El ejército de Chile dice que lamenta la agresión, que incluyó a periodistas

Guardaespaldas de ex represor chileno agreden afuera de los tribunales a familiares de desaparecidos

ENRIQUE GUTIERREZ CORRESPONSAL

Santiago, 3 de agosto. El ejército de Chile lamentó la agresión de los guardias del general retirado Manuel Contreras, otrora jefe de la policía secreta del ex dictador Augusto Pinochet, a periodistas y familiares de detenidos desaparecidos ocurrida el lunes en los tribunales de justicia.

Sin embargo, la institución castrense expresó su inquietud porque la asistencia de militares en los tribunales se transforma "en instancias de agresión verbal y física" hacia ellos, según señaló en un comunicado.

"¡Asesino, asesino!", gritaron decenas de integrantes de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos cuando vieron aparecer al ex creador y jefe de la disuelta Dirección de Inteligencia Nacional (Dina), la temida policía secreta de la dictadura de Pinochet (1973-1990).

Al término de la diligencia, Contreras, quien purgó siete años de cárcel por los asesinatos del ex canciller Orlando Letelier y de su secretaria Ronnie Moffit, el 21 de septiembre de 1976 en Washington, trató de eludir a los periodistas que lo aguardaban.

Esta situación fue aprovechada por sus guardias que reaccionaron con violencia, mientras arreciaban los gritos de "¡asesino, asesino!".

"No tengo respuesta. No tengo nada que decir", dijo Contreras escuetamente a la prensa. "Los terroristas nunca van a terminar de actuar", agregó, mientras observaba las reacciones de los familiares de los detenidos desaparecidos.

"Es lo normal de los marxistas. Gracias", dijo el ex jefe de la desaparecida Dina antes de abordar el automóvil que lo aguardaba.

Los escoltas de Contreras agredieron a familiares de detenidos desaparecidos y también a periodistas, fotógrafos y camarógrafos que cubrían la información de los tribunales, propinando golpes y manotazos, mientras se escuchaban gritos de "¡asesino, asesino!".

Contreras debe acudir a firmar a los tribunales cada 15 días al quedar en libertad condicional en marzo de 2004 tras ser procesado en una treintena de casos por violaciones a los derechos humanos, a cargo del juez especial Juan Guzmán Tapia.

Contreras está procesado por el asesinato del general Carlos Prats y de su esposa Sofía Cuthbert, en 1974 en Buenos Aires. También se lo vincula al asesinato de 10 dirigentes comunistas y a la Operación Cóndor, la colaboración entre dictaduras sudamericanas para perseguir a izquierdistas en los años 70.

El ejército dijo lamentar la situación vivida, pero reiteró que esto no será "obstáculo para continuar cooperando en la labor de los tribunales".