias más altas posibles por su bajo costo de producción, fenómeno que, previó, se podría repetir en el corto plazo en sectores como el agrícola y de servicios.

Lo cierto, dijo, es que en poco tiempo China ha logrado desplazar de Estados Unidos a países como México, pero además se ha convertido en el segundo socio comercial de este país.

Dussel detalló que las ventajas competitivas de China podrían provocar en el corto plazo una caída de las exportaciones mexicanas a Estados Unidos en el sector textil-confección en el que hoy participa con 15 por ciento del total, para quedar en tan sólo 3 por ciento, mientras que China aumentaría su participación actual de 15 por ciento del mercado hasta 50 por ciento.

La situación en este rubro se complicará conforme se cumplan los plazos establecidos en la OMC para la liberación de cuotas de exportación, y advirtió que México podría convertirse en un país deficitario.

Este fenómeno, advirtió Dussel, se podría reproducir en otros segmentos como el eléctrico-electrónico, del software, y de las PC, debido a que ese país asiático ha dedicado importantes inversiones al desarrollo de infraestructura, pero también en la preparación de estudiantes universitarios que se dedicarían de lleno a esos campos.

En ese sentido, Enrique Dussel advirtió que México debe reconocer a China como su segundo socio comercial en importancia, avanzar en las reformas estructurales, incrementar la inversión de los sectores público y privado para encarar la problemática que le representa la nación asiática.