SALON PALACIO

Carlos Martínez Rentería

Convoca GULA a una comida para todas las izquierdas

COMO UNA "COMIDA histórica de la izquierda mexicana" se augura la convocada para el próximo sábado por la agrupación de Gastrónomos Unidos por la Libertad y el Arte (GULA), integrada por siete restauranteros, entre quienes destacan el periodista y ex diputado Marco Rascón y el muy activo propietario de la Fonda San Angel Roberto González. En un singular manifiesto el grupo enumera algunos de los muchos logros de la izquierda mexicana a lo largo de casi un siglo, pero también advierte con ironía la permanente "antropofagia" de unas tendencias ideológicas hacia otras, por lo que en su lista de ocho "reglas mínimas" para asistir a dicha comida se anota como primer punto: "No comerse unos a otros"; en el punto seis se señala: "Todo acto de intolerancia, será duramente reprimido y condenado". Más allá de lo original y divertido de esta convocatoria, se hace urgente este ejercicio de tolerancia y cofraternidad entre todos los frentes progresistas de la sociedad contemporánea y dejar a un lado la desgastante confrontación interna. La comida será el sábado 24 de julio en el Rancho del Charro (Constituyentes 500, puerta 4) a partir de las 14 horas. El costo será de 200 pesos y por suerte no habrá discursos. Reservaciones a los teléfonos: 5585-96 90 y 5219-5655.

Ya abrieron el DADA X

EL PASADO FIN de semana se reabrió el DADA X después de casi dos meses de clausura. Como una muestra de agradecimiento para todos los amigos solidarios, el lugar dio servicio gratuito el viernes y sábado, también se anunció que de manera indefinida las chelas costarán 15 pesos. Lamentablemente el DADA X tuvo que vivir esta amarga experiencia para entender que los espacios culturales alternativos tienen una responsabilidad fundamental con la cultura y lejos de aspirar a ser negocios rentables deben cerrar filas contra la intolerancia institucional y organizarse para que muy pronto se discuta en las instancias correspondientes la necesidad de legislar al respecto (a eso debería destinar también sus esfuerzos la Comisión Cultural de la Cámara de Diputados).

Nuevo libro de Roberto López Moreno

ENTRE OTROS COMENSALES que se han aparecido los sábados por la Casa de la Niña nos encontramos al poeta chiapaneco Roberto López Moreno, quien recientemente recibió los primeros ejemplares de su libro Abrara (el en que reúne poemas recientes que hablan del "principio del principio"); otros de los que se han asomado por allá fue Eduardo Mosches, coordinador de publicaciones de la Universidad de la Ciudad de México y director de la revista Blanco Móvil, cuyo número en circulación está dedicado a la poesía Iraní; el crítico de arte Carlos Blas Galindo, quien ya cumplió seis meses al frente del Cenidiap; el pintor Philip Bragar, y los editores de la revista alternativa Neurona.

David Huerta en el 15 Encuentro de Escritores en Acapulco

ESTUVIMOS EN ACAPULCO para participar en un frustrante, pero aleccionador campeonato de futbol infantil, desde cuyas entrañas se puede entender por qué nuestra Selección Nacional y también el campeón Pumas son víctimas de sendas goleadas. Pero también advertimos que en lo cultural Acapulco vive buenos momentos, pues desde hace medio año el director de cultura municipal es el dramaturgo José Dimayuga, promotor cultural con experiencia y ganas de romper las inercias. Por lo pronto, por primera vez el municipio ha dado su apoyo al 15 Encuentro Estatal de Escritores, cuyo irónico lema ha sido "El sur existe... a pesar de todo" y su intención mostrar de manera libre y abierta un panorama de la literatura regional. El invitado especial fue el inteligente poeta David Huerta, quien desde luego supo ganarse al respetable.

La Huerta, el Arcelia y Las Galaxias

YA POR LA NOCHE, el periodista y experto guía noctámbulo Juan Carlos Moctezuma nos llevó por un antropológico recorrido de algunos lugares de la intensidad arrabalera. Estuvimos por esa glorieta que en otras épocas fue tan popular y en la que ahora se advierte sólo un abandonado y lúgubre letrero que dice Las Huertas, aquel prostíbulo del incosnciente colectivo urbano está cerrado desde hace varios años. Pero a unas cuadras está el salón Arcelia (dicen que es en honor al apellido Arce de un ex gobernador y el nombre de su esposa Celia), viejo galerón para bailar con orquesta en vivo. Y por algún callejón oscuro llega uno a Las Galaxias, table dance adornado con polvosas piñatitas navideñas, murales con escenas espaciales y mulatas muy jóvenes descalzas y tan pobres como los clientes habituales. Después de las contorsiones, las danzantes se conforman con algunas monedas reunidas en cooperacha. Esto también es Acapulco.

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