Continúan plantón para exigir a Conagua indemnizaciones por afectar sus tierras

Labriegos mexiquenses liberan 12 mil litros de cloro para no perjudicar al Distrito Federal

ISRAEL DAVILA CORRESPONSAL

Villa de Allende, Méx., 19 de septiembre. Cerca de cien campesinos de cinco ejidos de este municipio mexiquense mantienen un plantón permanente frente a las instalaciones de la Planta Potabilizadora de Berros, del Sistema Cutzamala, en demanda del pago de 2 millones de pesos que les adeuda la Comisión Nacional del Agua (Conagua) por los daños provocados a sus tierras en septiembre pasado, cuando por un mal manejo de la presa de Villa Victoria inundaron más de 300 hectáreas de sus cultivos.

Tras la reunión que sostuvieron la noche del sábado con el gerente regional de la Conagua, Jorge Mondragón, los labriegos accedieron a liberar 12 mil litros de cloro que retenían desde el viernes pasado, como medida para presionar a las autoridades para que cumplieran con pagarles la indemnización.

Los campesinos decidieron entregar el camión que contenía ese producto a la Conagua, "para no perjudicar a millones de habitantes del Distrito Federal" por la falta de este desinfectante, aseguró el vocero del movimiento, Santiago Pérez Alvarado. Sin embargo, hoy al mediodía, tres campesinos se lanzaron amarrados de pies y manos a uno de los canales del Sistema Cutzamala en protesta por las declaraciones que hiciera el secretario general de Gobierno del Distrito Federal, Alejandro Encinas, quien presuntamente minimizó este conflicto en una entrevista que concedió por la mañana, donde aseguró que había "otros mecanismos para clorar el agua que llegaba al Distrito Federal".

Los inconformes fueron rescatados por sus compañeros, pero advirtieron que si el funcionario capitalino "no retira sus palabras", podrían lanzarse a los canales unos 100 labriegos desangrándose, para que el agua que se manda al Distrito Federal llegue con la sangre de quienes "damos la vida por lo que es nuestro: las tierras y el agua de esta región".

Por la madrugada, los campesinos se levantaron de la mesa de diálogo que sostenían con autoridades de la Conagua, por "no tener una respuesta clara" a sus demandas, que van desde la indemnización por el daño provocado a sus tierras hasta de infraestructura por compromisos que había asumido la instancia federal.

Las acciones que emprendieron hoy ya no pusieron en riesgo el caudal que diariamente se destina al Distrito Federal y municipios del Valle de México, estimado en unos 16 mil litros por segundo.

Luego de ser liberado el camión que contenía 12 mil litros de cloro éste fue conducido hasta otra planta de la Conagua, ubicada a unos 10 kilómetros de Berros, en el municipio de Almoloya de Juárez, desde donde se inicia el proceso de cloración.

Las autoridades de la Conagua, por medio de Abdías Montoya, responsable de la planta de Berros, habían asegurado que si en un plazo de 12 horas los campesinos no entregaban el cloro que tenían retenido desde el viernes, se iba a afectar el suministro de agua a la capital mexiquense y hasta al Distrito Federal, pues las reservas del desinfectante estaban por agotarse.

Por la tarde, los labriegos aún discutían si emprendían una marcha hacia la ciudad de México, donde pretenden entrevistarse con el secretario del Medio Ambiente y Recursos Naturales, Alberto Cárdenas, para exigir una respuesta a sus demandas.