México D.F. Domingo 18 de julio de 2004
Lamenta Pérez Escamilla la falta de respuesta
del CNCA en el caso Remedios Varo
Por la incapacidad de las autoridades, coleccionista
retira acervo del Munal
Critica que se planee hacer una megabiblioteca cuando
los museos ''se están cayendo''
Dos obras de Gonzalo Serrano, 17 mil revistas y 2 mil
litografías, el material que retirará
ERICKA MONTAÑO GARFIAS
La decisión del investigador y coleccionista Ricardo
Pérez Escamilla de retirar las colecciones donadas al Museo Nacional
de Arte (Munal) fue motivada por ''el vacío de las autoridades culturales'',
que planean una megabiblioteca mientras los museos ''se están
cayendo y sólo se sostienen con hambre de las personas que tienen
la vocación de trabajar en ellos''.
La
colección de Pérez Escamilla, que se encuentra en el Munal
en calidad de comodato, está integrada por 17 mil revistas, 2 mil
litografías mexicanas del siglo XIX y dos obras del pintor Manuel
González Serrano; sin embargo, hasta el momento el Instituto Nacional
de Bellas Artes (INBA) ni el Munal han sido notificados oficialmente de
la decisión del coleccionista, indicó Patricia Pineda, de
la oficina de prensa de la dependencia.
Ricardo Pérez Escamilla decidió retirar
el acervo después de que el INBA y Walter Gruen perdieron sendos
amparos para evitar que se cumpla la sentencia que declara a Beatriz Jiménez
Varo como ''heredera universal'' de la pintora Remedios Varo. Se encuentran
en juego 38 obras de la pintora surrealista.
''El museo es mi casa; hay una sala que lleva mi nombre
y me va a doler mucho sacarlo (el acervo) de ahí, pero es necesario
que se limite el mal trato que nos dan a los coleccionistas y a todas las
personas que formamos la comunidad cultural de México. Creo que
este acto va a crear conciencia en muchos otros coleccionistas, en las
autoridades y en las personas que trabajan en los museos'', indicó
en entrevista el especialista en arte mexicano.
A lo largo de cinco décadas, agrega, ''formé
una biblioteca, seleccionada con muchísimo cuidado. Nunca compré
libros al por mayor: elegí cada uno de los libros de la biblioteca
procurando que fuera lo más completa posible en relación
con estudios de la historia del arte en México, con sus artistas,
con la sociología del arte, con la estética, la ética
y la filosofía del arte; ése es el núcleo principal,
pero también hay muchos libros relacionados con todos los países
del mundo y necesitamos explicar esa integración de la cultura mexicana
con la cultura universal''.
La biblioteca se ha hecho indispensable en casi todas
las exposiciones; la han consultado para investigaciones, pero los libros
también se han exhibido como parte integral de una muestra, señala
Pérez Escamilla, y subraya: ''conscientes de que debe ser una biblioteca
para consulta pública, decidí enviar al Munal la primera
parte, que es toda la hemeroteca.
''Tengo 72 años, trabajo entre 12 y 15 horas diarias,
vivo tranquilo y con la gran satisfacción de ser productivo y de
haber pasado ya la etapa de los trabajos para beneficios personales; mi
ilusión es formar una gran biblioteca para el día que yo
falte''.
Por esa razón ''decidí comenzar la entrega
de la biblioteca, pero me estoy dando cuenta del gran vacío de autoridades
culturales en México. En estas condiciones me entero que una pintura
donada al Museo de Arte Contemporáneo de Monterrey, El fumador,
de Rufino Tamayo, fue vendida en subasta pública y no tenemos información
de lo que está sucediendo''.
''Me doy cuenta -añade- que se están perdiendo
38 obras de Remedios Varo y nunca hemos oído que se manifieste la
presidenta del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Sari Bermúdez)
ni el secretario de Educación Pública (Reyes Tamez). En este
caso se debería oír hasta la voz del Presidente de la República,
porque se trata de un patrimonio nacional insustituible; si se pierden
esas piezas nunca vamos a recuperarlas, porque nuestras autoridades no
tienen presupuesto para adquisición".
No sólo eso, los museos se están desmoronando,
atraviesan por una gravísima crisis porque no tienen presupuesto;
las exposiciones son menos que las que se presentaban anteriormente y de
menos calidad; lo mismo que las publicaciones que se están haciendo,
como por ejemplo los catálogos, advierte el especialista.
''Los museos están sostenidos con el hambre de
las personas que tienen la vocación de trabajar en ellos; los trabajadores
subsidian con su trabajo; hay donación constante de trabajo de los
investigadores, de los curadores, de los fotógrafos, de los vigilantes,
de todo el mundo. Los salarios que están pagando son indignos.
''Hacen alardes de que van a hacer una biblioteca extraordinariamente
grande en dos años. No sé cómo la van a hacer, no
saben de lo que se trata: organizar una biblioteca, tener personal, catalogar,
crear secciones y tener todo al servicio del público. Supongamos
que lo hacen; los salarios de los trabajadores no están para eso".
Y propone que en lugar de construir ese elefante blanco
las autoridades se ocupen de quienes entregan su vida a difundir el
arte, al cuidado y la organización de los museos. "Me doy cuenta
de que los museos no pueden recibir donaciones y por esa razón voy
a retirar lo que tengo del Munal".
Existen propuestas de instituciones nacionales y de Estados
Unidos para recibir ese acervo. Al respecto comenta: ''no soy nacionalista
de rancho. Creo que si en algún lugar del extranjero lo van a utilizar,
lo van a hacer funcionar, el público va a tener acceso a él,
va a ser conservado, se puede ir. Además sería poner una
bandera de México en Estados Unidos, donde nos desprecian tanto
y donde necesitamos imponernos por nuestra cultura, que es nuestra principal
embajadora''.
Aún no define dónde va a dejar su colección,
"pero por lo pronto tiene su casa y regresa a mi casa".
Hasta ahora, añade el investigador, las autoridades
culturales no se han puesto en contacto con él.
El INBA aún no recibe notificación
Al respecto Patricia Pineda, de prensa del INBA, destacó
que Ricardo Pérez Escamilla no ha notificado de manera oficial su
decisión, y precisó que por tratarse de una colección
concedida en un contrato de comodato el investigador puede rescindirlo
si así lo considera conveniente.
Pineda destacó que el Munal "ha cumplido el compromiso
de custodiar, conservar, documentar y difundir su acervo. Hay una sala
que lleva el nombre de Ricardo Pérez Escamilla. El Munal sí
ha cumplido. Hay un voto de confianza de los coleccionistas al dejar un
acervo, pero también una responsabilidad institucional por parte
del Munal que se ha cumplido cabalmente".
Asimismo, reiteró que el INBA "ha atendido con
toda responsabilidad y el conocimiento de las leyes y le ha dado seguimiento
puntual al caso de Alexandra y Walter Gruen, quienes han sido asesorados
por el CNCA y del INBA. Walter Gruen ha señalado en distintas ocasiones
que es momento de reconocer esfuerzos y hacer alianzas para librar juntos
la batalla porque el pueblo de México es el legítimo propietario
del acervo de Varo''.
La respuesta oficial del INBA a Ricardo Pérez Escamilla
se dará a conocer en las próximas horas.
|