El tabasqueño nombra delegados del PRI en Edomex

Isidro Pastor deja atrás problemas con su dirigente Roberto Madrazo

RENATO DAVALOS

Hace no mucho tiempo era enemigo político declarado del líder nacional priísta, Roberto Madrazo Pintado, pero ahora el dirigente tricolor mexiquense, Isidro Pastor Medrano, afirma que el asunto "quedó en la imaginación. Asumí una postura en una época determinada y tuve una respuesta. Doblamos la hoja".

Ayer Pastor retornó a la sede nacional priísta, no para impugnar el liderazgo de Madrazo, sino para convalidar la designación que éste hizo -en claro avance sobre el mandatario local Arturo Montiel- del nuevo delegado especial del Comité Ejecutivo Nacional, Rafael Rodríguez Barrera, quien conducirá en el PRI el proceso que culminará en las elecciones de marzo venidero.

Roberto Madrazo nombró además al ex gobernador michoacano Luis Martínez Villicaña delegado adjunto, y a Asunción Orihuela y Daniel Quintero representantes regionales.

En una ceremonia protocolaria, el secretario de Organización, José Ramón Martell, tomó las protestas respectivas.

Rodríguez Barrera anticipó que al término del evento informarían del asunto a "mi amigo", el gobernador Montiel.

En entrevista previa, Pastor aclaró que los candados impuestos por el Consejo Político mexiquense -que dejarían fuera de la contienda sucesoria al procurador estatal Alfonso Navarrete y a Carlos Hank Rhon- "no tienen dedicatoria".

Añadió: "muchos nos hemos abierto de cara a esa contienda", entre otros Enrique Jacob, Guillermo González, Cuauhtémoc García y, "desde luego, yo, que lo dije desde hace dos años".

No hay "bronca mía" con Navarrete, sostuvo Pastor. "No he atacado a nadie ni lo voy a hacer. Si hay personas interesadas, que se preocupen ellas. No tengo cola que me pisen, nada de corrupción, y sí un comportamiento con una ética transparente".

Insistió sobre Navarrete: "Ya quiero doblar la hoja. Si tiene una preocupación, que él la resuelva".

Cuando le insistieron en sus diferencias no muy remotas con Madrazo Pintado, adujo que las discrepancias "son naturales" en cualquier partido.

Hubo un acuerdo de los "jefes políticos" para concluir la designación de la nueva estructura partidista que conducirá el proceso interno y luego la elección, refirió Rafael Rodríguez Barrera antes de anunciar el "saludo" que darían a Montiel.