Destaca el incremento del gasto social que impulsó durante su administración

Sin acciones concretas, desencanto de la gente por la democracia: Patricio Martínez

En vísperas de su retiro de la política, el gobernador de Chihuahua habla de su legado

MIROSLAVA BREACH VELDUCEA CORRESPONSAL

Chihuahua, Chih., 28 de septiembre. En vísperas de su anunciado retiro de la vida política, tras la entrega del poder a su sucesor el próximo domingo 3 de octubre, el gobernador de Chihuahua, Patricio Martínez García, echa un vistazo a la situación del país y afirma que "el desarrollo democrático de México no se ha traducido en beneficios concretos para el ciudadano. Hoy los mexicanos no tienen un mejor nivel de vida que hace 10 años ni han logrado soluciones concretas a sus problemas cotidianos".

Esa situación conlleva el riesgo de que la ciudadanía se desencante, ante la evidencia palpable de que la democracia es sólo un medio y no el fin que garantice mejores oportunidades de desarrollo social, económico y político, opinó.

Por eso, advierte que el cambio democrático debe concretarse, ante todo, en acciones eficaces de gobierno, que lleguen, impacten y transformen las condiciones de vida de la población, "es lo que cuenta, no sólo es cuestión de percepción", indicó.

El mandatario estatal asegura que la primera gran transformación que requiere el país, más allá de las llamadas reformas estructurales en boga, es el redimensionamiento del aparato gubernamental, cuya obesidad en los tres niveles de gobierno representa un gran lastre y hace inoperable la administración pública.

"Las estructuras anacrónicas, escleróticas, de todos los gobiernos, estatales, municipales y federal y de los organismos descentralizados no nos van a llevar a buen puerto; se necesita entender el signo de los tiempos, hacer cambios responsables que hagan operable a la administración en la acción de gobernar y en atender las necesidades de los ciudadanos. Este país necesita una organización del siglo XXI, acorde con la sociedad y su problemática en los tiempos actuales. Vivimos con una organización de hace 40 años, que no ha sido revolucionada, y la evolución hasta ahora registrada es insuficiente", sostuvo.

Criticó que el "gobierno del cambio" no haya afrontado desde el principio el reto de adelgazar el aparato gubernamental y modernizar su estructura, disminuyendo costos, para con base en ello aumentar su margen de maniobra, sino por el contrario, la tendencia ha sido aumentar el gasto corriente y castigar la inversión pública.

Aseguró que en Chihuahua, durante el actual gobierno, se logró invertir esa situación y relanzar el saneamiento de las finanzas públicas para canalizar recursos al gasto social y paralelamente pagar la mayor parte de los pasivos que dejó la administración del ex gobernador Francisco Barrio Terrazas, por más de 4 mil 938 millones de pesos, de los cuales se logró disminuir el saldo a mil 374 millones, "de esa deuda que queda yo no pedí un solo peso, es lo que ha quedado después de pagar 3 mil 574 millones de los pasivos.

"El movimiento se demuestra al andar", dice, y elude profundizar la crítica a la administración central del país por la falta de resultados que satisfagan la expectativa del cambio creada entre la población.

El retiro de la política

Conocido en la política de Chihuahua como El Huracán Martínez -por su meteórico ascenso que lo llevó a ocupar la alcaldía capitalina en 1992, en 1997 una diputación federal y en 1988 la gubernatura, que arrebató al PAN-, Patricio Martínez sorprendió a propios y extraños cuando a finales del año pasado anunció su retiro de la vida pública y delineó su futuro como ex gobernador "sentado en una mecedora rezando el rosario".

En el despacho que ocupó por seis años y que ahora luce semivacío de objetos personales, Martínez reitera su decisión -al menos temporal- de retirarse de la vida política; "tengo gran nostalgia por la vida privada, sin la alta velocidad que le imprimí a la agenda, y empezar a atender asuntos que dejé pendientes por estar dedicado de tiempo completo a los quehaceres del gobierno".

Desde su punto de vista, en el ambiente político nacional se presentan grandes dificultades que lo hacen poco atractivo para él después de la experiencia "de vivir intensamente la política" en el ámbito del gobierno local.

"Siempre aspiré a ser un buen gobernado. Esa calificación la dará el pueblo; ahora aspiro a ser un buen ex gobernador", insistió.

Mientras llega el retiro, a 72 horas de entregar el poder que ejerció durante seis años "a mi manera", como él define su estilo de gobernar, criticado duramente por la oposición política del estado, Patricio Martínez asegura que su principal compromiso y promesa de campaña a los chihuahuenses lo cumplió con creces, porque logró "transformar el estado".

Y en apoyo a esa afirmación dispara datos y cifras sobre lo que considera los principales logros de su gobierno en obra pública, desarrollo social, educación, administración y finanzas.

Más delgado que de costumbre, visiblemente cansado por la apretada agenda de giras con la que decidió despedirse del ejercicio del poder público, Martínez García sale al frente de lo que llama las críticas sistemáticas de la oposición y defiende la obra pública de su administración, en la que, dijo, se invirtieron 32 mil millones de pesos de recursos propios, "la mayor cantidad registrada hasta ahora en seis años por un gobierno estatal.

"Los cuestionamientos a este logro vienen de voces interesadas en desvanecer el efecto positivo de las realizaciones tangibles de un gobierno. Ninguna administración de Chihuahua en seis años había invertido de recursos propios estatales, 32 mil millones de pesos. Es obra pública que está allí y que trasciende a este gobierno con obras que seguirán sirviendo el resto del siglo, en educación prescolar, elemental, básica y superior."

A quienes lo critican por lo que aquí se ha llamado "la obra de relumbrón" cuando se refieren a la construcción de plazas, colocación de estatuas y la remodelación del centro histórico de la capital del estado, el gobernador antepone que la principal herencia de su gobierno "está en hechos concretos de desarrollo social" y enumera como tales la remodelación total de los hospitales generales de Ciudad Juárez y Chihuahua, además de la construcción de otros cuatro nosocomios en regiones importantes como Ojinaga, Casas Grandes y Gómez Farías, además de la apertura del Hospital de la Mujer en la frontera juarense.

Destacó también la ampliación de la infraestructura educativa en la región fronteriza con la existencia de aulas escolares improvisadas en viejos camiones urbanos de desecho y la ampliación de la infraestructura urbana en Juárez y Chihuahua, así como en las ciudades medias del estado.

Obra educativa

Pondera especialmente la creación de 52 Centros de Educación Integral en las comunidades rurales de la entidad, lo que permitió cerrar 400 escuelas unitarias, en las que un maestro impartía clases a niños de primero a sexto año de primaria, y ahora, en cambio, los alumnos son transportados a complejos educativos donde tienen un maestro para cada grado, reciben clases de inglés, computación y educación física, además de que en el mismo plantel se les proporciona alimentación durante las horas que reciben instrucción académica.

Defiende también su proyecto de infraestructura deportiva, por el cual durante el sexenio se construyeron seis estadios de beisbol y, en torno a ellos, complejos deportivos en las principales cabeceras municipales.

Donde más se ha centrado la crítica de la oposición, acepta, es en la obra estatuaria del gobierno, "pero con un pobre manejo de los números de quienes objetan la inversión en embellecer la ciudad, respecto de la obra general", se defiende.

"Que la obra estatuaria sea cuestionada, sí entiendo que sea así, porque hay quienes consideran que esos recursos debieran invertirse en prioridades; nada más que también la cultura es prioridad, tiene que hacerse la obra pública con un equilibrio, atendiendo todos los frentes. ¿Qué pero le ponen a los museos que construimos, a las estatuas que rescatan los valores históricos y el orgullo de nacer y vivir en Chihuahua?, ¿por qué, con la riqueza de historia que tenemos, no la presumimos?"

Refuta de nuevo los señalamientos con cifras y datos: "hicimos una mejor administración pública, responsable y eficiente", sostiene.

A consecuencia de ello, sostuvo, Chihuahua es el estado número uno en captación de ingresos propios y eso a su vez le ha dado más libertad económica y mayor soberanía porque no depende tanto de la Federación, además de representar una menor carga para el erario nacional; "ésa es una importante contribución al país", recalcó el gobernador Patricio Martínez García.