México D.F. Sábado 21 de agosto de 2004
Policías municipales les arrebatan toldos
con que pretendían instalar un campamento
Nuevo desalojo de altermundistas en la plaza de armas
de Guadalajara
JOSE DIAZ BETANCOURT CORRESPONSAL
Guadalajara, Jal., 20 de agosto. Nuevamente un
grupo de manifestantes que apoya a los 18 altermundistas detenidos se enfrentó
con elementos de seguridad municipales, que les arrebataron toldos con
los que pretendían instalarse en forma permanente a un costado de
la plaza de armas.
Al
comenzar su plantón ayer, los quejosos trataron de colocar dos toldos,
pero personal del ayuntamiento de Guadalajara se los quitó con el
argumento de que no tenían permiso para instalarlos en la vía
pública.
Por órdenes de la Dirección de Inspección
del ayuntamiento, los policías arrebataron los toldos a los inconformes,
porque ''el reglamento municipal prohíbe este tipo de instalación
en el primer cuadro''. Ante el operativo, los manifestantes respondieron
con el grito de ''¡gobernador, torturador!''
Como se recordará, el gobernador Francisco Ramírez
Acuña rechazó tajantemente la propuesta que el presidente
de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), José
Luis Soberanes, le hizo para debatir públicamente los términos
del informe especial sobre la violencia, tortura, vejaciones y violación
a los derechos humanos que sufrieron decenas de detenidos en los hechos
del 28 de mayo pasado en esta ciudad.
Por otra parte, Trinidad González Rodríguez,
obispo auxiliar de la arquidiócesis de Guadalajara, señaló
que la Iglesia católica ''también tiene sus dudas acerca
de lo que pasó después de los hechos violentos del 28 de
mayo'', protagonizados por altermundistas y policías estatales y
municipales en las calles de Guadalajara.
''De lo que pasó en las calles nadie tiene duda,
que rompieron (sic) negocios y que golpearon y que hubo patadas y golpes;
eso ahí está grabado, lo que hay que demostrar es si hubo
tortura en los separos'' de la policía, apuntó el religioso.
El obispo indicó que la arquidiócesis podría
participar como mediadora entre la CNDH y el gobierno de Jalisco a solicitud
de un tercero o de alguna de las partes. Asimismo informó que la
Conferencia del Episcopado Mexicano podría ser la instancia donde
se diriman estas diferencias, pues tiene una comisión de justicia
que podría revisar esta controversia; incluso solicitó a
los medios de comunicación que lo sugirieran.
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