Está en construcción un Wal Mart, según habitantes

Investigará la UNESCO daño en zona arqueológica de Teotihuacán

JAVIER SALINAS CORRESPONSAL

Teotihuacan, Mex., 20 de agosto. La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) analizará y, de considerarlo necesario, intervendrá en la denuncia que presentaron habitantes del barrio La Purificación, así como organizaciones protectoras del patrimonio histórico, sobre la presunta destrucción de vestigios arqueológicos en un terreno donde se construye una tienda de autoservicio de la cadena Wal Mart, en un área considerada de restricción aledaña a la zona arqueológica de Teotihuacán.

Los inconformes, encabezados por Emmanuel Herrera Arizcorreta, informaron que hicieron llegar una carta dirigida a Francesco Bandarin, director de Patrimonio Mundial de la UNESCO, para informarle lo acontecido en Teotihuacán.

Herrera Arizcorreta indicó que este jueves se comunicó vía telefónica con personal de la Oficina para América Latina del Area de Conservación de Patrimonio Mundial de la UNESCO, en Francia, el cual ofreció dar seguimiento al asunto y verificar la situación, mediante organizaciones internacionales.

Desde hace más de un mes, la cadena Cifra Wal Mart comenzó a construir un supermercado en un área de tres hectáreas, en el barrio La Purificación. El predio se ubica en el perímetro C, restringido para la construcción, aledaño a la zona arqueológica de Teotihuacán, y colinda con el Puente del Emperador, que Maximiliano de Habsburgo ordenó construir en la segunda mitad del siglo XIX.

El gobierno del estado de México y el ayuntamiento otorgaron los permisos y la autorización correspondiente. De su lado, el Departamento Jurídico del Instituto Nacional de Antropología e Historia dio el permiso sanitario de construcción 15-13-04PSC-0085.

El pasado 6 de agosto, habitantes del barrio La Purificación, quienes fueron apoyados por campesinos del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT) de San Salvador Atenco, detuvieron las obras por más de 24 horas en protesta por la destrucción arqueológica en el lugar. "Hay versiones de que fueron destruidas dos tumbas prehispánicas durante los trabajos de cimentación del predio, debido a la introducción de maquinaria pesada", dijeron los inconformes.

Un día después de que clausuraron las obras e impidieron el acceso de los trabajadores a la obra, los apoderados de la cadena comercial denunciaron penalmente a los vecinos y a los atenquenses.

En la averiguación previa TEO/II/971/04, imputaron el presunto delito de daño en propiedad ajena a seis representantes de los descontentos, Emmanuel Herrera, David García, Emma Ortega, Lorenzo Trujillo, Román García e Iván "N", y a Ignacio del Valle, dirigente del FPDT de Atenco.