"Estamos fuera de tiempo": José Angel Quintanilla

Preocupa a editores que los cambios retrasen la elaboración de libros

CLAUDIA HERRERA BELTRAN

El presidente de la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana, José Angel Quintanilla, señaló que en el sector hay preocupación por las reformas en secundaria, porque desde hace dos meses debieron estar listos los planes y programas de estudio de ese nivel educativo, para que las editoriales comenzaran a elaborar los libros de texto. "Estamos fuera de tiempo", advirtió.

Afirmó en entrevista que los editores temen que se repita la historia de 1993, cuando los libros de texto de secundaria se elaboraron muy rápido y con errores, lo que provocó que algunos títulos tuvieran que reponerse hasta en tres ocasiones, con pérdidas para esta industria, que obtiene 650 millones de pesos anuales por la venta de libros de secundaria.

Actualmente, 25 editoriales ofrecen 500 títulos de libros de texto de secundaria, que adquieren tanto los padres de familia, como la Secretaría de Educación Pública (SEP) y los gobiernos de los estados; estos dos últimos, como parte del programa de distribución gratuita de libros.

En torno a la polémica por la reducción de contenidos en historia, declaró que hay un viejo adagio que dice que quien no conoce la historia va a repetirla, pero aclaró que a los editores no les corresponde definir los planes y programas de estudio que se aplicarían a partir de agosto de 2005.

Informó que en varias ocasiones se han reunido con el secretario de Educación Pública, Reyes Tamez, y con el subsecretario de Educación Básica, Lorenzo Gómez Morin, a quienes les han explicado las necesidades que tienen para preparar los libros a tiempo.

"Los editores de textos han dicho por conducto de la cámara industrial que con la mayor amplitud que nos pudieran dar los programas, esto sería mucho mejor para el sistema educativo. Estamos preocupados, porque si bien no tenemos una participación directa en el debate, somos los que sabemos hacer los libros", añadió.

Dijo que de aprobarse la propuesta de la SEP, que plantea la disminución del número de asignaturas de 34 a 24, es probable que se incremente el precio de los libros de texto, porque en el caso de las asignaturas de biología, física, química, historia, geografía y formación cívica y ética muchos de los contenidos se agruparían en un solo libro.

Indicó que una vez que se les entreguen los nuevos programas para secundaria, los editores requieren entre cuatro y cinco meses para elaborar los libros, pero "si tenemos más tiempo es mejor para todos, para el autor, para la SEP y para que tengamos más calidad".

En opinión del representante de los editores en México, lo más conveniente es que ellos hubieran tenido los planes y programas de estudio desde hace dos o tres meses. Manifestó que en condiciones normales entregan en julio los libros de texto para su evaluación en la SEP, proceso que se lleva seis meses, porque involucra varias etapas de correcciones.

Puntualizó que conocen versiones preliminares de los planes y programas de estudio propuestos por la SEP, pero que tienen menos información de la que disponen los maestros sobre los cambios.

Recordó que en 1993 las editoriales tuvieron una "experiencia muy mala", porque por la premura con que se hicieron los cambios los libros tuvieron que corregirse varias ocasiones.

"En 1993 tuvimos que hacer varias versiones de libros, debido a los errores que provocó la premura. Nos acarreó problemas, como de estar trabajando a matacaballo para poder tener los materiales a tiempo", insistió.

Por otra parte, señaló que la industria espera una reducción de sus ventas debido a que se necesitarán menos libros de texto (a partir de la disminución de asignaturas). Sin embargo, expresó su esperanza de que se repongan con la eventual venta de manualews para telesecundaria, cuya elaboración dejaría de quedar a cargo de la SEP.

Subrayó que en México existen autores preparados para elaborar los libros de texto de secundaria con los nuevos enfoques y contenidos, debido a que las editoriales cuentan con un número suficiente de maestros, investigadores y académicos que dominan todas las materias.