México D.F. Martes 13 de julio de 2004
MEXICO SA
Carlos Fernández-Vega
Autrey espera ser reivindicado como Cabal y el Divino
La justicia mexicana le evitaría la cárcel
PARA DOCUMENTAR EL optimismo sobre los logros de los que algunos tercos insisten en llamar "aparato mexicano de justicia", ayer se informó que, tras varios meses prófugo y después de muchos años de gozar de la impunidad que garantiza ser amigo de los "grandes", el empresario Xavier Autrey fue detenido en España.
EL OTRORA "HOMBRE DE negocios" que fugazmente apareció relacionado entre los multimillonarios mexicanos marca Forbes (más de mil millones de dólares en la chequera), es acusado de defraudar al fisco, a la banca, que de tiempo atrás lo persigue para que cubra sus adeudos, y a uno de los jugosos consorcios -Altos Hornos de México- que el gobierno de la República generosamente le cedió durante el salinato y que fue la base para que estructurara el Grupo Acerero del Norte, hoy en quiebra.
DE ACUERDO CON LA información disponible, la policía española lo detuvo en Mahón, junto con su socio Juan Carlos Carredano Pérez, integrante del consejo de administración de AHMSA, en sus domicilios particulares en Menorca, Islas Baleares. La captura fue practicada por agentes de la policía ibérica en coordinación de la Agregaduría Legal de México en la Unión Europea (UE) y Suiza, con base en tres órdenes de aprehensión catalogadas en "ficha roja" por la Interpol, señala un despacho de Notimex. Falta por aprehender a Alonso Ancira, socio de Xavier y hasta hace poco director de Altos Hornos.
HASTA ALLI EL OPTIMISMO, porque si Xavier Autrey (prófugo desde marzo pasado) se muestra tal cual es -mañoso en grado sumo- en breve solicitaría la deportación a México, evitando así una innecesaria estancia prolongada en las cárceles españolas, con el fin de que sea precisamente el "aparato mexicano de justicia" el que sin mayor pérdida de tiempo "atienda" y "resuelva" su caso. Mientras culmina ese proceso, sus abogados trabajarán incansablemente en los juzgados nacionales en busca de un bloque de amparos para que su cliente regrese a la patria y ni de lejos pise un reclusorio.
DEL AVION A SU CASA, sólo en espera de la exoneración que más temprano que tarde le obsequiaría el susodicho "aparato mexicano de justicia". Ello no sería novedoso, porque el caminito está más que andado y en estos menesteres la "vía española" ha sido una verdadera academia: Carlos Cabal, Angel Isidoro Rodríguez, Tomás Peñaloza y ahora Xavier Autrey, por citar los nombres de algunos graduados.
PARA SER UN FARMACÉUTICO de origen, no se puede negar que Xavier Autrey tiene el don de estar metido en cuanto chanchullo con recursos públicos se pueda uno imaginar: privatización bancaria, atraco con Tesobonos, Fobaproa, subsidios azucareros, deudas con Finasa y con el Banco Nacional de Comercio Exterior, evasión fiscal y lo que la memoria rinda, amén de que a lo largo de los años ha toreado denuncias, demandas y órdenes de aprehensión.
CUANDO EN MARZO PASADO la Secretaría de Hacienda lo acusó de evasión fiscal y se giraron las respectivas órdenes de aprehensión, Xavier Autrey y Alonso Ancira huyeron del país, no sin antes exprimir hasta la última gota de Altos Hornos de México, que fuera una de las mayor acereras de América Latina, la cual desde 1999 declararon en suspensión de pagos por un débito aproximado a los 2 mil millones de dólares.
EN 2001, EL BANCO DEL Bajío -propiedad de la familia de Ramón Aguirre Velásquez, ex secretario de Programación y Presupuesto y ex regente del Distrito Federal- presentó querella en contra de Autrey y Ancira por "falsear información para obtener un crédito por 11 millones de dólares", de tal suerte que esta institución también anda tras los huesos de esos "hombres de negocios", a la par que un grupo de instituciones bancarias que si bien no son moralmente sólidos, sí reclaman que los empresarios liquiden los empréstitos, en la supuesta lógica de que ladrón que roba a ladrón tiene diez años de perdón.
XAVIER AUTREY SIEMPRE fue la cabeza visible de un consorcio farmacéutico familiar (Grupo Casa Autrey) hasta que milagrosamente se convirtió -no sin la intervención y favores de los amigos privatizadores- en uno de los principales "compradores" de empresas del Estado en tiempos de Miguel de la Madrid, Carlos Salinas y Ernesto Zedillo, cuyos gobiernos generosamente le "vendieron" más de 20 paraestatales, entre ellas una de las joyas de la corona, Altos Hornos de México.
COMO PARTE DE LA CORRUPCION imperante en el país, un especialista en aspirinas y antidiarreicos se convirtió -por obra y gracia de Los Pinos- en banquero, acerero, minero, operador de satélites, hullero -de hulla- y tantas otras actividades empresariales por él desconocidas, pero ampliamente usufructuadas. Los resultados saltan a la vista: tronó y vendió todo lo que compró, no sin antes exprimirle hasta la última gota.
OTRA JOYA QUE DESTACO entre el lote paraestatal por él y sus socios adquirido fue Multibanco Comermex -que fuera el cuarto en orden de importancia en el sistema bancario mexicano-, después bautizado simplemente como Inverlat, hoy en manos extranjeras. En febrero de 1992 dicha institución pasó a manos del farmacéutico, en asociación con Agustín F. Legorreta Chauvet, ex cabeza de Banamex antes de la expropiación de 1982, y sus hermanos Carlos, Sergio y Adolfo Autrey Maza. Antes del decreto lópezportillista, la familia Autrey administraba la Casa de Bolsa México, que vendieron a Bancomer (hoy BBVA), y por ello se creyó capaz de manejar un banco, obviamente reprivatizado en tiempos de Carlos Salinas.
ADEMAS, LA GRACIA presidencial le concedió paraestatales como Aceros Planos, Compañía Minera Real del Monte y de Pachuca, Consorcio Minero Benito Juárez-Peña Colorada, Carboeléctrica Río Escondido, Hullera Mexicana y Satélites Mexicanos.
TODO LO ANTERIOR POR OBRA y gracia de ese gran abanico que genéricamente se conoce como corrupción: de vender aspirinas y laxantes pasó a administrar ese universo, y hoy sólo espera que el "aparato mexicano de justicia" lo reivindique, como a Cabal, El Divino, Peñaloza y todos los demás.
Las rebanadas del pastel:
TIENE RAZON EL INQUILINO de Los Pinos cuando dice que aunque se diga nadie lo cree: Marta Sahagún asegura que no tiene intención de ser candidata a la Presidencia de la República y confirma la tesis presidencial. [email protected]
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