París y Bagdad reanudan vínculos diplomáticos

Ataca la resistencia un hospital y la penitenciaría de Abu Ghraib

DPA, REUTERS Y AFP

Najaf, 12 de julio. Un comando de 45 hombres atacó un hospital en la sureña ciudad de Najaf, de los cuales cuatro murieron al enfrentarse a la policía, mientras la prisión de Abu Ghraib, al oeste de Bagdad, fue alcanzada por granadas de mortero con saldo de un herido, al continuar la presión de la resistencia.

Los hombres que atacaron el hospital, situado en los suburbios de esta ciudad santa chiíta, utilizaron armas ligeras y lanzagranadas. "Cuatro atacantes murieron, seis resultaron heridos y el resto escapó", señalaron fuentes policiacas, las cuales negaron que éstos fuera miembros del Ejército de Medhi, la milicia del jefe radical chiíta Moqtada al-Sadr.

El gobernador de esta localidad, Adnan al Razfi, anunció una recompensa de 700 dólares a quien dé información sobre "las redes terroristas" y sobre ladrones armados y secuestradores.

Insurgentes dispararon la noche del domingo a este lunes granadas de mortero contra Abu Ghraib hiriendo a una persona, informó el comando central estadunidense. Se trata del sexto incidente de este tipo contra el penal desde el 20 de abril, fecha en la que un ataque similar dejó 22 presos muertos y más de 100 heridos.

Según los estadunidenses, en Abu Ghraib hay 2 mil 300 "presos de seguridad", término que se aplica a quienes participaron en ataques contra las tropas extranjeras en Irak lideradas por Estados Unidos.

A su vez, una audiencia preliminar para determinar si una corte marcial debe juzgar a la soldado estadunidense Lynndie Evans, acusada de haber humillado sexualmente a detenidos iraquíes en Abu Ghraib, fue postergada para el 3 de agosto.

Por su parte, el presidente interino de Irak, Ghazi al Yawer, advirtió a los insurgentes que "se arrepienten o enfrentarán la espada (pena de muerte)", indicó la televisora Al Jazeera. "A los terroristas, secuestradores y violadores: esta es su última oportunidad. Después sólo queda la espada. Acabaremos con ellos", manifestó.

Al Yawer añadió que el gobierno interino espera anunciar "pronto" una amnistía condicional para quienes tengan armas.

En tanto, los ministros de Relaciones Exteriores de la Unión Europea (UE) subrayaron hoy a su homólogo iraquí, Hoshyar Zebari, su categórica oposición a la pena de muerte, que éste justificó por la situación de inseguridad en el país. "Nos oponemos a la pena de muerte, se lo manifestamos a mi colega y esperamos continuar este diálogo, pero el mensaje es muy claro. Espero que hayamos podido convencerlos", declaró en conferencia de prensa el ministro holandés Bernard Bot.

El canciller iraquí manifestó que la imposición de la pena capital es "una decisión muy difícil", aunque dijo "comprender la posición europea". Subrayó: "necesitamos una medida de disuasión para crímenes serios o terroristas graves".

Zebari declaró además que su gobierno espera "de la Unión Europea y de cada uno de los países que la integran ayuda concreta, más directa y más visibilidad política de la UE en Irak".

Por lo pronto, hoy Bagdad y París restablecieron oficialmente sus relaciones diplomáticas, congeladas tras el inicio de la guerra del Golfo de 1991, cuyo detonante fue la invasión iraquí a Kuwait.

El secretario general de la Organización de Naciones Unidas, Kofi Annan, designó al embajador de Pakistán en Estados Unidos, Ashraf Jehangir Qazi, como el nuevo enviado especial de la ONU a Irak, en sustitución del brasileño Sergio Vieira de Mello, muerto en un atentado en agosto de 2003.