México D.F. Sábado 17 de julio de 2004
Insta a emitir leyes en materia de ética
parlamentaria para impedir tráfico de influencias
Urge evitar que legisladores aprovechen su condición
para hacer negocios: Jackson
ANDREA BECERRIL
Con clara dedicatoria a Diego Fernández de Cevallos,
el presidente del Senado, Enrique Jackson Ramírez, informó
que es necesario legislar en materia de ética parlamentaria a fin
de impedir el tráfico de influencias y el conflicto de intereses,
"esa dualidad perniciosa" que permite a representantes populares aprovecharse
de su posición parlamentaria para hacer negocios.
Durante
una videoconferencia que expuso a invitación del Congreso de Perú
sobre el tema Etica parlamentaria y partidos políticos, Jackson
Ramírez reconoció que en México falta aún "mucho
camino por recorrer" en esa materia, la cual tiene mucho que ver con "principios,
valores, así como con la conducta y seriedad de los legisladores".
Dijo que para recuperar la confianza ciudadana, los legisladores
mexicanos requieren desterrar prácticas nefastas. "Ustedes y nosotros,
que hacemos las leyes, sabemos que la falta de ética abona el terreno
de la corrupción y la impunidad, lo que nos coloca en un estado
de indefinición".
En el caso de los parlamentarios mexicanos, recalcó,
es necesario elaborar un conjunto de reglas legislativas que impidan el
tráfico de influencias y el conflicto de intereses. Dijo que se
trata de una "dualidad perniciosa", por la que un senador o diputado aprovecha
su labor parlamentaria para hacer negocios, así sea con el desempeño
de su profesión.
No mencionó a nadie por su nombre, pero la alusión
toca a senadores que al mismo tiempo litigan contra dependencias federales,
como los panistas Diego Fernández de Cevallos y Fauzi Hamdan Amad,
quienes incluso se han visto envueltos en escándalos.
El presidente del Senado expresó en la videoconferencia,
que se transmitió al Congreso de Perú, que otro asunto relacionado
con la ética que también debe analizarse en el continente
es el cabildeo y la gestoría promovidos por grupos interesados en
algún proyecto o reforma de leyes. "Tenemos que fijar reglas para
evitar que el dinero se convierta en factor de influencia y de intercambio
en el Poder Legislativo".
Asimismo, recalcó, es imprescindible revisar los
alcances de la protección a los legisladores mediante su fuero.
"Tenemos que analizar con toda conciencia los límites y excepciones
de la inmunidad constitucional de que gozamos los parlamentarios".
Aclaró luego que tal revisión al fuero de
los legisladores es necesaria de manera especial en el caso de aquellos
sometidos a juicio político, para garantizar que "la inmunidad no
es sinónimo de impunidad".
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