No se negociará con tradicionalistas; el templo de San Pablo Atlazalpan es de modernistas, dice

Dejar rencores y violencia, pide el obispo de Valle de Chalco a católicos en pugna

Policías mexiquenses resguardan la parroquia con el propósito de evitar más zafarranchos

RENE RAMON CORRESPONSAL

Chalco, Mex., 20 de agosto. No habrá negociación, advirtió el obispo de la diócesis de Valle de Chalco, Luis Artemio Flores Calzada, luego de visitar la comunidad de San Pablo Atlazalpan -cuya parroquia está en disputa-, donde pidió a las corrientes tradicionalista y modernista dejar a un lado rencores y no incurrir en más actos de violencia, luego de los tres enfrentamientos ocurridos el jueves.

El pueblo localizado a un costado de la carretera Chalco-Mixquic, a tres kilómetros de la cabecera municipal, amaneció este viernes en relativa calma luego de que policías del estado de México regresaron a la parroquia de San Pedro y San Pablo para resguardar el templo y evitar más zafarranchos.

Al menos 500 policías mexiquenses y municipales resguardan el poblado y efectúan recorridos por diferentes partes.

Policías mexiquenses se enfrentaron con católicos de la corriente tradicionalista el jueves pasado, riña que dejó al menos 30 lesionados y cinco detenidos, luego de que varios fieles intentaron impedir la ejecución de una orden judicial federal que ordenó la entrega del templo a la diócesis. Por la noche ocurrieron dos zafarranchos más, uno de ellos entre los feligreses.

Durante todo el día, los grupos rivales se mantuvieron a una distancia de 300 metros uno del otro. Los modernistas, que son partidarios de la fe católica apostólica y romana -en contraposición a sus adversarios que aseguran no reconocer al Papa- colocaron un campamento entre las calles Hidalgo e Independencia, mientras que los tradicionalistas tridentinos permanecieron en el kiosco de la plaza.

El obispo de Valle de Chalco acudió al campamento de los modernistas, a quienes hizo un llamado a la cordura y a "no caer en más provocaciones"; exhortó a ambos grupos a dejar la violencia a un lado y "tratarse como hermanos de una la sola religión: la católica".

Sin embargo, advirtió que no habrá negociaciones con el grupo tradicional, pues existe un fallo del juzgado quinto de distrito, mandato judicial que este jueves se cumplió cuando la Policía Federal Preventiva (PFP) entregó el inmueble a las diócesis de Nezahualcóyotl y Valle de Chalco.

Flores Calzada se congratuló por el fallo del juzgado federal que determinó que la corriente tradicionalista no tiene registro oficial ante la Secretaría de Gobernación, por lo que el templo, propiedad de la nación, fue adjudicado al grupo modernista, que sí está constituido legalmente.

En tanto, Noé Aguilar, encargado de la diócesis de Valle de Chalco, denunció que antes de la intervención de la PFP personas desconocidas sacaron imágenes religiosas del templo, por lo que solicitará la intervención del Instituto Nacional de Antropología e Historia para que efectúe un inventario.

El apoderado legal de la diócesis de Nezahualcóyotl, Javier Zavala, comentó que el único trámite adicional que se efectuará después del proceso jurídico del jueves, será dar posición formal a la diócesis de Valle de Chalco.

Por la tarde, habitantes del poblado aledaño de Santa Catalina Ayotzingo, entregaron víveres a los modernistas que permanecen desde hace 24 horas dentro del templo de San Pedro y San Pablo.

Mientras, mujeres católicas tradicionalistas rezaban en el jardín del pueblo de San Pablo Atlazalpan para, de acuerdo con ellas recuperar el templo en disputa. Colocaron imágenes del Niño Dios y la Virgen de Guadalupe en una mesa, donde improvisaron una ceremonia religiosa.

Piden convertir el recinto en museo

Por su parte, Antonia Tejeida, simpatizante del grupo tradicionalista, consideró que la única forma de evitar un nuevo enfrentamiento entre la población dividida, es que el gobierno federal actúe de forma imparcial ante las diferencias religiosas.

Exigió que a ninguna de las partes se beneficie, es decir, que la iglesia de San Pedro y San Pablo sea desalojada y se convierta en museo, y a cada una de las corrientes se le asigne un templo.

La policía estatal presentó la denuncia penal CHA/III/2493/04 contra los seguidores de la fe tradicionalista, Noé Martínez Méndez, Miguel Santana y Heladio García García, que fueron detenidos por presuntas agresiones, motín y lesiones.