Se ha restringido la exportación de fructosa, la queja

Rechaza México pretensión de EU de eliminar impuesto a bebidas

MIRIAM POSADA GARCIA Y AGENCIAS

México rechazó la petición que Estados Unidos hizo ante la Organización Mundial de Comercio (OMC) para la instalación de un panel de solución de controversias, a través del que los estadunidenses pretenden que el Congreso mexicano elimine la aplicación del impuesto especial sobre producción y servicios (IEPS) a los jarabes y bebidas que se endulcen con cualquier otro producto que no sea azúcar mexicana.

Sin embargo, la decisión del Legislativo se derivó de la negativa estadunidense a que ingresara azúcar nacional a su mercado, con lo que violentó lo dispuesto en los acuerdos comerciales bilaterales.

Luego de más de dos meses de pláticas entre negociadores mexicanos y estadunidenses, el representante de comercio de Estados Unidos, Robert Zoellick, solicitó de manera formal a la OMC la creación de una comisión de arbitraje para resolver lo que consideran un agravio para los productores estadunidenses de alta fructosa o jarabe de maíz.

La ''violación'' en la que a decir de la parte estadunidense incurrió México, consiste en la aplicación de un impuesto del 20 por ciento a los jarabes y bebidas hechos con edulcorantes a base de maíz, o cualquier otro que no sea azúcar.

En un comunicado, Zoellick aseguró que ''Estados Unidos cree que el impuesto mexicano sobre las bebidas viola las obligaciones de México porque discrimina los productos estadunidenses hechos con edulcorantes a base de maíz'', y agregó que ''el impuesto discriminatorio mexicano sobre las bebidas es la última de una serie de medidas aplicadas para proteger a los productores mexicanos de azúcar frente a la competencia''.

Esta medida, señaló el representante comercial, ''ha restringido de manera severa las exportaciones de fructosa a México'' y destacó que la eliminación de ese impuesto se ha vuelto un asunto ''crítico para los productores de jarabe de maíz de estados como Illinois, Iowa y Nebraska''.

Por separado, la Secretaría de Economía señaló que el gobierno de México rechazó el panel solicitado por los estadunidenses, debido a que aún continúan las pláticas para llegar a un acuerdo común. Rechazar el panel en primera instancia es un derecho que tiene México, de acuerdo con las normas establecidas por la OMC.

Sin embargo, las reuniones de trabajo entre negociadores continuarán hasta julio y si no hubiera acuerdo entonces Estados Unidos podrá solicitar nuevamente la instalación del panel, petición que entonces deberá aceptar México.