México D.F. Sábado 17 de julio de 2004
El próximo martes será inaugurada
en la rejas del Bosque de Chapultepec
Memoria y diálogo entre generaciones en una
exposición fotográfica al aire libre
Valorar y entender la ciudad de México, el objetivo
de la exhibición, dice su curadora
FABIOLA PALAPA QUIJAS
Evocar el pasado de la ciudad de México, recorrer
las calles de antaño, ver rostros y atuendos de diferentes épocas,
es la propuesta de la exposición Memoria de la Ciudad de México.
Cien años 1850-1950, que se abrirá el próximo
martes, en las rejas del Bosque de Chapultepec, al aire libre.
Sumergirnos en los recuerdos para descubrir cómo
ha cambiado la urbe e imaginar el olor de la tierra después de la
lluvia, mirar a las personas caminar por las grandes avenidas hasta encontrarnos
con el clásico barrendero, son algunas de las imágenes reunidas
en esa muestra.
Se incluyen 170 imágenes de gran formato provenientes
de los archivos y colecciones: Hermanos Mayo, Compañía Mexicana
de Aerofot, SA, Manuel Ramos, Manuel Alvarez Bravo, Juan Rulfo, Abel Briquet,
Enrique Díaz, Claude-Joseph-Désiré Charnay, Archivo
Díaz, Delgado y García, Fondo Casasola y Valleto y Compañía
(Julio, Guillermo y Ricardo Valleto).
Por un momento puede resultar distinta y distante la mirada
del pasado, que forma parte de la vida en la capital, pero la intensidad
de las épocas llegará a la mente con ver una imagen.
Existen mil formas de aproximarse a la ciudad. La curadora
Patricia Mendoza eligió montar una máquina del tiempo para
que el espectador vaya de la antigüedad a la modernidad y viceversa.
''En
la exposición, el recorrido se puede iniciar a partir de la ciudad
lacustre para llegar a la urbe volcánica, representada por Ciudad
Universitaria como símbolo de modernidad y la primera como símbolo
del arranque de nuestra ciudad", explicó Mendoza.
El espectador podrá apreciar los dos sentidos de
la exposición, lo importante es mirar a la ciudad como el personaje
y sus habitantes; las fotografías invitan a vivir lo cotidiano de
la urbe de otra manera y en otro espacio.
Al recorrer las rejas del bosque, el público estimulará
la memoria y el diálogo entre las generaciones. Despertar la memoria
histórica respecto a la evolución y la transformación
de la ciudad es el reto de la exposición.
Caminar por la Glorieta de Reforma y avenida Juárez,
entre los años 30 y 50, nos lleva a reflexionar sobre las nuevas
oficinas que aquí se ubican; los espectaculares habían invadido
los edificios y las noches parecían más tranquilas.
La curadora señaló que se busca ''valorar
y entender la ciudad y sentirnos parte de ella. Espero que con esta exposición
sea el comienzo de otras que permitan descubrir las ciudades que habitamos".
La memoria, fiel a los sentimientos, revivirá momentos
en algunas personas al ver las fotografías de las fuerzas federales
parapetadas en el Zócalo, el 9 de febrero de 1913. Tal vez otros
prefieran recordar la algarabía que causaba la Carpa Bombay, cuando
hombres y mujeres se juntaban a la entrada del teatro.
Transformación de la urbe
Para el montaje de la exposición se consultaron
textos de diversos historiadores, escritores y arquitectos como Agustín
Yáñez, Carlos Fuentes, Salvador Novo, José Alvarado,
Artemio del Valle Arizpe, Ramón del Valle Inclán, Vicente
Quirarte, Luis González y González, David Huerta y Carlos
Martínez Assad.
Alejandro González Durán, coordinador interinstitucional
de la Secretaría de Cultura, indicó que Memoria de la
Ciudad de México muestra la grandeza de la metrópoli
y presenta aspectos que conciernen a muchos de los sucesos y épocas
que han enriquecido la cultura nacional".
Las imágenes reflejan la transformación
de la urbe con la llegada de migrantes, las costumbres, moda y uno que
otro personaje callejero que transita por la calle o en una bulliciosa
avenida.
Se incluyen dos panorámicas de cinco metros de
largo con vistas de 1923 de Reforma y Chapultepec, así como cinco
fotos estereoscópicas. Semblanzas de las fotografías y archivos
e índices cronológicos.
Las fotografías fueron ampliadas mediante digitalización
e impresas en un Sistema Lamda Digital de alta resolución, laminadas
y encapsuladas en dos soportes sintra (plástico rígido) para
que no se deterioren por el sol y la lluvia.
En un espacio de alrededor de mil metros líneales
del Paseo de la Reforma, la muestra ocupará desde la entrada de
Gandhi hasta la puerta del zoológico de Chapultepec.
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