COMO HACER ADOBES

EL CLIMA DEL DESIERTO es caluroso durante el día y, en la noche, frío. Una de las propiedades del adobe es ser térmico, pues su estructura lo hace aislante por lo que en el interior de una construcción de adobe se logra mantener una temperatura uniforme, mientras en el exterior las variaciones pueden ser extremas. Seguramente los pueblos originarios que habitaron el norte del país fueron los primeros en hacer construcciones con barro. Así lo testimonia Paquimé, en Casas Grandes, Chihuahua.

PROBAR LA TIERRA

ANTES DE INICIAR el trabajo y con el propósito de que la mezcla sea adecuada, es necesario probar la tierra que se empleará para hacer adobes. Se toma una muestra del banco de material y se pone dentro de un frasco de vidrio de boca ancha con capacidad aproximada de un litro. La muestra de tierra, deshecha con la mano, ocupará dos tercios del frasco; se llena el recipiente con agua en la que se han disuelto dos cucharadas de sal gruesa y se agita fuertemente durante un minuto.

SE DEJA REPOSAR hasta que el agua esté clara. En el fondo se asentará el material más pesado formando una capa visible; sobre ésta, se notará otra capa de material más fino y arriba habrá agua. La proporción adecuada es dos partes de la capa baja por una de la otra capa. Agregando material de otros lados se puede lograr la proporción necesaria.

EL REPOSO DE LA MEZCLA

PARA HACER ADOBES, se mezcla una carretilla de tierra con un bote de agua de 19 litros para darle una consistencia de pasta uniforme. Se deja reposar la mezcla por dos días. Se bate de nuevo y se le agrega la fibra vegetal. Se mezcla hasta obtener una pasta uniforme; nuevamente se deja reposar por dos días más. Se bate una vez más y la pasta estará firme y lista para depositarse en los moldes. La tierra de cada carretilla rinde lo suficiente para nueve adobes.

AL LODO BATIDO se le agrega la fibra vegetal picada en fragmentos de entre tres y ocho centímetros. Puede ser zacate, agujas de pino, fibras de la borra o estopa de coco y paja de trigo; en ocasiones se utiliza estiércol de res o de burro, pues las fibras que no se han digerido cumplen esta función. Para cada adobe será suficiente lo que toman dos manos juntas de fibras vegetales.

SE COLOCA EL MOLDE en el suelo en una superficie plana que ha sido cubierta por una delgada capa de arena y polvo fino de tierra seca. Se espolvorean las paredes del molde húmedo con la misma arena para que el lodo no se pegue; se coloca lodo en el centro del molde y cuando hay suficiente se empuja con los puños hacia las esquinas y las paredes para que el lodo llene todo el molde. Con un rasero hecho con una tabla delgada se retira el lodo excedente.

SE SACA EL MOLDE SUAVEMENTE cuidando que no se deformen los lados del adobe y se repite la operación hasta obtener el número de adobes requerido.

ALGO QUE PUEDE MEJORAR la elaboración de adobes, es poner a macerar por 20 días cuatro o cinco pencas maduras de nopal en un ''tambo" de 200 litros; el agua resultante se usará para hacer los adobes. La baba de nopal ayuda a la cohesión del material del adobe.
 

En Mitla, Oaxaca, hay un conjunto en el que se empleó el adobe.

EN NAHUATL / xámitl = adobe de barro