El mecanismo duplicará su carga en 4 años: Hacienda

Pago de Pidiregas, una de las mayores presiones fiscales

VICTOR CARDOSO

Planteados como una solución para resolver la escasez de recursos económicos destinados a inversión pública, los Proyectos de infraestructura productiva de largo plazo (Pidiregas) ya se convirtieron en una de las mayores presiones fiscales para el gobierno federal, pues los requerimientos financieros para atender su costo se duplicarán en los próximos cuatro años y de 1.1 por ciento del producto interno bruto (PIB) en 2004 para llegar a 2.4 en 2008.

Al cierre del primer semestre de este año el saldo de los Pidiregas -impulsados por Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE)- reportado por la Secretaría de Hacienda, se elevó a más de 203 mil 240 millones de pesos.

Parece que los Pidiregas se han salido de control, tanto que Hacienda hasta determinó cambiarles de nombre. En la propuesta presupuestal para 2005 se advierte que ''las presiones fiscales originadas por el pago de inversión financiada (antes Pidiregas) han venido creciendo en los últimos años. Dada la antigüedad del programa y el tiempo de realización promedio de los proyectos realizados bajo esta figura, en los próximos años se concentrará un número importante de entregas de proyectos terminados''.

Las ''presiones considerables'' generadas por las obligaciones derivadas de los Pidiregas ''se explican principalmente por los mayores recursos que deberán ser canalizados como inversión presupuestaria para cubrir la amortización de los proyectos entregados'', precisa Hacienda.

No obstante, se pretende continuar con esa modalidad de inversión, que al final termina convirtiéndose en deuda, y el año entrante se pretende impulsar nuevos proyectos por 60 mil 558 millones de pesos, tanto para Pemex como para la CFE.

De aprobarse la propuesta presupuestal para 2005, los proyectos de infraestructura productiva a lago plazo de Pemex absorberán 17 mil 916.4 millones de pesos de ese total, mientras a los de la CFE se destinarán 42 mil 642.4 millones.

Las presiones financieras para ambas paraestatales se tornan más fuertes si se considera que para el año entrante se deberán liquidar 65 mil 589.9 millones de pesos por concepto de amortizaciones y costo financiero sólo de los proyectos de inversión directa (aquellos que se realizan con recursos presupuestales). La mayor parte de este concepto corresponde a Pemex por un monto de 55 mil 653.8 millones de pesos (39 mil 580 millones por amortizaciones y 16 mil 73.6 millones por intereses), mientras la CFE deberá liquidar un total de 9 mil 936.1 millones de pesos, 5 mil 386.9 millones por amortizaciones y 4 mil 549.1 de intereses.

A eso se suman también las previsiones de la Secretaría de Hacienda respecto a que los ingresos petroleros tenderán a la baja, lo que incrementará las presiones sobre las finanzas públicas. ''Además, la inercia que presentan algunos rubros importantes del gasto como los de las pensiones y los derivados de la inversión financiada contribuirá también a presionar los balances fiscales'', señala la dependencia.